Nakahara chuuya a sido engañado por Osamu Dazai, para intentar olvidar ese echo va a un bar.
Fyodor Dostoyevski, va a distraerse a un bar porque no tenía nada que hacer, y se encuentra con el Pelirrojo.
Ambos se llevan bien esa noche, con el tiemp...
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┛ Perspectiva de Chuuya ┗
6:00
Bien, nuevo día, en toda la noche Dazai no volvió, supongo que prefirió estar con esa tipa, pero no importa, estuve a punto de levantarme para ir al trabajo cuando recordé que tenia los días libres.
Y al mismo tiempo recordé que debía ir por mi celular y mi saco, aparte que también debía darle su Saco a Fyodor, primero fui a prepararme algo de comer, cuando acabe fui a la habitación por el saco de Fyodor, y lo lleve al baño para ponerlo en la Lavadora.
Cuando ya estuvo lavada y secada la puse en una bolsa de esas típicas donde vienen las camisas o sacos comprados y también la puse en otra bolsa, pero esta era de color negra, fui a la habitación a vestirme con algo mejor para ir a la casa de Fyodor, me puse una camisa Roja y un pantalón negro, antes de elegir esa vestimenta estuve debatiendome que ponerme, parecía una chica de colegio preparándose para su primera cita.
10: 00
Al llegar toque la puerta con cuidado, y unos minutos después abrió un chico Peli blanco.
─ Ehh, Hola, buenos días, busc- ─ Dije nervioso, pero este no me dejó acabar
─ Ey, tú eres el Chico de la otra vez, pasa, soy Nikolai ─
─ Mucho gusto, soy Nakahara Chuuya, decía, vengo a buscar a Fyodor ─ Me presente mientras pasaba y el chico sonrió
─ Bien, Chuuya, siéntate aquí yo iré a llamar a Fyodor ─ Me dijo, me hizo sentar en el Sillón de la Sala, yo sólo observé el entorno donde me encontraba, era bastante grande.
Unos minutos después escuche a alguien entrar.
─ Ey, Chuuya, ¿Qué haces aquí? ─ Dijo Fyodor con una sonrisa
─ Yo los dejó solos ─ Dijo El peli blanco y luego se retiró
─ Vine a darte tu saco y a recoger mi celular ─ Dije sonriente
─ Oh, claro, gracias por traerlo ─ Dijo, yo le di la Bolsa donde se encontraba su saco
─ No es nada, lo lave ya que olía a trago y estaba un poco sucio también ─ Dije
─ No te ubieses molestado, espera, ya traigo tu celular y tu saco ─ Y vi como este salía de la Sala.
Espere un poco, luego escuche sus pasos bajar.
─ Aquí está tu Celular y tu Saco ─ Me dijo, y Me dio las cosas, note que también el había lavado mi Saco y que había cargado mi celular
─ Gracias ─ Respondi cortésmente
─ Por cierto, te ves bien con esa camisa Roja ─ Me dijo, pues mi Saco No estaba Botonada
