Sweet Brunette

Capitulo 5: Perro.

-¡Oh diablos!- Gemí ante el sabor de la salsa escurrirse por mi garganta.

-Te dije que las hamburguesas de Teto eran el paraíso.

Asentí mientras veia como Roxy, West y Cory devoraban sus platos.

Si que lo son.

Voltee mi mirada y me encontré con la Rubia -Alice- según escuché de Roxy, mirandome fijamente. Todo gracias a la atención que recibia por parte de Lucas.

Si, el hermano de Roxanne.

Si. tambien el que esta muy bueno.

Tenía el ceño fruncido en mi dirección y sus ojos azul claro podrían mandarme cuchillas invisibles si quisiera.

Regresé mi mirada a mi comida justo cuando el chico tomo su rostro y le propinó un beso que hasta donde yo estaba podía escucharlos.

Demonios esto es asqueroso.

Gracias a todos los santos, se sentaron en otra mesa.

--Hev, ¿Estas bien?.

Asenti mientras terminaba de devorar mi comida.

Roxy, jamas dudaré de tus gustos de nuevo.

(...)

-Bebe, ¿Por qué no puedo acompañarte?

La rubia hizo un horrible puchero mientras se bajaba del auto.

-Lucas apurate. Mientras mas tiempo pasemos en la cueva del zorro, O de la zorra, mejor dicho. Más me duele el culo.

West y Cory rieron ante el comentario de Roxanne. El sonrió descaradamente.

Que maldito.

Aunque admito que fue jodidamente genial.

-Muñeca ya te dije que ire a trabajar. Tu presencia me distraeria de mis deberes.

Arcadas haciendo acto de presencia.

Alice hizo una mueca. A lo que roxy respondió con un bufido.

Antes de siquiera dar un paso, se agachó y devoró la boca de Lucas de nuevo; metio la mano hacia el carro y descaradamente le apreto la entrepierna en frente de todos.

¿¡Pero que cojones!?

Simplemente sonrió ante mi mirada y se alejó de nosotros al entrar porfin a su casa.

-Mierda Lucas. Dile a tu perra que no te mee enfrente de mi; acabo de comer, joder.

El nombrado sonrió.

-No es mi culpa que se sienta amenazada.

Hizo un cambio con la palanca y arrancó el auto.

¿Amenazada? ¿Por mí?

¡¿Que carajos?!

-¿Lucas, a caso vendiste un riñon para comprarte el auto?.

West, quien fue el que rompió el silencio; se había acomodado para quedar entre los dos asientos delanteros.

-No. El auto es de J.

Fue lo unico que dijo antes de encender la radio y colocar Thunderstruck de ACDC.

Mierda. Esa canción.

-¡Lucas!, te dije que esa cancion me trae malos recuerdos.

-¡No!