Respuestas

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Capítulo 3: Parte II

Lauren, 6 de octubre, México

Lauren, sin poderse mover, dejó que Demi hiciera lo que quisiera con ella...

Después de todo, tampoco se veía capaz de dormir con tantos pensamientos juntos y alborotados en su mente. Su mentora le había prometido respuestas y era todo lo que necesitaba en aquellos momentos, dormir podría esperar.

Después de todo se había pasado meses durmiendo...

La artista esperó pacientemente en la habitación -no tenía cómo moverse tampoco- mientras que su mentora se peleaba con las enfermeras para sacarla de allí. Y no veía el problema, tampoco era cómo si fuera a sacarla del edificio, tan solo necesitaba moverla a la planta inferior... Sólo eso; aquel era el argumento que le escuchaba repetir a través de las paredes.

Media hora de reloj fue lo que tuvo que esperar Lauren para salir de aquella habitación.

-Lo conseguiste al final.

-¿Lo dudabas?

Demi era la que en aquellos momentos empujaba la cama del hospital por los pasillos y la introdujo en el ascensor, apretando el botón de la planta inferior.

Por fin tendría respuestas.

Lauren respiró con fuerza volviendo a entrar en aquella sala de reuniones; la mesa, las sillas alrededor, el gran ventanal y las vistas...

Todo se sentía irreal en cierta manera. Casi como estar viviendo un sueño o una película en la que no era ni la protagonista...

-Srta. Jauregui, me alegro de volver a verla.

Aquella voz robótica; aquella sensación de vacío que había dejado su muerte...

-Simon...

Daba igual el tiempo que pasase, para Lauren seguía siendo raro que aquel hombre hubiera conseguido aferrarse a la vida -aunque tan solo la parte robótica- y estuviera viviendo en aquel ordenador dentro de eXpierence.

Demi la situó delante de la pantalla para que pudiera escucharlo.

Lauren volvió a respirar, esperando todas las respuestas posibles.

-No voy a preguntarle por su salud; ya tengo toda la información necesaria en mi, Srta. Jauregui. Pronto estará al cien por cien-a diferencia de cómo se había acercado Demi a ella, minutos antes, Simon sonaba frío e impersonal... tan diferente-. Así que hablemos de lo importante.

-Gracias.

La joven de ojos verdes se movió inquieta, como pudo, en la cama esperando a que prosiguiera:

-A pesar de nunca me ha gustado entrometerme en las vidas de mis aprendices...

-Mentira. No te gustará ahora, pero antes...

-Lovato, ¿y si espera fuera?-ordenó el hombre de vida artificial.

-Oblígame.

En aquellos momentos, Lauren casi se imaginó a Simon suspirando.

-Sé que tendrá muchas preguntas, señorita. Y muchas de ellas acabarán teniendo sus respuestas a su debido momento, o su mente se acabará ajustando a la verdad. Pero hay algo que a primera vista está fuera de los parámetros de la ciencia y de nuestra existencia. Para nosotros lo fue y para usted será lo mismo... De hecho, le pedimos a Camila que hoy no le dijera nada sobre el asunto porque quería ser yo quien le contara la verdad...-hubo una larga pausa en aquellos momentos-. Sé que se estará preguntando sobre su embarazo.

Y es que aquella pregunta era un quebradero de cabeza.

-¿Si es el tema de la abejita y la flor...? Ya me lo sé.

Demi chasqueó la lengua a su derecha, molesta por la interrupción.

-¿Sabía que su don tiene una fuerza interior sobrehumana?-le preguntó de vuelta Simon, sin darle tiempo a responder-. Es como un núcleo en sí. Usted lo domina ahora, antes era una fuerza incontrolable. Pero de vez en cuando, ese don... Sigue siendo impredecible, aunque imperceptible. Y... la noche del 16 de mayo tengo entendido que Camila y usted mantuvieron relaciones sexuales. Fue uno entre un millón de posibilidades.

-¿Pero...?

Lauren parpadeó queriendo seguir la conversación:

-Camila nos contó sobre esa noche-explicó Demi, tocándole el hombro e intentando darle tranquilidad.

Claro que recordaba aquella noche, recordaba cada pequeño detalle y cada sensación. Cada roce y cada beso seguían intactos en su memoria.

-Teníamos que atar cabos sueltos si ella misma aseguraba que la única persona con la que había tenido relaciones, había sido con usted-siguió explicando la máquina, sin tregua-. Dijo que usted, no fue capaz de detener su don ni sus manos, que la electricidad estuvo muy presente aquella noche y jamás le hizo daño. Como si su don, con vida propia, se adaptara y las uniera.

Lauren se aferró a las sábanas sabiendo por dónde estaba yendo la conversación.

Lo estaba entendiendo todo de golpe.

-Yo...

-Usted y su don. El don de Camila también ayudó. Siempre ha sido capaz de predecir con sus sentidos o intuir, adelantarse, bueno... Abreviado: su sentido aceptó el suyo aquella noche.

-¿Estás insinuando que yo dejé embarazada a Camila con...-soltó una chispa entre sus dedos, simple y casi impredecible, pero que Demi y muy seguramente Simon, en mitad de aquella madrugada, fueron capaces de ver-... esto?

-No. Insinuar, no-le contestó-. Le estoy diciendo que es lo qué pasó. 

Feel Again V: Impossible (CAMREN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora