Feel Again V: Impossible (CAMREN)

¿El plan es mucho fuego?

Capítulo 5: Parte III

Camila, 26 de octubre, México

Habían conseguido el primer paso de aquel plan demasiado fácil. Y Camila lo sabía. Aun así, respiró con calma y, con la mirada fija, vio a Niall atravesar las filas de soldados sin ser detectado y cómo en el tejado del propio edificio público volvía a su forma humana.

-Estoy dentro, chicos-le llegó el mensaje en el pequeño dispositivo que tenían todos en el oído para comunicarse.

Tocaba el segundo paso en aquel plan. Camila miró a Harry, que estaba junto a ella en aquel callejón:

-Ahora nos toca a nosotros dos.

-¿Quieres repasar lo que tenemos que hacer ahí dentro?-preguntó la latina segundos más tarde.

-¿El plan es mucho fuego?

Harry sonrió con descaro; él sabía perfectamente el plan y estaba convencido de que iba a ir bien, porque en Londres les funcionó sin ninguna clase de fisura. Sin embargo, era Camila la que tenía más dudas en todo aquello... o quizás simplemente echaba en falta la figura de Lauren en todo aquello. Sentía que si al menos estuviera allí con ellos, con su don, todo sería mucho más fácil...

Sin embargo, Camila tampoco tuvo mucho tiempo para pensarlo, porque el joven ya había echado a correr sin ella, saliendo de su escondite, y lanzando las primeras llamaradas hacia la puerta principal de la sede de diputados. Junto con la manifestación, esperaban que los soldados asumieran que era por la causa del pueblo mexicano, y no porque estaban bajo un ataque en El Palacio Legislativo de San Lorenzo.

Pero tenían que ser rápidos y efectivos.

Por eso, a Camila no le quedó más remedio que salir junto a él y ayudar con su poder, moviendo las llamas lo más arriba posible, avivando y haciéndolas poderosas. El incendio en la entrada del edificio creció en poco menos de un minuto haciendo que empezaran a sonar las alarmas en su interior.

Cuando empezaron a salir algunos soldados por las puertas principales, volvieron a esconderse en aquel callejón en el que habían estado ocultos minutos antes.

-Esto es como atrapa la bandera, ¿no crees?

-Bueno, la última vez que jugamos a eso-suspiró ante el recuerdo-, era eso... un juego. Un estúpido juego de niños.

Y ahora sus vidas, más que nunca, estaban en juego.

-Ya estoy dentro y junto a Niall-escuchó aquella voz de Dinah en su oído-. Solo quedáis vosotros por entrar.

Bien, eran buenas noticias. La segunda parte del plan también había funcionado sin ningún tipo de fallos: distraerlos para que Dinah se uniera a Niall. Entonces, Camila miró nuevamente a Harry y a este se le iluminó el rostro como si estuviera a punto de abrir los regalos de Navidad:

-¿Te apetece patear traseros, Cabello?

El último pensamiento razonable de la cubana fue hacia Lauren y lo saboreó en los labios, casi como un ligero beso en la boca, antes de echar a correr detrás de Harry. Fue el último momento en el que se permitió sentir el miedo entre sus dedos, y los nervios de la anticipación, sentir que cualquier cosa podría salir mal en la ciudad y llevar el plan hacia el desastre... En la segunda zancada de Camila en aquella carrera se olvidó de todo pensamiento pesimista en su cabeza; tenía que funcionar, por ellos y por su futuro.

Tenía que funcionar por todas las vidas que estaban en juego, por la de su bebé.

Tenían que encontrar de nuevo el rumbo en aquella batalla contra DIER.