capitulo 1♡

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La soledad en la que finalmente lograba aceptar, nunca había cambiado, nadie había sido la excepción, y tampoco era como que esperaba que alguien lo fuera, pero en lo más profundo de mi, esperaba que en algún momento eso llegara a cambiar.

Risas se lograba escuchar de todos lados, intentaba que mi rostro no demostrará repugnancia al ver las chicas con sus cuerpos curvilíneo seduciendo a los chicos, realmente era una estupidez adolescente.

Mis compañeros de clase nunca se habían interesado al menos en preguntar mi nombre, y por parte de las chicas tampoco, el único momento en donde mi voz era escuchada era cuando el profesor de ciencias y biología preguntaba una que otra cosa el cual para mi resultaba ser muy fácil, últimamente me había apasionado por la ciencia y había encontrado un motivo y un entretenimiento por cambiar al mundo.

Por otra parte la relación con mi madre había empeorado, ella estaba más que nunca en tratamiento con el Psicólogo, y mi hermana había logrado conseguir un trabajo y una casa, en cierta parte logre tener un poco más de tranquilidad pero el sufrimiento y la soledad aun no cambiaba, y no había señales de cambiar.

Finalmente había logrado aceptar mi vida, logre aceptar que por más roto que estés tienes que aceptar tu dolor y empezar otra vez, hasta que encuentres un sentido, y si no lo encontrabas, morir intentándolo. Para mí sería vivir para sonreír o morir para buscar no sufrir. Y ya lo había aceptado.

—Bueno chicos espero y hayan disfrutado y aprendido de esta clase—. Explicaba el profesor de ciencias y biología—Nos vemos.

Dicho eso el profesor comenzó a acomodar su escritorio para luego salir a disfrutar de su tiempo libre.

Los chicos de al lado salían agarrados de la mano de sus supuestas chicas, con una expresión muy feliz, era muy notable, mientras yo solo terminaba de acomodar todos mis libros científicos, unos eran de Stephen Hawking y otros de teorías sobre el universo, los había leído todos en menos de una semana, resultaba ser entretenido.

Una vez que todo el salón estuviera solitario decidí en acomodar mi cabello, ya que en presencia de alguien resultaba ser vergonzoso, claro que a nadie le importaba, pero a mi si, mi cabello estaba algo largo pero no lo suficiente para sorprender o causar envidia en una chica, además jamás podría lograr que alguien sintiera algo de envidia hacia mi.
Terminando decidí sacar mi celular y mis audífonos, era mi escape un lugar seguro entre tantas voces llenas de odio.

Mientras buscaba una música que logrará cambiar mi ánimo, me preguntaba en como se sentiría estar verdaderamente estar enamorado, pero logre esquivar la curiosidad, y finalmente estaba tatarateando “Yellow de Coldplay ”.

Los pasillos ya estaban algo vacíos, siempre acostumbrada tardarme un poco para dar tiempo a que los pasillos estuvieran un poco vacíos, no quería llamar la atención, de igual manera sabia qué aunque lo intentará no sucedería.

Así que me apresure a caminar, el sonido de la música cada vez me inundaba más el alma, sentía como mi actitud cambiaba, ya la muerte no era una solución pero al menos la música y los libros si, entonces ya era suficiente.

Mientras llegaba a los baños logre ver como las chicas se preocupan para que su delineado quedara casi perfecto, y yo solo queriendo una vida perfecta “que ironía”, me decía a mi misma.

No me tome la molestia en verme al espejo, entonces solo me adentre un poco más para lavarme las manos y humedecer un poco mi rostro que ardía ante el calor, mientras doy la media vuelta la chica esta que se encuentra atrás de mi, su baso choca contra mi logrando mojar mi camisa color morado haciendo que lo húmedo sea muy notable, me maldigo por haber venido al baño pero siendo cintura con migo misma no tenía otro lugar a pasar el rato.

Entre espacio y tiempo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora