Llegaron a la sala de menesteres en dónde James había preparado una cena romántica, estaba todo decorado con velas y corazones, en el centro estaba una mesa de mantel blanco y unas hermosas flores de centro.
Una vez Regulus se sentó James trajo un carrito lleno de comida que el mismo había preparado, estubieron comiendo unos cuantos minutos pacíficamente, hasta que llegó peeve.
El portergeis había traído un montón de globos de agua los cuales empezó a tirarle a la hermosa pareja, rápidamente ellos juntaron sus cosas y salieron corriendo.
Peeve los persiguió por todo el colegio mientras les seguía tirando globos de agua, corrieron hasta que les dolieron las piernas y lograron esconderse debajo de la capa para que peeves no los viera.
A Regulus casi se le escapa una ruidosa carcajada al ver la cara de enojo que tenía James, haciendo que peeves casi los descubra.
Por suerte salieron de ese pasillo sin ser vistos, pero James los hizo apurar el paso al ver que se les estaba haciendo tarde para su última parada.
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Cita perfecta
Romance¿Existira la cita perfecta? Si, y es eso mismo lo que James Potter va a hacer
