Capitulo 5 : Caos

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- Raymond :

La pequeña Zia Caruso, sabía que Robert tenía 2 hijos pero nunca había conocido a su preciosa hija. Debía admitir que esa chica era una obra de arte.

Para mi suerte ella estaba sentada junto a mi lado , pero para mi desgracia tenía a mi maldita ex frente a mi. No entendía para que nos ponían en la misma mesa , pero también me di cuenta de que había llegado Antonio , mi padre y el suyo trabajaron en algunos proyectos pero ambos son dos malditos estafadores que pensaron que se podrían salir con la suya.

Los músicos comienzan a tocar una melodiosa música y sabía que si quería acercarme a la morena debía actuar antes que Antonio. Ya que se veía ansioso por estar cerca de ella.

Romina me mira con cara de querer llamar mi atención , sabe lo que hizo y supone que quiero bailar con ella ? Por amor al mismo hades debe estar malditamente bromeando.

Me levanto de mi asiento y tiendo mi mano hacia la pequeña de los hermanos Caruso , veo en sus ojos la sorpresa pero termina aceptando. Mientras nos alejamos de la mesa siento las miradas de todos encima de nosotros. Pero no es algo que me importe.

Llegamos a la pista y pongo mi mano en su espalda baja. Siento como se tensa pero aún así me ve con esos hermosos ojos marrones. Ella no imagina cómo tiene mi bulto con tan solo verla.

Mientras bailamos Antonio se acerca a nosotros queriendo bailar con ella, cosa que me enoja bastante porque no a podido dejar de ser el bastardo entrometido que es. Si todos supieran quien es esta calaña no estarían tan cerca de él.

Después de enfrentarnos con su estupido ex novio la llevó al jardín. Veo cómo se detiene en los tulipanes y en los girasoles , me deleito al verla. Es como ver un ángel, mientras ve las flores me mira y mi cuerpo siente la tensión sexual que hay entre nosotros.

Maldita sea me siento un maldito mocoso de 15 años que le gusta una chica tan solo al verla por uña horas. Es algo algo estupido pero aún así quiero que sea para mi y no estoy dispuesto a dejarla ir.

Suenan unos disparos y eso me pone en alerta, si alguien am había venido a disparar aquí podría ser algún ajuste de cuentas. Esta velada está llena de mafiosos. Tomo la mano de la bella flor y me escondo con ella. Saco mi arma y me dispongo a matar a cualquiera que se atreva a tocarla.

- No dejaré que nada te pase - digo mientras reviso las balas de mi arma. - debes mantenerte aquí agachada hasta que yo vuelva.

- ¿ Aquí? - pregunta mirándome asustada y maldita sea hasta así es irresistible. -¿ quién eres?.

- Tendremos mucho tiempo para conocernos- digo mirando sus labios.

Corro hasta la entrada del salón de la fiesta y veo lo que sospeché, eran hombres de la costa este. Estos payasos pensaban que podían atemorizar mis territorios. Me acerco a uno de los hombres y lo tomo del cuello apretándolo hasta dejarlo morado.

- Creen que pueden jugar con el diablo verdad ?.

- El señor Paccino lo matará- dice tratando de buscar aire.

- El y cuantos más ? - digo sonriendo se forma siniestra.

Veo a mis hombres entrar y se que ahora esto se pondrá muy interesante.

- Quiero que lo lleven al sótano del hotel. Nuestro amigo y yo tendremos una noche de juegos.

Mando a mis hombres a atacar a estos malditos intrusos sin hacerle daño a nadie. Aunque si le pegaran una bala a Antonio y a Romina no me quejaría.  Necesitaba que Faddei uno de mis hombres de seguridad protegiera a mi familia, el sabe que ante cualquier situación ellos van primero.

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