᯾𒊹︎︎︎𝗕𝗥𝗔𝗦𝗜𝗟 𝗖𝗢𝗟𝗢𝗡𝗜𝗔𝗟𒊹︎︎︎᯾

Volviendo

Nos quedamos sin letra aEsThEtIc. Aguanten.

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Brasil colonial volvía, finalmente, a sus tierras, llevandose una gran sorpresa. Las "ocas" a no estaban, ya no había tanto verde, ahora estaba lleno de casas. Era increíble todo eso, bueno, le pareció. Era una preciosidad todo, pero.....¿Dónde estaba su gente?, ¿Su madre? No lo sabía, pero lo iba a descubrir.

Fue llevada a un asentamiento que Imperio portugués había asignado para ella. Apenas llegar, vio un poco de cosas que desconocía, pero reconocía porque el demonio blanco le había dicho de estás y se las había describido. Aún así, era extraño. Aún así, ya las conocía por el convento, aunque casi nunca le dejaban salir de ahí, así que había cosas que no conocía. Pero en su mayoría si.

—¿Uh?...— soltó cuando un hombre le dió una carta, de parte del Imperio portugués. Agradeció y abrió está, leyendo el contenido. Le contaba cosas que...¿Administraría?, Si, administraría y el como lo haría. Le decía que, ahora, ella era la señorita de la casa, de SU propia casa, pero que tendría que seguir órdenes y que si quería cambiar u hacer algo, tendría que pedirle permiso o avisarle, depende de la magnitud según la carta. Se sintió orgullosa de entender todas las palabras del, aveces, confuso Portugués.

—Señorita, acompañeme— dijo una esclava, a lo que Brasil colonial obedeció y fue con la no tan joven esclava. Fue guiada hacia un cuarto, hacia su cuarto, dónde había una ropa tendida en la cama, ¿Ya no vestiria de monja entonces?

—¿Ya no vestire de monja?

—.... No, aparentemente, nuestro gran rey ha dicho que ha de vestirse tal cual una mujer de la nobleza. Por más de que usted sea... Esclava.

¿Esclava?.... Se shockeo por segundos, pero atando cabos, era evidente que ella era una esclava. Una mísera y asquerosa esclava, la gran hija de la cacique había sido reducida a una humillante posición, a una posición de esclava. Esclava de un imperio, de una población entera, claro. Era vergonzoso para ella, agachó la cabeza y se puso algo roja, de la rabia, de la frustración y de la impotencia.

—¿Podría irse sacando sus prendas?, Voy a vestirla.— el llamado de la mujer negra la saco de su trance y asintió, empezando a sacarse sus prendas de monja, sacandose la gran tela que escondía su pelo, su pelo largo, enrulado y castaño oscuro. Quedó solo en precaria ropa interior y se acercó a la mujer esclava, que miro, indiscretamente, los pechos tapados de la jóven colonia. —Usted será hermosa, pero los grandes pechos le sacan el atractivo, al menos, para los europeos— soltó de la nada la esclava, empezando a vestirla.

¿Atractivo?....

—¿Perdón?

—Si, a los europeos les gustan los pechos pequeños. Una piel blanca, mejillas sonrosadas.... Como una niña inocente, pero seductora a la vez, ¿Entiendes?

—..... Si.— respondió secamente, sintiendo el apretón que el "aprieta pechos" le dió, dándole unos pechos gigantes, más de los que ya tenía y una cintura bastante estrecha, además de una posición mucho más recta. (no me acuerdo cómo se llamaba lo que usaban como "corset" en esa época, hay que tener en cuenta que siguen en 1500 y pico) —¡Auch!, ¿Por qué tan apretado?— pregunto bufando, sintiendo como el apriete disminuía.

La mujer no respondió, solo termino de vestirla, cosa que hizo bufar a Brasil colonial, no quería ser malhumorada pero..... Esto la ponía bastante malhumorada.

Brasil colonial se miro en un espejo y, la verdad, no le gustaba tanto su figura, le parecía que la ropa era rara e incómoda, prefería vestirse de monja. Además, la ropa interior le molestaba y ese aprieta pechos la estaba por dejar sin pulmones y, de paso, sin costillas. Encima, pidió para salir, pero le dijeron que no, ¿Qué clase de lugar era ese?

A fin de cuentas, ese día solo decidió dormir, aburrida y molesta.

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Brasil colonial desayunaba pensado en ciertas cosas, mientras veia unos papeles que le dieron, diciendo que debería defenderse o avisar si ve algún barco de otra nación cerca de las costas, osea, con otra bandera que no sea del imperio portugués o de un aliado. Esto extraño de sobremanera a la tupí, pero aún así, solo acataría las órdenes, quizás, si lo hacía, todo estaría mejor.

Luego, leyó una carta que decía de las expediciones portuguesas a...¿El río de la plata?, Bueno, mencionaba eso y una tal "Banda de los charrúas", que era un tipo de provincia española que no estaba habitada y estaba abandonada gracias a que los nativos de la tierra, que hoy conoceríamos cómo Uruguay, atacaban constantemente y eran bastante...."Salvajes". La carta decía que verían como hacer alguna reforma ahí.

¿Charrúas?....

Ese nombre le sonaba.

¿Choñik?....¡Choñik!, Claro, Charrúa, lo conocía. Le daba miedo y también lo odiaba, pues siempre estaban en guerra con su madre, así que congeniaba más con Minuan y Guenoa, que siempre los recibían, aunque también aveces eran agresivos, pero solo cuando los Charrúas estaban cerca.

Viendo el mapa del río de la plata, se dió cuenta que la supuesta Río, era Kori-Malén, o Guïratïi/Itaju cómo la llamaba su primo, al que hoy conoceríamos cómo Paraguay. No es que interactuará mucho con Kori-Malén, pero su primo parecía enamorado de la proveniente de la patagonia, incluso dijo que si la pampeana se convertía en su esposa, la haría esposa principal, aunque eso lo dijo cuando dormido..... Que raro se ponía cuando dormía.

Aún así, quería conocerlos a todos.

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Luego de mil años, ya actualice.

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