𝟬𝟬𝟮 ⋆ my story

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-¿Que hago aquí?

-Tenías un fuerte golpe en la cabeza, tal vez no recuerdes algunas cosas.- dijo Shino con su calma usual.

Empezó a tratar de recordar lo que había sucedió antes de llegar allí.

-... yo estaba en el bosque junto con... ¡Kabuto! ¿Qué pasó con el?- preguntó abriendo sus ojos, dejando ver aquel color negro tan intenso que hacía contraste con su pelo grisáceo.

Tsunade, Jiraya, Naruto, Sakura y Kakashi la miraron en silenció. ¿Kabuto? ¿Que tan lejos había llegado? ¿Había descubierto su ubicación? ¿Que tanto sabía?
Fueron preguntas que chocaron por las cabezas de los recién nombrados.

-Desapareció.- Kiba se inclinó para quedar a su altura. -Preocúpate por ti ahora, Misa.

-Estoy bien.- dijo secamente.

-¿Qué te pasó en el rostro?- preguntó Naruto con descaro recibiendo un golpe en la cabeza por departe de Sakura y miradas de desaprobación por departe del resto, menos de Hinata, ella nunca podría mirarlo con otros ojos que no fueran de admiración y... amor.

-Limítate a descansar hoy, mañana hablaré contigo.- habló por fin Tsunade. -Ahora, todos afuera, déjenla descansar, estoy segura de que hace mucho no duerme con tranquilidad.- dicho eso echó a todos de aquella habitación de hospital.

El último en salir fue Kakashi. -Bienvenida a casa, Misa.

-No se siente cómo una casa...- susurró.


[...]


-Estoy muy feliz de verte de nuevo Misa.

No respondió.

-¿Cómo has estado?- preguntó la Hokage.

¿Es enserió?
pensó Artemisa.

En la oficina del Hokage se había generado un silenció incómodo. Kakashi y Jiraya la miraban curiosos.
Ya había pasado un día desde que llegó a la hoja, sanaron sus heridas y ahora estaba dándole explicaciones a la Hokage sobre su desaparición durante 2 años.

-¿Usted que cree... mi Lady?- respondió secamente.

Su respuesta fue cómo un balde de agua fría para todos en la habitación.

-Lo siento, no fue una buena pregunta.- se disculpó Tsunade. -Ahora quiero que me digas todo, cuéntame hasta el más mínimo detalle.

Artemisa inhaló y exhalo.

-Encontré el escondite de la serpiente.- dijo sin más.

-¿Te refieres a Orochimaru?- preguntó Kakashi.

-En efecto. O al menos, uno de sus escondites. Para este punto ya se habrán cambiado de lugar.

Tsunade la miraba curiosa. quería saber que fue lo que le pasó en el rostro.
Artemisa sospechó sobre cómo la miraba, le resultó fácil deducir que era lo que en verdad quería le que cuente.

-Preguntemelo.- exclamó.

-¿De que hablas?- habló Tsunade.

-Hágame la pregunta que le da vueltas por la mente mi Lady.

Tsunade lo meditó por unos segundos, quería escoger bien sus palabras, no quería lastimarla o incomodarla.

-¿Qué te ocurrió en el rostro?

Artemisa volvió a tomar aire para luego soltarlo.

-Nuestro grupo habían dado con la ubicación de Orochimaru, logramos ver uno de sus escondites e infiltrarnos allí. Mis compañeros y yo estuvimos ahí por semanas creo, el tiempo en ese lugar parecía ir más lento. Fue entonces cuando nos encontrarón, más bien, el nos encontró. Sasuke Uchiha.- hizo una pausa al mencionar aquel nombre. -Nuestro grupo y yo fuimos torturados por Orochimaru, pero logramos escaparnos, ellos querían irse, volver aquí, estábamos mal heridos y ninguno era ninja médico. Pero yo quería seguir adelanté con la misión, quería enfrentar a Sasuke. Ellos se opusieron, claramente pero, no me importó. Discutimos un par de minutos hasta que decidierón quedarse junto a mi. Pero habíamos echó demasiado ruido, Kabuto nos encontró y nos batimos a duelo, yo estaba herida, mucho más que ellos así que caer se me hizo sencillo. Kabuto aprovechó el momento y me llevó con el, entre gritos les dije que les iba a dar señales mías pero, jamás pude. - volvió a hacer silenció.

-¿Qué pasó después?- preguntó Jiraya.

Artemisa lo vio a los ojos, le vinieron demasiados recuerdos lindos de el junto a ella, pero los apartó.

-Me torturaron, por días, semanas quizá. Jamás se me dio el momento de comunicarme con mis compañeros. Al parecer a Kabuto le resulte entretenida así que se quedó conmigo cómo trofeo o algo así, me llevaba a todos lados, yo veía todo lo que el hacía. Fue el quién me enseñó jutsus médicos, el me convirtió en ninja médico.

-¿Intentaste escapar?- preguntó Tsunade.

-Por supuesto pero, créame que me tenían bien vigilada. De echo logré escaparme en una oportunidad, fue en ese momento en que me hicieron ésta herida.- pasó su dedo índice por su rostro.- Mandaron a Sasuke a traerme de vuelta. Fue ahí en donde lo enfrenté, peleamos, no hubo perdedor o ganador, el me hizo ésto y yo le dejé la misma cicatriz en su abdomen. Igual de fea, igual de dolorosa. Pero... el me dejó ir, me dijo que era libre de irme, que no me iba a seguir.

-¿Sasuke te dijo éso?- preguntó Kakashi.

-Así es, yo también me sorprendí al escucharlo. Lo debati internamente, pero en ese momento llegó Kabuto, ayudó primero a Sasuke y después me curó a mi. Ya había perdido mi oportunidad para ese entonces. Por tratar de escaparme Orochimaru abrió y cerró la cicatriz que tenía en mi rostro decenas de veces, solía desmayarme del dolor, la última vez que Kabuto me curó logré ver en su rostro la preocupación de que ya no podría curar aquella herida, que esa cicatriz me iba a acompañar el resto de mi vida.

-¿Y cómo escápaste de allí?- preguntó Jiraya.

-Bajaron su guardia, y la aproveché supongo. Kabuto me siguió pero creo que ya se había cansado de mi, así que me dio un regalo, mi libertad.

indömita ⋆ shîkamaru nāraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora