༺ꞒꭿꝔÍꮦUꝆꝊ 2༻

215 14 1
                                    

≫ ──── ≪•◦ ❈ ◦•≫ ──── ≪
Iniciemos
──── ≪•◦ ❈ ◦•≫ ──── ≪

Los primero días en los cuales el entrenamiento comenzaba eran tan duros y obstinantes, ser entrando a por aquel peli amarillo que los hacía correr largos kilómetros sin parar.

- vamos falta mucho aún- dijo desde la lejanía para observar a los quejosos chicos que no soportaban más-

El entrenamiento era forzoso, el correr con peso en sus tobillos, soplar un jarrón jigante, el campo de entrenamiento en el cual debía ser rápidos y ágiles con las múltiples trampas que habían.

El joven comenzaba a acostumbrarse rápidamente, su apariencia delgada eran solo una máscara para un joven que tenía una habilidad ágil y fuerte.

Peleaba con buena técnica y su tenacidad era ferozmente que impresionaba al peli amarillo cada con el paso de los años que sostenía una sonrisa amplia y alagadora a los niños que parecían sus hijos.

Mientras que su hermana solía practicar con Akazan al querer mejorar como su hermano mayor.

El mirar su cuerpo por la mañana y observar como el ejercicio brindaba frutos, sus dientes picados y feos se había caído con el paso de los años, dejando unos dientes afilados y de un color blanco.

Su mirada se había vuelto aburrida y sin interés, la marca en su rostro seguía intacta como aquel entonces , suspiro pesado para limpiar su rostro con el agua fría y recordar al pobre niño asqueroso y horrible que todos le tenían asco, estaba celoso por la belleza de algunos de sus compañeros, que suspiro pesado para sacar de su bolsillo aquel pañuelo blanco.

Salió de su habitación el alto joven que amarraba sus cabellos en una coleta alta, hasta llegar a una habitación en la cual su hermana y su maestro comían plácidamente

Deseo los buenos días para estos para sentarse a acompañarlos a comer, al terminar se levantó de su asiento para comenzar a caminar hasta el campo de entrenamiento

- es malo que entrenes todos los días... Avaces el cuerpo necesita un descanso- menciono el hombre mayor que comía tranquilamente su comida y observaba de reojo al peli negro.

- iré a entrenar - se retiró del lugar sin decir alguna palabra, sostenía sus guadañas para comenzar a cortar los árboles con sus técnicas rápidas, que se detuvo rápidamente al escuchar los pasos de su hermana menor

- el patrón nos llama ONI-CHAN - ambos se fueron juntos hasta la cabaña del patrón quien tranquilo los saludaba con una ample sonrisa

- la gente a comenzado a desaparecer en un pueblo en lo largo de estos días así que vallan y averiguen si es un demonio - su voz era serena mientras que ambos jóvenes inclinaban sus cabezas con respeto - tengan buen viaje y les deseo suerte

Estos se retiraron del lugar para buscar sus cosas, el peli negro de ojos azules entro a la habitación cruzado de brazos para observar a los dos hermanos con una sonrisa.

- mañana es tu cumpleaños!?!- menciono al peli negro que había recordado el cumpleaños de Gyutaru, saco de su bolsillo una cuchillo plateado con detalles de un dragón en el mando, se lo entrego a las manos del pelo negro con mechas verdes que agradeció con una reverencia - ya tienes 18 años de edad jaja como pasa el tiempo- le dió unas palmadas suavemente para mirarlo de reojo - te has vuelto un gran espadachín... Pero espero que no seas como el pervertido de Douma

- te escuché!!- dijo el peli amarillo que entraba a la habitación cruzado de brazos-

- Akazan-sama dice la verdad... Viejo pervertido - se acercó a estos con sus cosas listas, miro de rojo al peli amarillo quien trataba de hacer que estos no dijeran más vergonzoso sobre este.

Ambos hermanos caminaron debajo del manto del sol, Ume recibía alagos de la gente por los caminos entre los hombres y mujeres que alagaban su belleza, el orgullo de su hermano mayor quien estaba feliz de tener a la joven como hermana.

- Ume apúrate!- se quejo por el retraso de la joven para seguir su camino, había llegado antes del anochecer  a un pequeño pueblo en la falda de un gran montaña de árboles de Sakura, el frío era inevitable, la joven se quejaba por el largo camino que esté terminó cargándola en su espalda hasta llegar a una posada

- ONI-CHAN quiero ayudarte a buscar al demonio - inflo sus mejillas para cruzarse de brazos asiendo un puchero

- Ume descansa un poco y come algo... Cuando encuentre al demonio te llamaré para que me ayudes a matarlo- dijo entre una sonrisa para darle unas palmadas en la cabeza -

- ONI-CHAN ten cuidado - miro como su hermano mayor se retiraba de la habitación, este caminaba por las calles tranquilamente, observa a la gran cantidad de parejas a tu alrededor que apretó su puño al centirse celoso por la suerte de algunos hombres.

- este se detuvo el seco para ver a dos niños que jugaban con sus padres felizmente, una gran envidia creció en su pecho, las benas en su puño se hicieron notorias al desear aver tenido una niñez feliz con su padres y su hermana menor.

Suspiró pesado para seguir su camino y recorrer rápidamente el lugar en busca de algún rastro, se encontraba sentado en la punta de un árbol mirar miraba el lugar.

- creo que no hay ningún - se callo de golpe al ver cómo una gran cantidad de árboles calleron en la lejanía, fue corriendo desde la punta de los árboles, freno de golpe para poder observar con sus ojos que pasaba.

Cuatro demonios de kimonos floreados blanco, con aspecto de porcelana que mantenían sus ojos cerrados y marcas de flores rojas diversas partes de su rostro.

- hermana mayor nuestro padre quiere que te llevemos a casa... Pero no mencionó si viva o muerta - dijieron al unizon para atacar a una mujer de cabellos negros largos que salía desde los escombros de unas grande piedras.

Gyutaru se quedó sin palabras al ver el rostro de la mujer que salía de los escombros sangrando.

- creen que tengo ganas de una reunión familiar - tocia gran cantidad de sangre de sus pulmones para caer al suelo las cuatro gemelas brincaron asia está para atacarla, pero terminaron destruyendo una gran cantidad de árboles pero sin rastro de la peli negro.

- estás bien?!- la peli negros abrió sus ojos al escuchar aquellas palabras de una voz conocida, sus ojos se toparon mutuamente, su cuerpo era sostenido por aquel hombre alto y cabellos amarrados en una coleta y una marca tan particular y única que ella una vez en su vida la había visto.

- eres ese niño- dijo entre una sonrisa cálida asiendo que el joven sintiera una gran pulzada en su pecho.

Continuara

El cazador y El demonio ( Gyutaru x Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora