Desde la Aparicion de los quirks en el mundo, la sociedad entera se transformó, en los tiempos que corren, ser un héroe se volvió un oficio remunerado, lo que llevo a muchos a querer ser uno solo por los beneficios que esto conlleva, a la par, los villanos surgieron al igual que los vigilantes, pronto el mundo se transformó en un típico comic de superhéroes, pero no es un mundo para todos, solo el 80% de las personas obtienen un qwirk, en ese porcentaje se dividen las opiniones en "qwirk de héroe" y "qwirk de villano". Pero que pasa con el 20% restante? Ese porcentaje es conocido como qwirkless, son tratados como escoria en la sociedad heroica, la gente sin poderes no tiene un lugar, y ese, es el caso del pequeño izuku midoriya, un niño que su mayor sueño fue ser un héroe, pero tras ser diagnosticado como qwirkless, el pequeño izuku pronto experimento la vida de todo qwirkless, golpes, insultos, y cosas más serias, pronto dejaron al pequeño de apenas 5 años con varias heridas
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El pequeño tenía la suerte de haber encontrado un médico clandestino qwirkless que siempre lo ayudaba con sus heridas ya que sus padres centraban toda su atención en sus 2 hermanas. A las malas, izuku aprendió que la opinión de un qwirkless no importa, un usuario de qwirk de fuerza se lo dejo muy claro cuando casi le rompe la tráquea solo por opinar sobre un sabor de helado.
Con el pasar de los años, izuku dejo de hablar, no veía necesidad en expresar algo si siempre era golpeado en respuesta, dejo de esforzarse en lo académico, pues si sacaba notas altas era golpeado acusado de hacer trampa, el único lugar dónde podía ser el mismo, era un taller abandonado en un cementerio olvidado hace mucho tiempo, cómo descubrió el lugar? En una de sus tantas escapadas nocturnas termino allí por accidente, los pastos tan crecidos fueron un problema, pero con un cuchillo de cocina y noches enteras de trabajo, el pequeño logro que el lugar se viera bien,
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Ese lugar algo alejado de la ciudad es el pequeño gran santuario del pecoso, un lugar donde pese a su falta de qwirk pudo prepararse para el futuro, para fortuna del pecoso de casi 14 años, en ese taller como el le gusta llamarlo, había encontrado varios atuendos parecidos, eso fue como encontrar el santo Grial teniendo en cuenta que sus ropas más nuevas son de cuando tenía 6 años y ya le quedaban absurdamente pequeñas teniendo 14
