El Coleccionista || Jaeyong

Corazón

Jaehyun paso las yemas de sus dedos sobre las suaves mejillas de su bebé. Amaba el calor que irradiaba, lastimosamente no iba a ser para siempre ese calor reconfortante por lo que deposito un beso en los labios de su novio, solo inclinándose un poco pues al estar recostados sobre su cama era mucho más fácil.

La delgada y delicada mano del artista se estiro para tomar su celular sobre la mesita de noche del lado que estaba Taeyong, sin querer recargándose un poco más en él.

—Lo siento no quería aplastarte, bebé. —Se disculpo, desocupando sus dedos para despejar el bonito rostro de su novio. Una vez que se disculpó, marco el número de su mejor amigo. —¿Yuta?, ¿estas con Doyoung?, necesito que vengan a mi casa ahora mismo.

Pidió el castaño pasando sus dedos por las hebras del cabello suave y con olor floral de Taeyong.

Jaehyun escucho como el japones empezó a quejarse, pues era fin de semana uno donde aprovechaba Doyoung y el para ir a bares y pasar un agradable momento con chicos y chicas.

—Si, ya sé que es mi aniversario con Taeyong, pero necesito que vengan ya. —Nuevamente pidió el castaño, dejando un pequeño besito en la frente de su bebé. —los veo aquí.

Colgó sin esperar una respuesta de Yuta.

Quedándose perdido en el rostro de Taeyong, el cual era tan tranquilo y sereno que mantenía, no podía evitar hundirse en su cuello, besando y mordisqueando su dulce piel, deleitándose por su sabor y aroma. Nuevamente regreso a sus labios, dando pequeños y cortos sobre ellos, una y otra vez hasta sentir que necesitaba un poco más de aire.

—Taeyong, quiero sentirte, quiero sentir tu corazón. —Ronroneo cerca de su hombro descubierto gracias a que el mismo se había encargado de desnudarlo. —seré el dueño de tu existencia, siempre te atesoraré.

Musito, dejando a su novio sobre la cama blanca o tal vez ya no era tan blanca, había tomado otro color. Jaehyun se puso de pie, dejando relucir que también se hallaba desnudo. Se había encargado de hacer suyo a Taeyong una y otra vez, camino por la habitación buscando el artefacto con el que había causado que la cama estuviera tan manchada y una vez que lo tuvo en sus manos, regreso a la cama junto a su bebé.

—Perdón por dejarte unos minutos, mi amor. —Se disculpo, quitando poco a poco la sabana que envolvía el cuerpo de Taeyong para dejar su desnudez expuesta. Jaehyun formo una sonrisa acariciando una de sus nalgas. —continuemos, antes de que lleguen mis amigos y me ayuden contigo, cielo.

El artista puso boca arriba a Taeyong, quien se dejaba hacer totalmente, sin ninguna protesta. Jaehyun se subió arriba de él con cada pierna a su lado, sintiendo un escalofrió cuando sus penes rozaron, pero esto no lo detuvo. Ya se lo había follado, ahora solo necesitaba terminar con lo que empezó.

Tomo ese artefacto que había sido el autor de su cama manchada y cuando lo posiciono en medio del pecho de Taeyong. Lo clavo.

Jaehyun había asesinado a Taeyong. La sangre salía a presión manchando su enorme cama, no le importo. Solamente esto lo alentó a tomarlo de los cabellos con demasiada fuerza que arranco varios y ahí introdujo su pene en su boca.

.....

—Espero no sea una de tus bromas Jeong o juro que te mato. —Exclamo Nakamoto sacando las llaves de la casa del artista. Solo él tenía una llave extra, sabiendo lo loco que era algunas veces. Doyoung gracias a la borrachera que cargaba no pudo ir.

La puerta se abrió, notando el cómo la oscuridad inundaba el sitio. No había ni un solo ruido. Sin embargo, esto no lo detuvo a entrar, prendiendo la luz en seguida.