Capítulo dos: Merlín era Slytherin

10 1 0
                                    

Los bosques necesitan seriamente mejorar la iluminación, mejor dicho, necesitan implementar iluminación. Te estarás preguntando ¿por que no uso mi varita? Mmm si... la deje en la tienda, error de novata. Sin embargo soy muy buena creando esferas de luz con las manos, viejo truco que me enseño mi abuelo, el problema es que suelen llamar mucho la atención y eso es exactamente lo que quiero evitar hacer. Sigo caminando por aproximadamente 10 minutos cuando choco con alguien, no, no alguien, Theodore Nott.

-¡Adhara! - se sorprede el muchacho
-¡Theo! ¡Que alegría verte!
-¿Enserio? ¿Me extrañabas? - me cuestiona picaro el castaño
-No lo decía de esa forma...
-Tranquila, fue un mal chiste... ¿Estas bien? - preguntó examinándome con la mirada buscando cualquier tipo de lesión física, para luego dirirgirse a mi cara y parar en mis ojos.
-Si, pero perdí a mis hermanos... y mi varita se quedo en mi tienda - confesé algo avergonzada.
-Ay, Adhara - dijo entre un par de risas Theo y algo se movió dentro de mi, esos ojos azules como el océano más profundo brillan a la luz de luna y esa sonrisa tan juguetona y genuina... cuanto lo extrañaba - Vamos, te acompañare a tu tienda y después iremos por tus hermanos - contestó Theo sacándome de mis pensamientos a medida que ponía sus manos en mis hombros para luego abrazarme gentilmente, ese abrazo no tenía comparación.

Nada, ni nadie me hacía sentir como aquel muchacho me hacía sentir cada vez que estaba a menos de 10 metros de mi, y lo peor de todo es que él lo sabía, él también lo sentía y aún así nunca hicimos nada al respecto. Absolutamente nada, somos dos cobardes hechos el uno para el otro.

Mientras Theodores y yo nos dirigiamos a mi tienda vimos que gran parte de las personas en el bosque hacían igual, fue un trayecto bastante agradable en el cual nos pusimosal día y pude finalmente volver a respirar con tranquilidad.

-Este año no volveré a Ilvermorny... iré a Hogwarts, viviremos acá - confesé al chico junto a mi el cual parecía haber recibido un balde de agua fría.
-¿Por qué? - pregunto serio
-¿Por qué? - replique algo confundida
-¿Qué ocurre realmente? ¿Por qué el cambio tan repentino?
-Nada... - miento
-Adhara...- me reprocha Theo tomándome la mano - Mira yo...
-¡Adhara! - escucho a mis hermanos gritando y en menos de dos segundos me tienen envuelta entre sus brazos, es increíble lo felices que son al notar que no morí estando a su cargo. Supongo que el más preocupado era Henry, desde que papá no está se cree el hombre de la casa, de hecho lo primero que hace al separarse de mí es inspeccionar que no tenga ni un solo rasguño para después mirar seriamente a Theo y decir...
-Nott, cuánto tiempo... ¿Qué haces con mi hermanita?
-¡Henry! - reclamamos Maia y yo al unísono
-Esta bien, Adhara - dice con calma y algo risueño Theo para luego dirigirse a mi hermano - La llevaba a su tienda, estaba perdida y no tiene varita, pero ya que veo que esta segura con ustedes, me retiro - gira hacía mi y me da un suave beso en la mejilla - Nos vemos en Hogwarts - y como si nada se va.
-Uhh Adhara tiene novio, Henry sufrirá un ataque en 3,2,1... - se burla Maia sacándome de mi trance.
-ES UNA NIÑA, ES UNA BEBÉ, ELLA NO PUEDE TENER NOVIO - gruñe Henry mirando a Maia a medida que abraza mi cabeza como si fuera una bebé - Adhara no tengas novio, los chicos son unos idiotas, ninguno, absolutamente ninguno jamás será suficientemente bueno para ti, mi pequeña estrellita.
-¿Qué hay de mi? - dice Maia ofendida
-Los dos sabemos que tu no buscas un chico - dice Henry burlón 
-¡¿Qué?! ¡¿De que hablan?! - me suelto de los brazos de mi hermano y los miro a ambos que solo rieron y empezaron a caminar.

Bueno al parecer mi hermana no estaba tan interesada en el sexo masculino sino mas bien en el femenino. ¿Me molesta? No. ¿Me ofende no haberlo sabido antes? Sí y mucho. Mi hermana podría iniciar una masacre y yo la seguiría amando, su vida amorosa no me es de gran relevancia, pero podría al menos contarmela. Ese es el problema cuando tienes dos hermanos mayores, tienden a pasar por cierto tipo de situaciones antes que tú y sueles sentirte algo dejada de lado. No me malinterpreten, yo amo a mis hermanos, pero no me gusta que solo me vean como una bebé y no como su amiga.

...

Eran las 8: 23 am del 1ero de septiembre de 1994, oficialmente hoy parto a Hogwarts, no hay vuelta atrás, no hay forma de arrepentirme, pero aunque mi cabeza lo tenga claro mi cuerpo no cede. No quiero levantarme, estoy recostada en mi cama junto a Merlín y Morgana, Merlín mi simpático gatito gris de ojos verdes, muy encantador sin duda, y Morgana mi bella gatita negra de pecho blanco, no tan encantadora como Merlín ya que es mucho más sobre protectora y fiera, estoy segura de que si fuera una bruja, sería la más astuta y poderosa de todas. Merlín sería su fiel bufón.

-¿Qué ocurre en esa cabecita tuya? - la pregunta me sacó de trance y volteo a ver a mi madre quien se encuentra recargada en el marco de la puerta
-¿Cuál era tu casa en Hogwarts? - preguntó con brusquedad y me mira de forma escéptica
-Ravenclaw, ya lo sabías... ¿por qué evitas la pregunta?
-Te respondí lo que preguntaste, pensaba en cual casa podría quedar
-Adhara...
-Mamá, hoy no, gracias por intentarlo, pero hoy... no
-Esta bien, lo respeto, te amo ¿lo sabes?
-Yo también te amo y te voy a extrañar
-Yo también mi pequeña ardillita - dice mi madre envolviendome en sus brazos - Escribeme ¿si? - asiento y se separa de mí - Vístete o llegaremos tarde.

Obedezco a mi madre y me arreglo para bajar, llevo una falda cuadrille que mezcla los colores azul marino y blanco, un sweater blanco que combina con los cuadros y una chaqueta de cuero que combina con mis botas. Me muevo hacía el pasillo y veo a mi hermana, vestida muy diferente a mi y a la vez tan parecida, lleva unos pantalones de cuadrille que mezcla diferentes tipo de púrpura, un top negro con un estampado de una banda, botas y chaqueta de cuero negras, y el cabello recogido de una forma que no sabría describir, se ve como una cantante punk y yo como si fuera a la biblioteca.

-Que guapa - dice mi hermana al verme
-Igual que mi bella hermana - le digo
-¿Tenemos otra hermana? - dice mi hermano saliendo de su habitación, no hay mucho que destacar de su atuendo, se ve como si fuera a ser el próximo primer ministro de magia, sin duda la ñoña de la familia no soy yo.
-¿Vas a la escuela o a una junta con el primer ministro? - lo molesta Maia
-Las primeras impresiones importan - La reprocha mi hermano
-Eso es cierto - digo y mi hermana me mira con reproche - o no... creo que iré a buscar a Merlín y Morgana
-Aun no puedo creer que usarás el nombre del mago más poderoso para un gatito - se ríe Maia
-¡Ey! Merlín le hace mucho honor a su nombre, tiene todas las cualidades de un buen Hufflepuff
-Merlín era Slytherin - dice indignado mi hermano y empieza a bajar las escaleras.

Ya nos encontrábamos en la estación King's Cross, a punto de subirnos al tren cuando Sirius Black se acerca a nosotros junto a su cretino ahijado que tuvo el descaro de ser prejuicioso conmigo, y no, yo no olvido, mejor que se cuide en Hogwarts.

-¡Hola! - saludo entusiasta Black a nuestra familia, pero no hubo reacciones positivas
-Hola, Sirius que bueno verte - dijo cordial mi madre, tan cordial que debí abofetearla
-Hola... - se acerco Potter a mi con una expresión de culpa y a la vez de fastidio
-Mmm ¿te puedo ayudar en algo? - respondí algo distraída sin dejar de mi mirar la interacción entre mi madre y Black
-Sí, mira lo siento - Harry escupió las palabras de tal forma que no pude evitar voltear y mirarlo fijamente, sus ojos eran tan verdes como un bosque sombrío, había algo en sus ojos que me inquietaba. - Te juzgue apresuradamente, me equivoque.
-Sí, te equivocaste.
-¿Eso es todo lo que me dirás?
-¿Qué esperas que diga? Yo no hice nada malo
-¿NO? Mmm ¿juzgar a mi padrino por ejemplo? ¿Creerte superior?
-Mira, niño rayo
-¿Niño rayo?
-Por tu cicatriz - digo como si fuera lo más obvio del mundo y me mira con una expresión que no pude descifrar así que sigo con mi discurso - Si te obligaron a disculparte conmigo, no es mi culpa, deberías empezar a pensar un poco antes de actuar como un cretino, así que tranquilo oí tu disculpa, ya puedes volver a pretender que eres un pequeño héroe, yo tengo amigos esperándome en el tren, ¡adiós! - me doy media vuelta y subo al tren sin mirar atrás, aunque tampoco sabía dónde estaban mis amigos. Ups...  

Lust and pride // Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora