El Dragon Negro (house of the dragon)

CAPITULO 5

                          la boda 

Al llegar a la fosa Daemon ayudo a los cuidadores con Caraxes mientras ella se despedía de Drogon por un rato y al llegar los caballos traídos por Ser Harwin los tres se dirigieron al palacio donde su hermano los esperaba muy feliz de tenerlos juntos de nuevo y el mayor de los tres se llevaría una gran sorpresa al verlos muy cambiados a ambos pues no solo estaban más delgados y con algunas cicatrices, también se habían cortado el pelo ahora a Rhaella le llegaba más abajo del hombro y Daemon se lo dejo muy corto pero a los dos se les veía bien y ellos estaban felices de volver.

Los guardias pararon a Daemon pues llevaba un hacha que lanzo hacia el trono.

- agregarla a tu silla - le dice el.
- donde está la serpiente marina.
- navego a su hogar con su familia.
- entonces quién vigila los peldaños de piedra.
- muchos soldados de la Triarquia empalados y cientos de cangrejos.
- veo que llevas una corona ahora te cres rey.
- cuando ganamos la guerra los soldados me nombraron rey del mar angosto pero yo se que hay un solo rey - se quita la corona para dársela y  se arrodilla - mi corona y los peldaños de piedra son suyos.

Rhaella permanecía callada tras Daemon pues ella sabía que no sería necesario decir nada o intervenir.
Viserys tomo la corona y se la dio a un Ser que estaba cerca y se acercó a el.

- ponte de pie.
- hermano - dice y recarga su cabeza en el hombro de su hermano en señal de afecto y luego Viserys mira a Rhaella y le extiende una mano para que se acerque y se sume al abrazo.
- hermana - le dice cuando ella se acerca y los tres se abrazan, lo que hace que todos aplaudan.
- pueden pedirme lo que sea ambos mis queridos hermanos.
- primero hay que llamar a un maestre para que revise el brazo de ella y se asegure que sanará.
- que te paso.
- una guerra hermano, nadie sale sin un rasguño.

Rhaella se había ido a sus aposentos para que un maestre la examinara, después de eso ella se cambió con algo más cómodo y fue donde estaban celebrando su regreso y la victoria.

Al llegar ve a Daemon muy cerca de Rhaenyra lo que no le gustó haci que se acercó para intervenir.

- sobrina querida cómo has crecido.
- tía te extrañe mucho como estás - dice la menor mientras la abrazaba.
- yo estoy perfectamente bien, pero si me disculpas voy a comer algo me muero de hambre, hermano ven conmigo tu también debes comer algo - dice y luego toma su mano para dirigirlo lo que sorprendió a la menor pues era bien sabido que a Daemon Targaryen no le gusta el contacto.
- que crees que estás haciendo - le dice cuando ya están lejos de Rhaenyra.
- no se de que estás hablando - contesta
- Rhaenyra sigue siendo muy joven y es tu sobrina no lo olvides.
- ya te dije que no se a lo que te refieres hermana y no me mires haci.
- Daemon no soy tonta se lo que vi y solo te pido que no hagas una estupidez como sueles hacer siempre, no le rompas el corazón aún es joven y no se lo merece - le dice para después irse a comer algo en compañía de Eva pues Daemon se avía ido.

después de comer fue a los aposentos de la reina quería visitar a sus sobrinos mas pequeños Aegon y Helaena.

- permiso - dice al llegar a los aposentos de Alicent.
- princesa Rhaella a qué se debe su visita - pregunta la joven reina al verla llegar.
- quería conocer a mis sobrinos si no hay problema claro.
- adelante, claro que no hay ningún problema puede venir cuando lo desee princesa.
- creo que soy yo la que debería de hablarle de usted mi reina.
- no se preocupe a mí no me molesta.

Pasaron un rato hablando y jugando con los pequeños, Alicent volvía a reír después de mucho tiempo, disfrutaba de la compañía de la princesa y se sentía feliz y tranquila, pues estaba feliz de tener a una amiga real.

Después de estar un rato con Alicent y los niños tuvo que irse pues Viserys la había llamado y ya tenía una idea de para que pero ya no podría negarse más y ahora tendría que casarse.

- hermana creo que ya sabes para que te llame, Lord Stark estará aqui en unos días para tu boda, se que no te gusta planear celebraciones, haci que hace casi un año le pedí a tu doncella Evangeline que planeara la boda, para que cuando regresaras ya estuviera todo listo, ella te conoce bien así que junto a ella se planeo la boda y en unas semanas te casaras espero no te moleste.
- no en realidad lo agradezco tienes razón odio planear celebraciones y más si son para mí y sobre mi prometido no cres que pueda llegar antes al menos para conocernos un poco antes de la boda porfavor.
- claro le mandaré un cuervo tú no te preocupes por nada.
- gracias y de verdad no me voy a negar, te lo prometi antes de irme y Rhaella Targaryen siempre cumple sus promesas hermano.

°~°~°~°~°~       esa noche    ~°~°~°~°~°~

Rhaella estaba en sus aposentos con Eva quien la ponía al dia con lo que había pasado esos años que no estuvo,

- entonces el barco que vimos al llegar era en el que venía mi sobrina valla no pensé que accediera a eso.
- en la celebración del segundo onomástico del príncipe Aegon creo que pelearon y supongo que ya no pudo negarse a escoger a su futuro esposo y rey consorte.
- bueno es entendible y ahora que mencionas lo del esposo dime si ya quedó todo lo de mi boda con Lord Stark o si falta algo más.
- solo su vestido, lo demás ya quedó, hace unas semanas llegaron unas telas para que escoja y mandar a hacer su vestido, voy por ellas y mientras mando a llamar a la costurera para que tome sus medidas.
- si gracias también pide que me preparen un baño y llama al maestre para que me limpie el brazo y me cambié el vendaje para que no se infecte porfavor.
- si princesa no tardó.

Rhaella estaba sentada frente al tocador desenredando su cabello cuando se abrió la puerta de los pasadizos y entro Daemon.

- hermano que pasa porque entras por ahí y a dónde vas que estás vestido asi - dice al verlo con una capucha.
- voy a hacer algo que si sale mal me  van a desterrar aunque espero que eso no pase pero por si acaso vine a despedirme Rhaella.
- por los dioses, que vas a hacer Daemon para que temas ser desterrado.
- no te preocupes hermana, mañana te enterarás, me tengo que ir te quiero
- Daemon no hagas una estupidez porfavor, quédate conmigo.
- lo siento pero no puedo - dice y se acerca para abrazarla y besar su frente - no te preocupes nada malo va a pasarme.
- hermano cuídate porfavor te quiero.
- también te quiero - sale por la puerta del pasadizo.
- hay hermano espero que no sea grave lo que harás o no podré interceder por ti.

Unos minutos después entraron con la tina para su baño y el maestre para limpiar el brazo correctamente.
Cuando ya estaba cambiada y ya avía elegido la tela y le avían tomado medidas ella se durmió pensando en su hermano y en lo que pasaría.

Hola, que tal les parece Daemon con su hermana menor,
Esta ves si fue a despedirse,
Ahora sí se viene lo bueno.