El síndrome de la Estupidez [Nonizen] Headcanon

5-.

5- No hay dimension que nos separe
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-y este es un cuchillo auténtico de una hechicera que lastimosamente murio, pero que su magia se trafirio al cuchillo, es una historia creibe- hablo el joven con lentes llamativos, frente al rubio y el castaño.
el rubio obserbaba el objeto como una estafa completamente y el castaño mantenía las ganas de reirse por la historia para nada creíble que habia creado el hechicero.
-te doy 5 de broce por esta mierda- hablo el rubio, con una expresión de pocos amigos.
-vamos tanizen! se mas asequible, 5 de plata por lo menos?- hablo el hechicero en un intento de poner cara tierna para que el mas alto callera en sus redes.
-olvidalo-
-espera tengo algo mas!- hablo el cliente, emocionado saco un frasco con una sustancia sumamente rara para ambos compradores.

-esta es una poción de "revertivilidad ocasionada" que encontre en una cueva cuando exploraba, se dice que si lo pruebas te revierte muchas cosas en el cuerpo, no se que exactamente pero es una buena foa de matar a alguien- sonrio el de sombrero ante las miradas nerviosas de los contrarios.

-interesante..- hablo el rubio observando el objeto y sus detalles.
-jefe! jefe! dejeme ver! quiero verlo yo también! porfi porfi porfi- el castaño empezo molestar y mover al rubio de una forma bruta, ocacionando que la botella que sostenia el mismo se callera encima del mas alto.
-agh! noni! puta madre- el joven se quejo por el pequeño ardor que tenia en su piel.

poco a poco la mirada de ambos castaños empezaron a cambiar a una de miedo y panico, mientras observan al rubio. Poco a poco su piel cambio a una mas amarillena y en algunas partes se abrian mostrande parte de su carne, estaba poco a poco muriendo por la "revertivilidad ocacionada".

el rubio gritaba de dolor ante lo sucedido, el wrdor y y el dolor era insoportable por el quimico, soportaba lo que podia y eso hacia que poco a poco perdiera las energías, empezo a decaer y sus ojo dejaron de ver, se habia desmayado.
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desperto. Estaba aturdido y mareado por la situación no sabía dónde estaba a pesar de la poca claridad que había en el ambiente, con el paso de los minutos puedo deducir dónde estaba, porque se encontraba en el santuario? lo único que recordaba era que sufría por una pequeña porción que lastimosamente cayó encima de él y que provocó graves heridas.

decidió entrar al santuario para ver si podía encontrar a Juan o incluso a su compañero pero ni un arma apareció en la planta baja, parecía qué lugar estaba abandonado.
-Juan? no te escondas basura inmunda, Ven y hazte cargo de la mierda que me hiciste!- abre el rubio enojado por la situación de hace pocos minutos estaba algo nervioso por el tenue ambiente tenso que se había formado en el lugar, siquiera había alguien?.
de la nada un par de pasos suaves y tranquilos empezaron a bajar los pisos con delicadeza, una pequeña figura se forman una de las escaleras y con la poca claridad que había no había mucho que notar.
-el que esté abajo puede dejar de hacer tanto ruido? estoy algo de aturdido- hablo el castaño de anteojos prendiendo las luces de la planta baja- ¿tanizen..? estás vivo?-