Después del momento en familia y que solucionará los problemas con Yotsuba nos dirigimos hacia la cafetería que atienden Miku y Nino para poder almorzar.
Según lo que me han contado las chicas, es algo que siempre suelen hacer cuando es posible; almorzar juntas para poder compartir y ponerse al día. Aunque para mí no es del todo cómodo comer gratis ya que, bueno, no estoy acostumbrado.
Y aun si intento lavar los platos para agradecer por ello, ellas sacan la excusa de "Te queremos y por eso lo hacemos" o algo similar para evitar que lo haga.
Supongo que jamás dejaré de ser alguien modesto, me acostumbre desde niño por la deuda que ya se pagó.
Entender a estas cinco idiotas es algo que no puedo hacer, pero eso no evita que este junto a ellas... Vaya, esto me trae recuerdos de cuando era mas joven.
Pero, no me molesta estar de esta manera, todo lo que hice fue por esto y se siente bastante bien, aunque debo de admitir que este sentimiento de conformismo es algo repugnante.
Quizás en su momento si me fastidiaba que cualquiera de estas cinco se me acercara o me coqueteara de cualquier manera pero ahora es distinto. Realmente disfruto su compañia y me gusta que sean melosas conmigo... Mierda ¿Qué fue lo que me pasó?
En medio de tantos de mis pensamientos pude ver que ya estábamos cerca de la entrada de la cafetería, pero había algo raro; muchas personas estaban considerablemente lejos de la entrada observando hacia adentro.
— Disculpe señor — Yotsuba se acercó hacia un anciano — ¿Qué sucede? ¿Por qué están mirando de esa manera hacia adentro? —
— ¡Están asaltando ese lugar! — El anciano respondió asustado — ¡Las jovencitas de allí adentro deben estar en peligro! —
— ¡¿Asalto?! — Yotsuba se sobre exaltó — ¡Pero mis hermanas están allí! —
— Pero no puede pasar, estan armados —
— Mami... ¿Nuestras tías estarán bien? —
Hiroko y Aiko preguntaron a la par, preocupadas y asustadas.— Y-Yo iré a ayudar — Yotsuba dijo — ¡N-No permitire que les hagan algo! —
— Entiendo su situación señorita, pero es peligroso — El anciano la vio con lástima — No puede ir —
— Ella no — Me separe del agarre de las niñas — Pero yo si —
Me harte de ver que no buscaban una solución, si no esperar a la policía que tal vez demore medio año en venir y para ese entonces ya sería demasiado tarde para poder tomar acciones.
Debo actuar, aquí y ahora.
Ignorando a las personas que intentaban detenerme, me adentre a la tienda y lo primero que vi fue a Nino y Miku amordazadas en una de las tantas mesas, y adelante de ellos estaban dos de los tipicos ladrones con capuchas.
— ¡¿Qué demonios quieres?! — Uno de los ladrones sacó su pistola para apuntarme con ella — ¡Sal de aquí o te disparo! —
— Quiero ver que lo intentes —
Antes de que disparara me cubrí en la barra del lugar, a lo que el idiota no dejó de disparar mientras el otro que lo acompañaba simplemente sacó su celular.
Bien, analizando la situación en la que me encuentro. Estoy en un lugar cerrado con dos tipos armados y yo no tengo ningún arma a disposición. Además hay presencia de dos rehenes que complican la situación.
Entonces es una batalla justa.
Al escuchar como empezó a recargar tome una bandeja y la lance rápidamente hacia su rostro, esto provocó que al impactar el tipo soltara su arma ya cargada, esta cayó al piso y antes de que el otro pudiera reaccionar me moví rápidamente hacia ella, la tomé y luego le disparare en la pierna al ladrón que tenía el celular para evitar una reacción, y luego le dispare en el hombro al que tenía por delante para hacerlo retroceder y seguidamente darle una patada en la cabeza para noquearlo.
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Mayday
FanfictionFuutarou desapareció luego del día de la graduación sin dejar rastro alguno, las quintillizas Nakano preguntaron por el a su familia pero jamas les dieron una respuesta. Pero luego de varios años el regresaría a sus vidas pero no como esperaban.