ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ᴜɴᴏ

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Era el comienzo de un nuevo año escolar y como ya era costumbre de los años anteriores, Cyno estaba atrasado. Ya eran pasadas de las 8:30am cuando entro a su secundaria, recibiendo un regaño del inspector que se encontraba en la entrada del establecimiento. Entró a su aula en silencio y busco con su mirada un lugar disponible.

¡Cyno, aquí! — Dijo una pelirroja agitando su mano en el aire, el mencionado se acercó a sentarse con ella. — Como sabía que ibas a llegar tarde, te guardé un puesto al lado mio y de la ventana, sé que te gusta así.

Gracias, Nilou.

Deja de ser tan frio, me congelo.

Cyno se puso sus audífonos, apoyo su cabeza en la palma de su mano y miró por la ventana que daba al pasillo, en la clase el profesor solo habló de las actividades artísticas que iban a haber después de clases, los equipos deportivos, y demás, nada interesante en el punto de vista del peliblanco. La campana sonó y todo el curso salió al receso, menos ese par.

Nilou tiró del cable de los audífonos del moreno y se los quitó. — ¿Seguirás en el equipo de basquetbol este año? Este año las practicas serán los martes y jueves.

Supongo. — Soltó un suspiro. — ¿Solo hablaron de eso en la clase? — Preguntó y Nilou lo puso al día con todo lo que dijeron, su conversación fue interrumpida por una alumna del curso paralelo, que entró al aula y pegó un pequeño poster en la pared y se retiro sin decir una palabra. — ¿Y eso?

La votación para el presidente del consejo estudiantil, hoy vamos a votar en nuestro tiempo libre y mañana anunciaran los resultados, en el poster supongo que dirá el lugar donde vamos a votar.

Que tontería.

La jornada escolar terminó más rápido de lo que esperaba, lamentablemente fue obligado por su amiga a ir a votar, con un "Será rápido, ya nos iremos a casa" fue como lo convenció.

(...)

Segundo día de su último año y ya no quería estar presente en las aburridas clases de matemáticas, ver las personas que pasaban por el pasillo era más interesante que esa lección de trigonometría.

Ya hay que ir al gimnasio, nos vamos a perder el resultado. — Nilou tiraba del brazo de Cyno para levantarlo de la silla.

Ya voy, Nilou.

Llegaron al lugar asignado, el cual estaba repleto de personas, así que solo se quedaron parados cerca de la puerta a ver. Las luces iluminaban al presentador que sostenía una carta en sus manos, sacó de su interior un papel y lo leyó en voz alta.

El presidente del consejo estudiantil es... — Habló a través del micrófono. - ¡Tighnari! — El gimnasio se llenó de aplausos mientras el mencionado subía al escenario a dar un discurso de agradecimiento. Tighnari, hijo del actual director de la secundaria, había sido el presidente del consejo los últimos dos años, era un joven muy inteligente y con un buen razonamiento, lo que le ayudó a llegar donde está.

Cyno resopló mientras veía al estudiante de su misma clase dar su discurso, no le agradaba para nada — ¡Muchas gracias a los que votaron por mí, no los decepcionaré! — Con eso terminó de hablar y el par se fue del lugar.

Ese zorro de nuevo... ¿Qué tiene de bueno él? — Se quejó el peliblanco en el camino al aula.

Cyno, quizás si te tomas el tiempo de conocerlo no te caería tan mal.

Me rehuso.

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Hola, gracias por leer y espero que te haya gustado el principio de esta linda historia, por favor compártela para que llegue a más personas

Ya me voy a dormir, buenas noches ₍ᐢ..ᐢ₎

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¿𝐐𝐮𝐞́ 𝐯𝐞𝐬 𝐞𝐧 𝐦𝐢? - 𝐂𝐲𝐧𝐨𝐧𝐚𝐫𝐢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora