___୨ Little Hearts ୧___

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Había una vez, un pequeño niño que era muy cariñoso, le gustaba mucho salir con sus amigos, abrazar a sus padres y hermano cada que tenía la oportunidad, solía darle pequeños dibujos a su madre y por sobre todo, le gustaba hacer nuevos amigos

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Había una vez, un pequeño niño que era muy cariñoso, le gustaba mucho salir con sus amigos, abrazar a sus padres y hermano cada que tenía la oportunidad, solía darle pequeños dibujos a su madre y por sobre todo, le gustaba hacer nuevos amigos. En un día tranquilo su padre llegó diciendo que se cambiarían de casa, ahí llegó a conocer a un sensible chico, aquellos ojos oscuros que te hipnotizaban y las pestañas largas que te atrapaban era lo que llamo su atención, el como su rostro estaba ligeramente rojo en la mayoría del tiempo y como desviaba su rostro para esconder sus expresiones.

Son estrellitas —dijo con seguridad al verlos más de cerca

El tiempo pasó y su relación con ese niño se hizo más profunda, iban juntos a todos lados, siempre agarrados de la mano y del mismo modo, aquellos rizos castaños siempre terminaban aferrándose a los hombros de aquel tranquilo chico. Hasta que la pubertad llego y ambos comenzaron a cambiar físicamente, ambos comenzaron a dejar sus rostros infantiles y adorables, sus estaturas cambiaron y del mismo modo sus voces estaban quebradizas, pasando de un tono a otro.

—Iván —dijo de forma aguda —mierda, Iván ¿Por qué no hablas? —esta vez su voz era más grave

No hubo respuesta, solo observó como el contrario tomaba un pedazo de papel para escribir. Era un día bastante extraño pues había sol pero del mismo modo estaban cayendo gotas de agua, creando una linda imagen, al igual que un impresionante arcoíris que ambos chicos veían. Las esmeraldas estaban a la expectativa de aquella nota, pensando en que diría aquel lindo chico.

“No quiero hablar porque mi voz se rompe”

—la mía también pero es normal.

Sus manos se posaron en el pálido rostro frente a él, le dedicó una dulce sonrisa y solo trazo con sus dedos un corazón en la mejilla derecha del azabache, rio al notar como sus mejillas se coloreaban de rojo en un instante pero se quedó callado al ver cómo los ojos oliva se cristalizaron.

—¿Qué pasó?, Perdón.

Dejando lo que hacía lo abrazo notando el acelerado corazón del callado chico, se preocupo un poco pues no era normal que eso pasara si no estaba haciendo ningún tipo de actividad, se alejo para colocar su oído en el pecho del más alto y escuchar mejor, eran cada vez más rápido, más fuertes y más preocupante para él. Exaltado tomo la mano del menor.

—tenemos que ir al doctor, tú corazón está muy rápido.

Se levantó intentando jalar la mano del chico, pero este solo susurró algo, el ojiverde no logro escuchar por lo que lo miro confundido. Sintiendo esa mirada y la culpabilidad en su interior por preocupar al chico que amaba, se llenó de valor para hablar.

esporotracosasusurro de forma atropellada con una voz que todavía denotaba infantilidad.

—¿Puedes hablar más lento?.

Sintió como la mano que seguía sujetando se humedecida, seguía a la espera de una respuesta pero el contrario parecía ponerse a llorar en cualquier instante. El sentimental chico solo intentaba calmarse, sus nervios habían que sus manos sudaran y las lágrimas lo atraparán.

—Lo siento —murmuro —.es que tú me haces feliz y yo-yo —se quedó callado. Mordió su labio de forma brusca antes de continuar

—Iván, está bien tómalo con calma.

—¿Qué vez en mis ojos?.

Aquella pregunta dejo pensando al mayor, pero su respuesta rápidamente llegó

—Solía ver estrellitas, pero ahora veo pequeños corazones ¿Sabes porque? —el contrario solo negó —.Porque quiero mucho a Iván, así como Iván me quiere a mi.

—La forma en la que yo te quiero no es igual a como tú me quieres —su voz seguía cambiando de aguda a grave avergonzándolo un poco

—¿Por qué es diferente?.

—El acelero de mi corazón debería ser suficiente para que te des cuenta, me gustas de forma diferente.

La pequeña mente del extrovertido comenzó a pensar, hasta que llegó a su conclusión. Como si un valde de agua fría hubiera caído sobre él entendió todo, se sentía estúpido por no darse cuenta pero él se había resignado a qué siempre serían solo amigos. Mientras sus ojos brillaban de felicidad por esas palabras tomo aire para hablar con una sonrisa

—También me gustas de esa forma, la forma en la que te veo debería ser suficiente para que te des cuenta —dijo seguro de sus palabras. Jalo al chico para terminar bajo las gotas que seguían cayendo —Me gustas mucho Iván.

Se acercó a él para dejar un pequeño beso, que fue suficiente para ambos, fue suficiente para que sus rostros enrojecieran y sus corazones explotarán. Fue suficiente para que sus vidas se unieran para siempre como si una especie de unión indestructibles fuera creada con ese toque, fue suficiente para dos pequeños niños que dieron su primer beso a la persona que amaban y siguen amando hasta ahora.

Hasta ahora que años después esa relación seguía en pie, aquella pareja que empezó por las lindas estrellitas en los ojos de Iván termino con ellos dos viendo corazones en los ojos del contrario. Las estrellas pasaron a ser solo observadas en aquel manto oscuro en donde sus vistas estaban ahora, ahora que ya eran un par de ancianos felices por seguir vivos para poder seguir amandose.

—Rodri, ¿Por qué me besaste bajo la lluvia esa vez?, Nos terminamos enfermando —dijo con nostalgia al recordar.

—Porque en las películas que veía mi mamá hacían eso —respondió sin más —. Hasta el día de hoy veo corazones en tus ojos.

—Hasta el día de hoy te sigo amando.

Con tranquilidad siguieron ahí sentados, viendo el cielo rogando por poder encontrarse en sus próximas vidas y por tener la suerte de morir al mismo tiempo, pues ninguno podía pensar en su vida sin el otro.
Esa misma noche, justo frente a ellos dos, notaron como dos niños pasaron corriendo frente a ellos, del mismo modo sus manos estaban agarradas y sus mentes regresaron a esos momentos en dónde se conocieron. Esos momentos en dónde su linda historia comenzó

En dónde desde el primer instante en el que hablaron conectaron y en el último suspiro de sus cuerpos se dijeron cuánto se amaron.

Fin.

Bueno pues hola, feliz año nuevo jajaja, realmente esta historia es algo simple y linda, se basa en una idea que tenía de pequeño, así que un día dije bien escribamos algo con eso y aquí está

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Bueno pues hola, feliz año nuevo jajaja, realmente esta historia es algo simple y linda, se basa en una idea que tenía de pequeño, así que un día dije bien escribamos algo con eso y aquí está.

Gracias por leer y espero les haya gustado mucho ♡

𝗜𝗻 𝗬𝗼𝘂𝗿 𝗘𝘆𝗲𝘀 ┃ 𝖱𝗈𝖽𝗋𝗂𝗏𝖺𝗇 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora