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Difícil

POV: Yo

dejó escapar un tembloroso jadeo, podia ver una figura borrosa, varias figuras borrosa que, incluso sin ver bien sus rostros él ya sabia quienes eran, ya sea por una de las pequeñas estaturas cruzada de brazos o por los brillantes colores naranjas y blanco que podia ver vagamente coronando las cabezas ajenas. Todos sus niños estaban juntos, de forma extraña parecia que le sonreian, incluso si no podia verlos asi se sentia en su corazon.

Intentó llamarlos pero no parecian escucharlo, solo moviendo sus manos de forma alegre, no sabia si fue un movimiento de hola o adiós pero por algún motivo esos gestos solo hicieron que un sudor frio lo recorriera y que inconcientemente se apresurara a correr hacia ellos. porque tenia que alcanzarlos, porque no podia dejarlos, porque eran sus niños...

Después de unos minutos jadeó nuevamente, se sentia cansado y lleno de sudor como si hubiera corrido durante horas, pero siempre era como si estuvieran cada vez mas lejos, como si fuera una señal de que nunca podria alcanzarlos por mas cerca que estuvieran y por mas que corriera, como si ya los hubiera perdido.

Abrió los ojos de forma abrupta, mirando hacia todos lados con paranoia bailando en sus ojos mientras buscaba las figuras familiares a su alrededor, pero no los encontró, le tomó varios segundos darse cuenta de que habia sido un sueño, o quizas una pesadilla.

Ignorando el horrible estado de su cuerpo se sento correctamente y miro a su alrededor nuevamente, está vez para familiarizarse con su entorno, todo estaba en un silencio extraño, dada una sensación de paz antes de la tormenta, notó que recién amanecía y a su al rededor habia un hermoso y verde espacio abierto con varias pequeñas casas rurales, arboles frondosos y vivos en los bordes más lejanos, también habia un enorme tobogán no muy lejos que daba a lo que parecia ser una piscina y actualmente se encontraba en un kiosco sobre una mesa vieja de madera, pero lo más importante, no parecia que hubiera nadie más que él por ahí, quizás por la hora.

Miro su cuerpo de forma tentativa y comprobó que si bien los vendajes no eran profecionales estaban muy bien hechos para haberse realizado a manos de un civil, arrugó un poco el ceño de nueva cuenta cuando penso en lo que dijo el chico la noche anterior... con que un amigo doctor ¿He? en su mente pasaron varias figuras y no pudo evitar preguntarse si ya habia conocido o trabajado con la persona que mencionó el chico. Entre sus divagaciones aparece una en particular que lo hace congelarse levemente antes de volver a suspirar, porque hace mucho que no ve a Ryuuken, si no lo olvidaba, Shiro dijo que estudiba con su hijo ¿Hace cuánto que no ve a su amigo? Ciertamente desde antes de que Masaki también lo dejara.

Sacudiendo la cabeza se pone en guardia cuando escucha pasos ligeros, del tipo que carecen de zapatos dejando que los pies se froten contra el pasto. En poco tiempo aparece alguien frente a el y le parece familiar del encuentro del dia anterior, Lilynette dijo ella que se llamaba, y efectivamente estaba descalza, llevaba un conjunto de pijama rosa de puntos blancos y el cabello verde claro hecho un desastre.

La chica lo miro de reojo y él de forma casi instintiva le dio una sonrisa de forma ligeramente boba. Lilynette arrugó un poco las cejas por su reacción antes de poner los ojos en blanco y hacerle una pequeña señal para que la siguiera antes de darse la vuelta.

Isshin la miro nuevamente y no pudo evitar pensar en Karin, a pesar de que físicamente no se parecían mucho estaba seguro de que si su hija y está niña se encontraban solo podrían llevarse increíblemente bien o terriblemente mal... Espera que no sea lo segundo.

Tras ponerse de pie con cierta dificultad por su rígido cuerpo llegaron a una de las casas rurales que previamente había visto, la chica hizo una pausa y tomo el pomo de la puerta para abrirla, sin embargo, antes de que pudiera hacer cualquier otro movimiento la puerta se abrió de forma rápida pero extrañamente silenciosa casi golpeándola.