AMBU [Sakumo x Ariel]

2

El pelirrojo ni siquiera supo como llegó a su departamento, su corazón latía tan rápido que sentía que escaparía de su cuerpo, pensó que si no se calmaba moriría de un infarto, su mente aún no procesaba bien lo sucedido, nunca en su
vida había visto un cadáver y mucho menos un asesinato.

A paso torpe caminó a su habitación, dejó caer su mochila al suelo y recién allí se dió cuenta de lo tarde que era, ya estaba anocheciendo, una vez salió de su trance realizó lo que supuso era lo correcto en está situación.

Llamo a la policía y les contó casi todo, el resto quedo en contárselo cuando estos fueran a su casa.

Para la policía el llamado del pelirrojo fue como caído del cielo, no todos los días surgían testigos de haber visto al asesino de los Ambu al mismísimo Mr. Killer.

Lo único más cercano a un testigo eran las cámaras de seguridad que al parecer el asesino sabía perfectamente que estaban allí pues siempre al terminar con su cometido se despedía mirando hacia las cámaras y luego por alguna razón estás se apagaban o estropeaban.

No hace falta decir que los policías corrieron a la dirección del rubio especialmente la detective Mirai pues esta tenia una gran rivalidad con Mr. Killer.

La detective Sarutobi era la mejor de todo Seúl por lo mismo también necesitaba atrapar al asesino y recuperar así su récord, el nunca dejaba que ningún delincuente se escapara de sus
manos y Mr. Killer no sería la excepción.

-Mierda, ¿porque no llegan...? -ya había perdido la cuenta de cuantas veces había dado vueltas por su departamento esperando que la policía aparecieran-

Y como si tuviera el don de la palabra la puerta fue golpeada.

¿Y si no eran los policías?

¿Y si el asesino venía por el?

¿Deberia abrir?

- Bueno...el que no arriesga no gana... - susurro tomando aire en sus pulmones quito el seguro y abrió... por fin pudo botar todo el aire retenido, frente a el había una chica algo más alta que el con un cabello Negro, de su cuello colgaba una larga cadena y al final de esta había lo que parecía ser una credencial que decía "Detective Mirai Sarutobi" junto a esto había una foto y más información no tan legible para su vista.

-¿Ariel Uzumaki? -preguntó la azabache bajando los lentes que cubrían sus ojos-

-S-si-respondió el pelirrojo evitando la penetrante mirada de los oficiales que la acompañaban - adelante

La azabache ingreso a aquel humilde departamento analizando cada rincón con los policías a sus espaldas, Ariel se encontraba completamente cohibido, la detective Mirai tenía la mirada mas profunda y penetrante que jamás había visto.

-¿Dices que viste a Mr. Killer? -habló la detective observandolo.

-¿Mr.  Killer? - Ariel no tenia ni la menor idea de quien era esa persona- yo solo vi un tipo con máscara blanca.

-Bueno pues ese chico es Mr. Killer y tu nos ayudarás a encontrarlo - la detective se sentó en uno de los sofás de la sala- ahora quiero que me cuentes todo y no omitas detalles.

Ariel estaba más que nervioso, al recordar lo que vivió hace poco.

-Y-yo..necesitó ir al baño... -habló caminando lejos de los intrusos- ya regreso.

-Hazlo rápido -suspiró la azabache apartando su mirada hacia sus policías-

Ariel sintió y se perdió en el pequeño
pasillo camino al baño, al llegar suspiro mirando su reflejo en el espejo, se inclinó para mojar su rostro con el lavamanos, necesitaba quitarse los nervios pronto.

Se sobresalto al escuchar un pequeño
ruido a sus espaldas pero al voltear no había nada, solo un pequeño pájaro fuera de la ventana jugando en el árbol.

Suspiró aliviado y comenzó a secar su rostro buscando paz, una vez listo regreso su mirada a su reflejo y allí fue cuando todo se detuvo...

Ojos invisibles por aquella mascara lo miraban por el reflejo, el rubio intentó gritar pero una gran y fuerte mano cubrió su boca mientras que otra mano lo sujetaba con fuerza de su cadera atrayéndolo a aquel cuerpo a sus espaldas, Ariel temblo al sentir el caliente aliento del asesino en su cuello.

-¿Me extrañaste kitten? -fue lo que dijo el asesino en su cuello haciendo que un escalofrío recorriera su cuerpo-

La detective ya estaba aburriéndose de la espera, el pelirrojo aun no se dignaba a aparecer por lo que decidió ir por el pero al llegar al baño no encontró nada más que la fría brisa entrando por la ventana y un pequeño papel pegado en el espejo.

Nota:

¿Disfrutó su tiempo con mi kitten?

¿Enserio creyó que se lo dejaría tan fácil?

Vamos es mejor que eso, encuentrame sin usar terceras personas, esto es entre tu y yo.

P.d: Me divertire mucho con este gatito así que más vale que te apresures.

Mr. Killer