Aguas Termales

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—Gracias por la comida.

Los Pilares se encontraban reunidos en el comedor de la posada, cerca de las aguas termales, disfrutando juntos de una deliciosa comida tradicional japonesa. Después de días agotadores de cazar y destruir demonios hasta el punto de perder el sueño, finalmente habían tomado unas merecidas vacaciones para disfrutar de las aguas termales durante tres días y dos noches.

Kochou Shinobu partió los palillos en dos, tomó un trozo jugoso y tierno de carne y lo llevó a su boca para saborearlo. Sin embargo, en medio de su deleite, su mente se llenó de imágenes perturbadoras. Recordó la imagen del demonio que había envenenado hasta vomitar todos sus órganos el día anterior, así como la escena de las cabezas ensangrentadas de los demonios decapitados por Tomioka-san durante una de sus misiones juntos. El estómago de Shinobu comenzó a gruñir, como si estuviera a punto de regurgitar. El trozo de carne que antes estaba tierno como la seda ahora se sentía como una piedra en su garganta, incapaz de tragarlo y, al mismo tiempo, incapaz de escupirlo.

«Mal. Maldición», pensó, su bandeja de comida no tenía un vaso de agua, tal vez el mesero se había olvidado de incluirlo. De repente, una mano apareció frente a ella sosteniendo una taza de agua. Sin pensarlo dos veces, Shinobu la tomó y bebió de un solo trago, sintiendo cómo su garganta se despejaba. Luego, se volvió hacia su derecha y le sonrió levemente.

—Gracias, Tomioka-san. —dijo Shinobu.

Giyuu negó con la cabeza apenas perceptiblemente. Estaba concentrado en su comida, mientras la voz clara y elegante de la chica a su lado seguía resonando en sus oídos.

—Tomioka-san, sé que te gusta el salmón guisado con rábano, ¿verdad? ¿Quieres hacer un intercambio conmigo?. —preguntó Shinobu con una sonrisa cortés, sosteniendo en su mano un delicioso plato de salmón guisado con rábano caliente.

Giyuu inclinó la cabeza, pensando por un momento, pero antes de que pudiera responder, Shinobu lo interrumpió empujándolo.

Shinobu realmente quería arrojar el tazón directamente a la cara de su colega. Si le das, ve y recógelo tú mismo, y pide alimentarlo. Pero oye, de todos modos él le acaba de dar su vaso de agua, así que ahora no matará a nadie. Pensando en hacerlo, Shinobu tomó un trozo de rábano y lo acercó a la boca de Giyuu.

«Parece que soy 'un poco' demasiado inteligente», pensó para sí mismo.

Los Pilares observaron la escena en silencio, sin decir una palabra:

— ....

● ● ●


Shinobu entró en el área de aguas termales, los alumnos miraban constantemente a su alrededor tratando de encontrar una figura. Curiosamente, ahora es tarde, pero ¿quién tiene tiempo para llamarla?

Dado que se trata de una fuente termal pública que no discrimina entre hombres y mujeres, la princesa cubrió los tres días completos con solo nueve personas, porque era una niña, por lo que ella y Kanroji-san tenían prioridad para bañarse primero. Después de bañarse, se sentó a jugar tenis de mesa con Kanroij-san. Y eran casi las once de la noche cuando un mesero dijo que alguien quería reunirse con ella en la zona de aguas termales. Aunque sintió que algo andaba mal, Shinobu decidió ir allí para confirmar.

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Una imagen brilló en los ojos de Shinobu, frunció el ceño cuando vio algo negro en el arroyo, Shinobu se acercó para verlo mejor. Luego dejó escapar un suspiro, resultó ser el Pilar del Agua: Tomioka Giyuu.

Pero, ¿por qué?, los niños ya deberían haber terminado de bañarse y haberse ido a sus habitaciones?. Entonces, ¿qué está haciendo él aquí..? Oh, Shinobu se golpeó la cabeza mentalmente, debe haber sido él quien la invitó a salir.

—Tomio... Tomioka-san, ¿estás bien? —preguntó Shinobu, preocupada. Solo ahora notó que la cara de Giyuu estaba tan roja como si acabara de comer un chile. '¿Será que estuvo empapado durante tanto tiempo que se hirvió?' Se preguntó Shinobu, pero antes de que tuviera tiempo de reflexionar mucho, sintió una fuerte fuerza en la espalda que la hizo caer al agua, golpeando a Giyuu de inmediato.

Reflexivamente, Shinobu se aferró al cuerpo de Giyuu para mantener el equilibrio, pero antes de que Shinobu pudiera decir algo, después de haber sido engañada, sus labios fueron tomados rápidamente. Los ojos de Shinobu se abrieron cuando se dio cuenta de lo que el hombre frente a ella le estaba haciendo, trató de escapar pero no tuvo éxito debido a la fuerza que la sujetaba con fuerza.

—Kochou... —Giyuu acababa de dejar que Shinobu recuperara el aliento por unos minutos, pero luego se acercó rápidamente. Una de sus manos la sujetó con fuerza para evitar que ella luchara, y la otra mano se deslizó por la parte posterior de su cuello, profundizando el aún no lascivo beso pero muy pronto eso cambiaría. Shinobu sintió la punta de la lengua de Tomioka adentrarse a su boca sin pudor alguno, para empezar a explorar, lo que la hizo fruncir el ceño. Trató de mantener la calma e intentando pensar con claridad en medio de la alocada y extraña situación.

Con la cara roja y jadeante, Giyuu estaba teniendo 'sexo' con ella o quería tenerlo, lo que indicaba que probablemente estaba bajo los efectos de alguna droga, eso debía ser, no había otra explicación para aquel comportamiento. Shinobu intentó conectar los puntos y se dio cuenta de que ambos habían sido manipulados por otra persona. O eso es lo que quiere creer ahora mismo.

Con la personalidad erguida y desconcertada de Giyuu, incluso si realmente le gustara, no se atrevería a castigarse a sí misma. Esto significaba que... ¡Ambos habían sido víctimas de un engaño!












La siguiente parte de este párrafo soy puro zl chicos :D

Incidente En Las Aguas Termales [Giyushino]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora