CLICHÉ - (KOOKMIN)

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Era la 1:30 am cuando Yoongi y Jungkook esperaban pacientemente detrás de la camioneta, no habían bebido más solo mataron el tiempo en espera de las dos horas, tuvieron que tomar un taxi desde el bar de los RedBirds para no dejar las motos a la vista de todos.

Unos minutos más tarde Karlo salía de aquella casa con la tarjeta de acceso que abría el enorme portón eléctrico, este vio a ambos chicos y abrió la puerta entregándole dicha tarjeta a Jeon.

- Cuando se vayan déjenla arriba de esta lámpara - Señaló una pequeña lámpara cuadrada en lo alto de la casa - Los jovenes Park y Kim ya están en la parte atrás... feliz navidad.

Karlo salió dejando entrar a los chicos y se fue en la camioneta para ir a su propio hogar a celebrar con su familia.

- Ese Jaime me cae bien - Comentó Yoongi excitado y divertido por la situación.

- Es Karlo

- Es igual, muévete... - Ambos se escabulleron por uno de los lados de la casa, pasando al jardín trasero que más bien parecía un campo de mini golf, fácil ahí podían construir otras 2 casas y cada una tener su pedazo de jardín y cochera. Estos veían obscuro, sin ninguna maldita cochera.

- ¿Donde mierda están? - Preguntó Yoongi

- No veo nada - Dijo Jeon enfocándose, hasta que vio una pequeña luz parpadeando en una zona donde no había iluminación en el amplio jardín. - ¡Allá!

Los dos corrieron hasta llegar al dichoso garaje que era unas estructura de madera fina con acabados rústicos y un pequeño pozo a lado, esa porquería parecía una cabaña de turismo caro y era una simple cochera para baratijas que posiblemente costaban más que su motocicleta.

- ¡Yoongi! - Dijo Tae abrazando al pelirrojo.

- ¡Niño bonito! - Este le respondió en el mismo abrazo, Jungkook solo esperaba a su chico.

- Lo siento Jungkook, lo intente pero se rehusó a bajarse - Tae ahora se veía triste por ver al pelinegro con una esperanza que sabía era en vano.

- ¿Es en serio? - Yoongi se veía igual de sorprendido

- Si, estuve hablando con el pero no quizo bajar, se encerró en su habitación

- Sigue siendo Jimin - Afirmó el pelirrojo viendo a Jeon parado sintiéndose como un completo idiota.

- ¿Donde es? ... ... Su habitación - Pregunto Jungkook viendo a la enorme casa.

- ¿Para que quieres saber? ¿No pensarás ir verdad?

- Jimin no me quiere dar la cara, así que yo iré a buscársela

- ¡Estás loco! ¿Y si su padre te mira? - Dijo Tae.

- Sere cuidadoso - Jungkook miró al chico en pijama y se le ocurrió una idea - Dame tú ropa...

- ¿Que? - objetó Yoongi.

...

Jimin estaba acostado pero sin poder dormir, se sentía mal por haber dejado plantado a Jungkook pero su camino ya estaba llegando lejos y seguía en las mismas con Jackson, ademas de que este había golpeado al pelinegro y eso se empezaba a sentir más como un Deja vu acercándose a paso lento, debía haber alguna forma de parar sin que Jungkook se enterara de todo, estaba pensando en todas las formas en que podía deshacerse de Jackson para poder corresponderle y de pronto su puerta sonó una vez más.
Taehyung no entendía que no era no.

- ¡Tae Lárgate! - Susurró el pelirosa, otra vez la puerta volvió a sonar y con miedo de que sus padres se despertaran se levantó rápidamente para darle un golpe a su amigo. Pero aquello no pasó porque en cuanto abrió la puerta unos labios lo tomaron con fuerza evitando que gritara, solo estaban pegados sin moverse mientras Jeon cerraba la puerta con seguro de manera lenta para no hacer ruido. Una vez adentro con sus dos manos tomó a Jimin en brazos, empezando por fin a mover sus labios.

El beso era lento pero dominante, Jungkook ese día ya estaba harto de los desprecios de sus padres como para todavía lidear con los falsos desprecios de Jimin y estos le molestaban más pues sabía que el pelirrosa lo hacía contra su propia voluntad o por lo menos es lo que su cuerpo le demostraba al responder a su beso, caliente, húmedo y ansioso, ansiosos por seguirlo sintiendo moviéndose sobre el. Jimin estaba a solo segundos de perder la fuerza de voluntad.

- Jungkookie

Continuará... Feliz navidad 🎄✨