Dos meses despues....
Una patada en las costillas despertó a Danika esa mañana sintiéndose muy malhumorada y muy cansada. Esta es casi como la configuración predeterminada de los últimos meses.
Otra patada contra sus costillas la hizo temblar mientras se arrastraba hacia
fuera de la cama.
"Cualquier día que no me despiertes a patadas, voy a estar muy preocupado. Tú, mi bebé, eres un buen pateador". Ella gimió, una pequeña extensión en su rostro.
hinchado por el sueño.
La puerta se abrió casi de inmediato, "¿Cómo estás esta mañana?" La voz de Baski la siguió cuando entró en su habitación con sus habituales pasos apresurados.
"Crumpy. Me siento como si hubiera envejecido cincuenta años." Ella refunfuñó, mirando con recelo los vapores que se elevaban de la taza de té que la mujer mayor llevaba en sus manos.
Una sonrisa se extendió por el rostro de Baski mientras dejaba el té en la mesa y se volvía para mirar a Danika, que parecía muy embarazada. "Es la sensación normal, querida. Aún tienes un poco de tiempo para
adelante y el bebe estará en tus brazos ".
El hermoso rostro de Danika resplandeció ante la idea de que su hijo estuviera en sus brazos.
Su mano acarició automáticamente su vientre con tanto amor. "No puedo esperar a que llegue este día ..."
La mujer mayor resopló, "Yo tampoco puedo. Y estoy segura de que su padre está tan ansioso como nosotros".
Si su rostro había estado brillando antes, estaba positivamente radiante ante la mención del rey.
Esos dos meses fueron buenos para ella y mejoraron su relación con el rey, él siempre estaba preguntando por ella, cuidándola de la mejor manera que un hombre como él puede ... siempre atento a cada pequeño detalle de ella y su bebé. Fue maravilloso.
Fue glorioso.
La semana pasada, él no fue a la corte porque ella se despertó con dolor de estómago,
sentirse muy débil. Se quedó con ella todo el tiempo, mientras Angie caminaba y la cuidaba.
Su coito había sido más frecuente durante los últimos dos meses que nunca, aunque él no la había tocado así desde que le dolía el estómago y la trataron.
Siempre era amable, poniéndola a ella en primer lugar, incluso cuando no le gustaba, como lo haría si hubiera seguido su propio ritmo. Y, sin embargo, eso no le impidió tener relaciones sexuales con ella tan a menudo.
Ya no tiene ninguna duda de que él es feliz.
Incluso sin el estiramiento de sus labios y el parpadeo de sus ojos en sonrisa y risa, ella sabe sin lugar a dudas que el Rey Lucien es tan feliz con su bebé como ella.
"Toma, este té es para ti. Vamos, tómalo mientras aún esté caliente".
Danika suspiró derrotada y tomó el té, aunque no quería. Hace tiempo que ha llegado a la conclusión de que es inútil discutir con Baski.
"Necesito una ducha y refrescarme". Ella tragó saliva, empujando el vaso vacío hacia la anciana.
Baski sonrió mientras caminaba hacia la mesa y dejaba su taza. "Sé esto más que tú. Informaré al rey que no estás comiendo tu caldo de pollo y tu sopa muy bien
El solo hecho de mencionar el nombre de la comida la ponía muy enferma: "¡Eso es porque cocinas con hierbas!"
"¡Hierbas que son buenas para ti y tu bebé, no me gusta el sabor de esto!", Enfatizó con un fuerte grito.
"Pero, comerás."
"¡No, yo no voy!" Ella se cruzó de brazos obstinadamente. "Tú irás."
"No vas."
"Vamos."
"¡No!" Danika respondió.
"Lástima por ti, jovencita, porque vas a seguir comiendo". Manos a ella, dijo Baski con una obstinada inclinación de la barbilla.
Danika perdió la pelea con ella y encorvó los hombros. Se le llenaron los ojos de lágrimas mientras miraba a Baski.
La demostración emocional le recordó a Baski lo que nunca había olvidado ... su embarazo.
La anciana suspiró mientras se acercaba a ella y envolvía sus brazos alrededor del cuello de Danika, atrayéndola en un abrazo. "Es por tu propio bien, Danny. Tú lo sabes ..."
Danika se acurrucó contra ella, las lágrimas caían en cascada por ella.
ojos en ondas. "No quiero comer el caldo de hierbas". Murmuró miserablemente, haciendo pucheros.
A Baski le recordó a un conejo pateado. Ella sonrió, "Olvidémonos del caldo por ahora, ¿de acuerdo?"
"¿No se lo vas a decir al rey?" Danika murmuró como una niña tratando de evitar que su madre se enterara de que había hecho algo malo.
Baski se alejó sin responder. Regresó a la mesa y comenzó a moler las hojas de hierbas que recogió de la mesa.
Llamaré a Uyah y Derul para que te preparen un buen baño. Oh, sin mencionar a ti, la ropa nueva de la costurera llegará hoy y te las probarás todas".
Danika olvidó por completo que la mujer mayor no respondió a su solicitud, en su lugar encogió el
espalda. "¿Por qué probármelos de todos modos? Todavía me veré gorda y embarazada de ellos.
Baski resopló de nuevo, "Solo tienes grasa abdominal, lo admito. Además, todavía tienes el tamaño que tenías antes. Toma, bebe esto".
Danika abrió la boca automáticamente y Baski vertió el líquido amargo exprimido de las hierbas. "Ahí está ..." animó la anciana.
Danika refunfuñó hacia el baño, donde alivió su vejiga. Escuchó a Baski irse.
Uyah y Derul no tardaron en entrar y empezar a ayudarla con su baño. Ella estaba agradecida y no protestó.
Baski no sería el único que frunció el ceño en negación de atención y ayuda, a excepción del rey.
Desde que se enteró de su embarazo, ordenó específicamente a todas las sirvientas y guardias acerca de ella.
Rechazar su ayuda significa meterlos en problemas. Y así, guardó silencio mientras ordenaban su habitación y preparaban su baño. Ella nunca se olvidó de agradecer a ninguno de ellos después.
Después de la ducha, la costurera esperaba con su ropa nueva en su habitación.
La ayudó a encajar en cada uno de ellos.
Encajaban perfectamente, y Danika se miró en el espejo. Sus hombros se encorvaron.
Parece que se tragó una serpiente gigante.
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Una hora después, estaba en el patio trasero viendo a Remeta y Corna jugar.
