Contracorriente {Snack}

02.

James Potter era un Omega de clase alta , era el único Omega de su linaje por lo tanto querían dejarlo bien acomodado en una familia importante y respetable , sus padres eran buenos y amorosos con el , era su único hijo después de todo y solo querían lo mejor para el , por lo tanto , cuando les llegó una carta desde Londres con el emblema de los Black no pudieron evitar su emoción.

La carta en si no decía la gran cosa , solo los invitaba a verse en un punto intermedio para ambas familias pero habia un punto importante , no se podía mencionar sobre la reunión a sus hijos.

El día de la reunión James recuerda ver salir a sus padres con mucha emoción , emoción que fue aún más notoria con su regreso y recuerda perfectamente las palabras que sus padres le dijeron apenas cruzaron la puerta de su habitación;

— ¡Te casarás en seis meses James! — exclamó feliz su madre antes de abrazar a un sorprendido azabache — ¡La familia Black te ha elegido para que te cases con su heredero!

Despues de eso todo se volvió un caos , tenia tan solo tres días para llegar a la mansión que en unos meses seria su hogar legítimo, tendría que conocer a un Alfa que lo desposara y aun que ya había visto unas cuantas fotos del de rizos y no podía negar que era un hombre muy apuesto se sentía nervioso. ¿Que tal si no lograban enamorarse? ¿Que sucedia si tenía una mala manera de ser con el? El no aguantaría ni toleraria maltratos.

Los tres días que tenía para alistar sus cosas pasaron volando , un lunes por la mañana ya tenían todas sus cosas en un carruaje que lo llevaría hasta la mansión Black , sus nanas se despedían de el con lágrimas en los ojos , tan solo lo podrían acompañar dos de sus damos , eran quienes solían acompañarlo en todo momento , lo cuidaban y defendian de lo que fuera necesario.

— Estamos listos James ¿Tu lo estás? — pregunto un rubio parado frente al carruaje , le sostenía la puerta abierta para que entrara.

— Estoy nervioso a decir verdad — susurro ya que sus padres venían detrás de el — ¿Cómo está el? De seguro no le hizo mucha gracia tener que regresar a su pueblo natal.

Barty sonrió apenas , sentía pena por sus dos amigos , uno teniendo que casarse con alguien que no conocía y el otro teniendo que regresar al lugar que solo tenía malos recuerdos para el.

— Yo no recuerdo que ustedes fueran unos cobardes — acuso juguetona mente haciendo una inclinación una vez que la señora de la casa llegó hasta donde ellos estaban — sube por favor , Severus no dudara tanto tiempo siendo paciente , tenemos que irnos.

— Cuídalo por favor Bartemius — susurro solo para el mencionado — cuidense.. son mis hijos después de todo.

El rubio sonrió antes de abrazarla con fuerza , el sabia que realmente no erán sus hijos , no era idiota , la diferencia era enorme pero no podía evitar verla como la madre que la vida le negó tener , no recuerda mucho de su niñez pero si tenía un recuerdo bien grabado en su mente dónde aquella mujer tan noble y bella lo miraba con lágrimas en sus bellos ojos , lo recuerda por qué ella era la única que no lo miraba con lastima o asco , recuerda como ese mismo día le hicieron tomar un baño con agua caliente , como provo por primera vez comida en un plato y no de la basura , recuerda ver a James por primera vez , un niño bien vestido y tímido que lo miraba con curiosidad , después de ese día nunca más tuvo que vivir en la calle , supieron quiénes eran sus padres , se entero que su madre murió al poco tiempo de el cumplir un año y como su padre simplemente decidió abandonarlo a su suerte , sabia su nombre y apellido pero este último jamas lo usaba , para los demás el era Bartemius Potter , le gustaba su nombre y por lo que le habían dicho , su madre fue quien lo decidió así que con tan solo cinco años decidió que si su amada madre le había puesto ese nombre el la honraria manteniéndolo.

Barty no tenia una buena vida que contar antes de conocer a los Potter y ellos siempre le decían que no era necesario contarla si no estaba preparado , incluso ahora , a sus dieciocho años , seguía sin contar lo poco que habia podido recordar pues aún era muy pequeño cuando todo aquello sucedió.

Con Severus era distinto , el si tuvo a sus padres pero no hablaba de ellos nunca , solo la mujer sabía la verdadera historia del pelinegro y aún que no era su hijo de sangre lo cuidaba muchísimo más que a los otros dos y ella agradecia infinitamente que en lugar de molestarse o sentirse celosos ayudarán a cuidarlo y animarlo , formaron una familia , la gran familia que  Fleamont y Euphemia deseaban pero no habían pidió tener.

— Claro madre , nos vemos — susurro antes de soltarla y subir al carruaje , sería un viaje de dos días así que ya necesitaban partir.

James y Severus no sé asomaron para despedirse , el primero por qué ya había tenido demasiado de despedidas desde que inicio el día y el segundo por qué de verdad odiaba las despedidas.

Tenían aproximadamente dos horas de viaje cuando a sierto pelinegro le llamo la atención no saber nada sobre el prometido del azabache , no sabía el nombre ni de que familia provenía pero sabía que incluso si lo preguntaba James no se lo diría , para el azabache era poco importante el apellido el solo deseaba casarse algún día con un Alfa respetable y que lo amara , Severus quería creer que algún día el también encontraría a alguien que lo quisiera aún que siendo "defectuoso" cómo el mismo solía decirse de verdad lo dudaba.

— Severus — Barty llamo moviendo un poco su rodilla chocando con la del mencionado para llamar la atención del mayor — a dónde iremos ¿es bonito? Ya sabes que me gustan las cosas bonitas.

— Si preguntas sobre las personas , la verdad es que no se — se encogió de hombros — nunca miraba a la gente directamente asi que no sabría decirte.

— Bueno...— susurro mirando por la ventana del carruaje , se estaba aburriendo —

— Barty.. ¿No se supone que estabas muy triste por qué te rechazo ese Omega de antes...? olvide el nombre — James fruncio el ceño tratando de recordar pero no lo lograba.

— Existen demasiado Omegas por el mundo querido hermano — se encogió de hombros y después miro a Severus — los betas también son divinos , quizás y me enamore de alguno.

Severus gruño cómo advertencia.

— No juegues con los de mi casta o te cortaré tu hombria y haré que te la tragues , Bartemius — el pelinegro tenía su mirada puesta directamente en los ojos del menor , Barty sintió correr una gota de sudor por su espalda mientras James reía a carcajadas , sería un viaje demasiado largo.