Capitulo 5

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Mientras estábamos las tres en la habitación, se empezó a escuchar
Juan: - ¡Felicitaciones wey! Van a ser muy felices - se escuchó desde la otra habitación.
Filis: - Felicidades José - dijo seguido de Juan.

¿José? Pero que diablos hace José aquí, ¿en qué momento llegó?
Voltee a ver a las chicas en ese momento, todas teníamos las mismas caras de preocupación.
En ese instante todas nos paramos de la cama y procedimos a ir a la sala, escena donde Filis y Juan estaban abrazando a José.

Mariana: - Me voy, felicidades Samantha - dijo sin despedirse, y de una forma sarcástica, cerrando la puerta del departamento detrás suyo.
En eso percibí a Juan acercarse a mi para abrazarme, me quede rígida a su abrazo. No estaba entendiendo que pasaba.
Juan: - Felicidades Rivers, serán muy felices -
Rivers: - ¿Felices? ¿De qué rayos hablan? - pregunté confundida.
José: - De que nos casamos amor, pronto serás mi esposa -

...

Ari y Ama supusieron la situación e inventaron excusas para irse y llevarse a Filis y Juan de igual forma.
Solo estábamos José y yo en el departamento, estaba nerviosa por decirle y lastimarlo pero tenía que dejárselo en claro.

José: - Amor, perdona por no haberte ido a ver al Hospital y no llegar a tiempo para tu bienvenida, pero tuve que salir con mi hermana para ayudarme a escogerte un regalo por nuestro compromiso - de una bolsa del centro comercial saco una caja que procedió a abrir, donde había un collar que parecía verse bastante caro.
Rivers: - No, José - cerré la caja y procedí a regresársela.
José: - ¿Qué sucede amor? ¿No te gustó? - preguntó algo triste.
Rivers: - José, yo jamás te dije que sí. Yo no me quiero casar, no quiero una boda, no quiero usar vestido, ni un velo, ni un peinado y maquillaje extravagante - respondí
José: - Si es por eso amor, no te preocupes, hacemos la boda como tu quieras -
Rivers: - José, no es eso -
José: - ¿Entonces? -
Rivers: - Es que... yo no te amo -.

...

Habían pasado ya un par de semanas luego de mi ruptura con José. Aún me sentía mal, luego de decirle lo último se quedo serio un par de segundos que para mi eran eternos, luego con total seriedad tomo el regalo y se fue.

Todos los días, luego de aquel día tan pesado he estado recibiendo comidas de rappi saludables, aunque el repartidor me los entregaba de una forma "anónima" era obvio quien era el remitente.
Era extraño, desde aquel día Mariana me ha estado evitando, es como si se hubiese enojado, aunque cumplió su promesa de alimentarme.

Eran las 3:20pm y el timbre del departamento sonó, era rutinariamente el repartidor.
Repartidor: - Su comida señorita Samantha - sonrió amablemente
Rivers: - Sabes que a pesar de que te resistas a decirme el nombre de la persona que me manda tantas delicias, se quien es ¿verdad? - reí mientras recibía la bolsa con una charola dentro.
Repartidor: - Soy boca cerrada - dijo mientras con mímica simulaba tener un cierre en la boca y aventar una llave para luego soltar una pequeña risa.

Despedí a aquel muchacho, y procedí a abrir la charola donde se encontraba una exquisitez de tacos al pastor de al parecer muy buen restaurante. Cada vez que comía tacos con Mariana brindamos con nuestros taquitos antes de dar el primer bocado. (Sonreí mientras recordaba)

Tenía que hacer algo, si el estaba enojado es probable que no me hable hasta que yo lo busque, y que mejor ocasión que aprovechar compartir unos taquitos.
Cerré nuevamente la charola y procedí a subirme al elevador para ir a su piso.

...

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Wenas nochies gente bonita, primero para agradecer a todos los que están leyendo mi fanfic, los amou mucho <3 me motivan mucho a seguir escribiendo.
Les pido a los que leen si pueden apoyarme dandole estrellitas a los capítulos y comentar para que más gente linda pueda leerlo.
Estaré intentar actualizar más seguido para terminarlo. (Aunque apenas wamos comenzando cabrones, pero weño 🫠)
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