Andres es un chico de 19 años que busca la manera de conseguir las pastillas para su madre y ara todo para lograrlo.
Ari es un empresario millonario de 27 años que hasta ahora no encuentro su otra mitad.
Un encuentro amoroso será el inicio de una he...
Luego de aquel día en la montaña, Andres y yo solo siguimos trabajando normalmente, el trabajo aveces nos estresaba mucho, pero no lo podíamos dejar solo, ¿o si?
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─Buenos días, Ari!
─Buenos días, Vic, ¿Cómo as estado?
─Pues bien, nada diferente, la misma rutina siempre.
─Digo lo mismo, este trabajo aveces es estresante.
─Si, ¿Y para que me mandaste a llamar?
─Bueno.. Tu sabés que eres mi amigo de confianza y eso, quiero tomarme unas vacaciones de unos días con Andy, pero no tengo a nadie que se haga cargo de mi puesto, así que quería pedirte el favor de cubrirme estos días que estaré fuera de la cuidad.
─A bueno, me parece bien, acepto!
─Gracias!
─Por algo somos amigos, bueno ya me voy, bye nos vemos luego!
─Adios!
Victor se fue de mi oficina y justo cuando se iba Andres volvia del baño.
─Porq se fue tan feliz?
─Tu sabes que es medio ratito.
─Jeje, si
─Ven aquí Andy, sientate en mis piernas.
─Voy ─ Andres se acercó y se sentó en mi regaso cruzando sus brazos sobre mi cuello. ─Y dime, cómo estás, guapo?
─De maravilla.
─¿Se puede saber porque?
─Por que porfin tendremos una semana para nosotros dos~
─A que te refieres?
─Pues digamos que ví que mi hermoso niño estaba estresado, así que como quiero consentirlo, lo llevaré a Dubái!
─Hay.. No- Te. CREO!
─Asi cómo lo escuchaste, mi amor, solo una semana para nosotros dos~
─Hay mi amor, Gracias!!
─No me tienes que agradecer, yo te agradezco a ti por todo.
─Pero que pasará con nuestro trabajo!?
─Mira tu no te preocupes, mi amor, yo ya tengo todo resuelto, ahora vamos a ir a casa, compraré unos boletos de primera clase para los dos y nos iremos mañana mismo.
