VI

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¡Felices fiestas! He tardado un poco en traeros el último capítulo, que estaba escrito, pero no había encontrado un hueco para actualizar. Espero que lo disfrutéis y nos leemos en las notas finales. 

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Ambos abrieron los ojos al mismo tiempo después de un aterrizaje muy pobre orquestado por un semidios no nato.

—¡Loki! ¿estás bien? —Tony ya estaba a su lado, ayudándolo a incorporarse—. ¿Dónde estamos?

Parecía que habían acabado en alguna jungla, esperaba que de la Tierra. Grandes hojas cubrían casi todo el cielo y la humedad rozaba lo insoportable.

—No lo sé... no puedo volver—. El dios volvía a estar pálido. Para una persona normal estar de parto ya era lo suficientemente duro, pero al desgaste físico había que sumar el desgaste mágico que había tenido Loki durante el último mes.

—Quizás estemos cerca de algún poblado. Por suerte, mi traje cuenta con un GPS de última generación.

Tony pulsó el reactor arco en su pecho y el metal de Iron Man comenzó a cubrirlo en pocos segundos. Antes de poder dar una orden, un monstruoso chillido hizo que ambos voltearan en la misma dirección.

—No puede ser verdad.

Tony apenas tuvo el tiempo suficiente para disparar al pterodáctilo que descendía en picado sobre ellos, cambiando su trayectoria de vuelo.

—¡Nos has traído a tierra salvaje! ¿¡No había un jodido lugar más inseguro para parir!?

—¡Yo no elegí este sitio, animal!

—Te juro que ese niño va a estar castigado desde su nacimiento.

Una nueva contracción hizo que Loki tomara su vientre con la respiración entrecortada. No tuvo mucho tiempo para tranquilizarse, un nuevo chillido les avisó de que el enorme dinosaurio volador volvía estar tras ellos.

Tony levantó a Loki con un brazo para elevarse del suelo antes de que pudiera alcanzarlos, no era una tarea fácil. La barriga del dios impedía que pudiera sostenerlo por la cintura y necesitaba al menos un brazo libre para estabilizar el vuelo. En esas condiciones, disparar también se le dificultaba.

—Agárrate, nene. Esto va a ser una competición de vuelo.

Aumentó la potencia de sus propulsores esquivando como pudo la vegetación y Loki tuvo una nueva contracción, agarrándose con un grito a la armadura. Por suerte, Iron Man pudo elevar el vuelo justo en el inicio de una formación rocosa haciendo que el pterodáctilo que venía tras ellos no pudiera esquivarla y acabara estrellado.

Tony depositó a Loki en el interior de una cueva cercana donde pudieron verse a los ojos de nuevo. El mortal estaba al borde de un ataque de pánico, sudaba y los bordes de sus ojos también estaban empapados.

—¡Lo siento! Se suponía que no tenía que ser así. Iba a ser en Shield, con el mejor equipo médico y la tecnología más avanzada...

—Tony.

—Y estamos es una jodida cueva a cientos de kilómetros de la civilización y rodeada por dinosaurios.

—¡Tony!

El dios tomó su rostro llevándolo a la altura de su pecho. Los ataques de Tony siempre se calmaban de la misma manera.

—Estamos bien. Solo te necesito a ti.

—No me necesitas. Soy un desastre como compañero y padre... y siempre fallo en conseguir las cosas que realmente importan.

Loki intentó acomodarse mejor, apoyando la espalda en la pared y aun sosteniendo a Tony en sus brazos. Las contracciones estaban siendo cada vez más seguidas y pronto vendría una nueva.

—Yo soy un desastre. Soy literalmente el dios del caos —señaló con la mano los alrededores de la cueva—. Y atraigo el caos. Pero, aunque yo sea un desastre y todo a mi alrededor acabe siendo un desastre, siempre puedo confiar en que tú estarás a mi lado, tratando de evitar que todo se derrumbe para mí. Eres mi ancla, Tony. Eres la persona en la que más puedo confiar y te amo por ello.

Tony se enderezó al mismo tiempo que Loki cubría su boca.

—¿Dijiste la palabra con "a"?

—¡Por supuesto que no!

Una nueva contracción sacudió el cuerpo de Loki haciendo que casi destrozara la mano de su mortal, pero Tony no había cambiado su sonrisa idiotizada.

—Sí que la dijiste.

—¡Más te vale concentrarte en esto, idiota!

Un destello de luz verde hizo que los vengadores reunidos en la sala se pusieran alerta. Segundos después, Tony y Loki, ahora como una hermosa mujer de largos cabellos negros, se materializaron en la sala común.

Se veían demacrados y estaban cubiertos de tierra. A Tony le faltaba su camiseta, que estaba en brazos de Loki cubriendo un pequeño bulto.

—¿Eso es?

—¡Bruce! ¡Necesito que los revises ahora mismo!


***


Loki abrió los ojos unas horas después, aún somnoliento. Estaba en la bahía médica de la torre de los vengadores con una vía suministrando antibiótico en su brazo. Tony estaba apenas a unos metros. Al contrario que él, ya estaba limpio y mecía a un bebé en sus brazos. Se veía tan apuesto.

Intentó levantarse, pero al notar el movimiento Tony ya estaba a su lado, impidiéndoselo.

—Lo siento, bello durmiente. Bruce quiere tenerte un poco más en observación y yo estoy totalmente de su parte, así que esta vez no podrás chantajearme.

—Dame a mi hijo.

—Nuestro hijo —corrigió, depositando con cuidado al bebé en los brazos de Loki.

Loki lo sostuvo sin poder evitar media sonrisa y no mucho después llamaron a la puerta.

—No he podido retenerlos más tiempo, quieren conocerlo—se disculpó abriendo la puerta al resto de vengadores. Entre ellos y los osos de peluche de regalo apenas cabían en la habitación.

—¿Puedo sostenerlo?

—No.

—Oh, vamos, nene. ¡Es tu hermano!

Loki extendió de mala gana al bebé hasta los brazos del dios mayor dónde se veía aún más diminuto.

—¡Es igual a ti, hermano!

El resto de vengadores se miraron entre sí, quizás sus ojos se volvieran verdes en un futuro, pero exceptuando eso era la viva imagen de Tony. Aunque nadie se atrevería a ser la primera persona en recalcarlo.

Bruce decidió que había sido suficiente un rato después y dejaron a la pareja descansar. Esta vez Tony tomó el sillón hasta que estuvo completamente pegado a la cama y pudo enlazar sus dedos con los de Loki. El bebé descansaba justo en medio de los dos.

—Sí que dijiste la palabra con "a" —tarareó de forma presumida.

—Olvídalo, Tony. No voy a repetirlo.

Tony besó su nudillo sin perder la sonrisa.

—Eso no importa, igualmente lo haces obvio.

Loki bufó y Tony volvió a ensanchar una sonrisa.

—Os amo a los dos, mis mundos caóticos.

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¡Fin!

He comenzado a escribir una nueva historia IronFrost, me tiene absorta aunque aun no la tengo ni cerca de acabar (voy aprox por las 12mil palabras y ni un besito los muy pesados).  Empezaré a subirla en unos días aunque puede que las actualizaciones tarden un poco más. 

Os adelanto que será temática de instituto, aunque mantendrán sus superpoderes, ambientada, aunque no exactamente igual, en el juego avengers academy. Os dejo un trailer para que os hagáis una idea (Y puede que yo haga algún dibujo también): 

https://www.youtube.com/watch?v=AergY6ijsfI

Mundo caóticoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora