Cuarta parte.

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Hace unos días te vi con la chaqueta gris que yo te di un mes antes de que te fueras.

Y yo juré que había borrado cada rastro de ti, pero creo que no fue así.

Trate de hacerme creer que todo estaba bien, que ya no dolía que te hayas ido, que si volvía a ver tus ojos ya no sería igual que me daría igual, te ignoraría y podría continuar como si nada.

Pero nada es igual, nada, sin tus ojos marrones.

Tus simples pero hermosos, ojos marrones.

El cielo azul parece gris desde que ya no estás aquí, para mi todo el color se volvió blanco y negro; como no te puedo hablar ni regresar el tiempo atrás, mejor al sol lo tapó con un dedo.

Quise creer que si estaba con alguien más podría dejarte atrás, se que fue mi culpa que tomarás tus cosas y te fueras esa noche. 

Supe que lo había arruinado cuando vi la tristeza en tus ojos marrones.

Ya nada es igual, nada, sin tus ojos marrones.

Aquellos que esconden tantas cosas y son tan difíciles de leer, pero que con el tiempo yo aprendí a entender cada emoción que se escondía tras tus ojos marrones.

•Ojos Marrones•《ChanIn》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora