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Lentamente se escuchaba un ruido, un ruido que no estaba acostumbrado a escuchar maverick

Pero a medida que se enfocaba más en el ruido, no era el sonido de su alarma. No estaba a todo volumen como un águila chillando justo en su oído. 

Era más un pitido constante y bajo, que no pretendía molestar a nadie.

Un sentimiento horrible comenzaba a abrirse paso en el pecho de Maverick, los oscuros zarcillos del miedo hacían que su corazón se acelerara. No dispuesto a enfrentarse verdaderamente a su realidad, movió un brazo para sentir el otro lado de la cama. 

Jadeó ante el floreciente dolor en su hombro, su cabeza daba vueltas y se sentía terriblemente ligero. Trató de aspirar aire, pero se sentía como si alguien lo hubiera apuñalado en la espalda, un dolor agudo que irradiaba desde su pulmón hacia afuera.

Trató desesperadamente de aspirar aire mientras los recuerdos lo cegaban con un pánico blanco: caer del cielo, una zambullida hacia el interminable océano negro, Goose en su oído con su voz ahogada en pánico y lágrimas, joder, Goose . -

Maverick jadeó a pesar del dolor candente, retorciéndose y tratando de liberarse de esta prisión de tubos y vías intravenosas. 

Tenía que salir, llegar a Goose, salvarlo, hacer algo. Pero a través de su lucha, escuchó pasos atronadores en su habitación, calmando las manos en sus brazos y sujetándolo suavemente. 

Sintió un pellizco agudo en la carne suave de la parte interna de su brazo, un flujo tibio mientras la medicina corría por sus venas. 

El pánico perdió su filo, y él estaba flotando de nuevo.

Levantó la cabeza, entrecerrando los ojos para tratar de ver los cuerpos a su alrededor. Alguien lo miró a los ojos y tomó su mano, se inclinó en una distancia profesional pero reconfortante. 

"Está bien", dijo una enfermera con una cara amable, sus rasgos se volvieron borrosos cuando Maverick resbaló "Ahora estás a salvo. Está bien."

Incluso cuando perdió el conocimiento y los pensamientos se mezclaron con la oscuridad, supo que no le creía. 

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La próxima vez que Maverick se despertó, el dolor realmente se apoderó de él.

Su cabeza daba vueltas mientras trataba de observar los alrededores de su habitación de hospital. Su visión se nubló como si todavía estuviera bajo el agua y Maverick tragó saliva contra la vileza que subió a su garganta ante los recuerdos. 

Su garganta ardía con cada respiración como si alguien le hubiera forzado agua hirviendo. Sus pulmones se sentían similares, jadeando con cada respiración. Todavía había ese dolor punzante en lo profundo de su cuerpo, una punzada cada vez que inhalaba. 

Su hombro dolía sordamente y Maverick se dio cuenta de que estaba sujeto cerca de su cuerpo con un cabestrillo.

Maverick se recostó y cerró los ojos por un momento, dejando que el dolor lo invadiera. Todo era doloroso, así que trató de respirar a través de él, dejó que el dolor se desvaneciera en una sensación de aburrimiento mientras trataba de separarse de los recuerdos que lo perseguían. 

Esos, realmente, fueron los más dolorosos de todos.

Después de un momento, Maverick extendió su brazo bueno para presionar el botón de llamada. En unos momentos había un médico parado en su habitación, acercándose a la cama de Maverick y acomodándose en la silla junto a él. 

Maverick inclinó la cabeza hacia él, incapaz de mover nada más sin que una punzada de dolor nauseabundo lo golpeara como un relámpago.

"¡que...sucedio...?" dijo con voz áspera, la vibración de sus cuerdas vocales como papel de lija contra su dolorida garganta.

"¿Que recuerdas?" dice el medico

"Recuerdo haber pasado por mi... eh, el jetwash de mi compañero de ala", dijo en voz baja, porque de alguna manera pronunciar las palabras hizo que la situación fuera aún más real. "Recuerdo chocar y... no mucho más".

"Su avión se estrelló a tres millas de la costa de San Diego. Los servicios de búsqueda y rescate lo recogieron y lo trajeron aquí, al Hospital Naval de San Diego. He estado a cargo de tu cuidado desde que llegaste. Te trajeron hace unas setenta y dos horas"

El pulso de maverick se iba acelerando a medida que le estaban diciendo lo que habia pasado y donde se encontraba pero mas venia su miedo porque no le dijeron nada donde estaba su compañero de ala

"y goose...

"lo siento mucho, teniente mitchell" susurra el medico "pero el teniente Bradshaw no logro a sobrevivir en ese accidente"

1- Amor entre Rivales: ConociéndoseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora