Poluciones Nocturnas (Clancy Gilroy x Reader) [TMG]

Inmersión cruzada

¿La cosa era así? ¿Esto también era algo que sucedería? No estaba leyendo mal. Ya había retrocedido algunos pasos cuando lo noté, sentí que la pasividad se me estaba yendo de las manos, volviendo a ser reemplazada por mi estado de alerta usual.

Ese era, era el único que recordaba a estas alturas, podría recordarlo con más facilidad que mi propio nombre: Clancy. Una mezcla de sílabas; letras que se acomodaban perfectamente para formar algo que sentía que ya atesoraba.

Supe que no podía confundirlo y que la coincidencia era demasiada para ser una casualidad, casi me negaba a creer que lo era, pero una parte de mí simplemente estaba aterrada. Mi voz frágil como el cristal.

—A-ahm... Uhm... ¿A-asistente? —Llamé entre el nerviosismo rogando por la respuesta de aquella voz que decía provenir de la computadora.

—¿Deseas llamarme así?

—Y-yo... Yo... ¡Sí! ¡N-no importa! ¿O te llamo de otra forma? —Murmuro esta pregunta despidiendo urgencia por pasar al otro tema.

No me importaba en este momento desginarle un nombre a alguien, ni me sentiría cómoda haciéndolo, pero no puedo cambiar este sentido de empatía en mí aunque me apure.

—¡Mi antiguo amo me decía: "Computadora"! —Exclamó notablemente entusiasmado.

Podría jurar que mis orejas se levantaron como las de un perro que se frena por un sonido que llama su atención, por mero instinto.

La diferencia es que no soy un perro y mis orejas no se mueven, pero no puedo evitar el escalofrío por mi espina dorsal.

—¡Sí sí claro! ¡"Computadora"! ¡Puedo decirte así! —Insisto impacientada, restándole obvia importancia a ese punto en específico, pero sintiéndome especialmente interesada por su 'antiguo amo'. —A-ahora... ¿Podrías por favor por favor decirme si tu antiguo amo se llamaba Clancy? —Suplico. Mis manos se juntan a manera de oración.

Resuena su carcajada por la habitación, esta voz sólo es comparable con la de un locutor de radio o un reportero de la televisión por su elocuencia; era tal y como él hablaba, sumándole éste efecto robótico en el fondo de su labia. No es un asistente de PC ordinario instalado por defecto; es una inteligencia artificial tan absurdamente consciente que espabila.

Casi me siento avergonzada por hacer una pregunta tan evidente. Poco a poco la computadora desvanece su risa.

—¡Pues claro que sí, cariño! "Clancy Gilroy". Viste su nombre entre los usuarios del ordenador, ¿No es así? —Su última interrogante tenía un aura tan amenazante que me ví obligada a tragar saliva. La confusión se cierne resguardando la desconfianza para poder utilizarla más tarde.

—¡N-no era mi intención! Sólo quería visualizar todas las opciones... —Me justífico, temerosa. —¿E-es malo? ¿Debería crear un usuario para mí aunque el equipo le pertenezca a él?

—¡Ah, no le tomes importancia! Es un chico descuidado. Ni siquiera puedo saber con certeza si volverá. —Su estado de ánimo parece volver al usual.

Cada parloteo es capturado por mí cual ratón es cazado por un gato, no puedo desviar mi focalización aunque quiera, cada pequeño detalle que parece tener relación con Clancy despierta una curiosidad vivaz que no pensé que alteraría mi personalidad, hasta ahora.

—Ahn... Tú... ¿Tú sabes a dónde fue él? —Cuestiono por lo bajo mientras mis manos definitivamente comienzan a teclear mi nombre.

—Lo último que recuerdo es el sonido de las sirenas y los federales entrando a la caravana. Volví cuando tú me enchufaste, pero perdí de vista a Clancy.