Problema resuelto

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El mayor jadeaba mientras el castaño recogía el semen del mayor en sus manos.

— ¿Qué hago con ésto? — dijo refiriéndose a los fluidos del mayor.

— No lo sé, tiralo hacia afuera o podrías... tomarlo — lo último fué casi musitado.

HoSeok la pensó un rato y decidió tirarlo fuera y los rastros se los comió, hizo una mueca al comerlo ya que la textura le era incómoda a su paladar, pero aún así siguió.

YoonGi se sentía realmente afligido por la situación, más por las acciones del castaño, estaba que no podía ni verle a la cara.

HoSeok por otro lado aún tenía su problema, se había concentrado en lidiar con el de se mayor que se olvidó del suyo y con lo que había pasado ahora le dolía más.

YoonGi sintió humedad en su trasero y ése bulto aún.

— Déjame encargarme — soltó con bochorno el pálido.

El menor susurró — N-no es necesario, Hyung —.

— Ya te encargaste tú de mi, ahora me toca devolverte el favor —. YoonGi se sentó en los muslos del castaño, para bajar la ropa interior y luego tomar el miembro contrario para empezar a manipularlo.

El castaño no tuvo ni tiempo de hablar, cuando ya estaba jadeando y mordiendo sus labios para no sacar aquellos vergonzosos sonidos.

La mano del pálido subía y bajaba alrededor del falo opuesto.

— Aahm~ — jadeaba mordiendo su labio. Su cuerpo se llenaba de espasmos e involuntariamente elevaba su entrepierna buscando más contacto con la mano ajena.

YoonGi empezó a acariciar la glande con su dedo pulgar, para ponerla más sensible y húmeda, cuando ésto pasó, empezó nuevamente a acariciar el falo de manera rápida.

— Aaah~ mmn~ — jadeaba apretando sus manos en puños, al igual que seguía levantando su pelvis.

YoonGi sentía hormigos por los jadeos del castaño, se sentía apenado, pero aún así seguía con sus movimientos.

— Aaah~ — gimió bajito unos cuantas veces más antes de venirse; éso hizo parar al mayor, recoger el semen y luego tomarlo, se sentía raro y viscoso, pero aún así limpio todo con su lengua.

Ambos quedaron en silencio, analizando lo que acababan de hacer y con quien lo hicieron, ninguno se atrevió a hablar, sólo analizaban todo en completo mutismo.

— Será mejor descansar — comenzó a vestirse para luego salir afuera y jalar el saco para ya no estar sentados, si no acostados.

Ya dentro de nuevo en paños menores se abrazó a su contrario, ocultando su cara en su pecho, mientras HoSeok le abrazaba y acariciaba su espalda.

Sin volver a tocar el tema, poco a poco ambos quedaron dormidos.






















Narra YoonGi:

Por la fecha que decía en mi teléfono habían pasado 3 días desde aquella vez, en los que no tocamos el tema, era como si ubieramos acordado mutuamente en silencio no hablar al respecto, pero siento que nuestra relación ya no es la misma, se siente como si nos ubieramos unido más, o al menos así lo siento yo.

Canbiando de tema, la comida que queda aún alcanza para unos cuantos días, yo diría que unos 4 días más, nuestros estómagos rugen en busca de más alimento, pero nadie dice nada al respecto y sólo ignoramos ello.

También e estado ayudando a HoSeok para todo, ya que sus piernas aún no reaccionan y por el estado en el que están no creo que reaccionen hasta que tengan tratamiento médico.

No hemos visto la luz del sol en unos 5 días, tampoco hemos presenciado ningún ruido extraño, ni tampoco del equipo de rescate, además que mis esperanzas de salir vivos de ésto están por los suelos. HoSeok siempre me anima y me dice que estaremos bien, me abraza y me repite que todo se resolverá, lo cual me da mas tristeza, ya que yo debería de animarle a él, él está en una situación mucho peor que yo, pero en cambio yo sólo puedo ser negativo ante la situación y llorar sobre el terror de morir de hambre, de morir solos en ésta cueva.

En éste instante nos encontramos a punto de comer, HoSeok ya había terminado su parte y su estómago seguía rugiendo.

Éso me ponía triste.

— Come mi parte — dije y le di mi galleta.

— No, es su parte, además no comerá nada más en todo el día — me la devolvió.

— No te preocupes, de todos modos no como mucho, el saber que tú comiste un poco más me llenará, come por favor — se la devolví.

— Pero Hyung — su tono sonó algo quebrado y éso casi me hizo llorar, pero aguanté, me trague mis lágrimas.

— Comelo, por favor Hobi-ah — insistí con un tono menos amable y pareció funcionar, ya que lo comió sin rechistar. — Veré tus piernas — avisé, tomé mi celular y encendí la linterna para ver sus piernas a detalle, las puntas de los dedos de sus pies empezaban a tornarse algo negras, pero lo demás seguía igual, sólo que ahora HoSeok dice que le duelen cuando hace el más mínimo movimiento. Hay un botiquín ahí, pero no se si desinfectarlo sea buena idea, ¿Qué tal si sólo causa algún daño más?, no soy doctor, pero se que lo que le está pasando no es nada bueno y me aterra el hecho de que pueda llegar a ser mas grave.
Me volví a mi lugar y apagué la linterna de mi celular.

— Pues siguen igual — pausé. — ¿Te duelen? ¿O sigues con el mismo dolor? — pregunté tomando su mano y acariciandola.

— Es el mismo —.

— Y no hay pastillas en el botiquín — Chasqueé mi lengua.

— No se preocupe Hyung, yo estaré bien, el dolor no es insoportable —. No pude verlo, pero sabia que estaba sonriendo, y éso me hizo doler un poco ¿Por qué el tenía que enfrentarse a ésta situación? era algo que no podía aceptar a la ligera.

No dije nada, ya que mi garganta tenía un nudo, y si hablaba, rompería en llanto nuevamente y no quiero que HoSeok se sienta mal escuchando mi llanto. Solamente me abracé a él, apretándolo, hundiendo mi cara en su pecho. Pude sentir como me rodeaba con sus cálidos brazos y suspiraba de manera profunda, como si estuviera cansado.

Dormir lo hacíamos casi todo el día, ya que era la mejor manera de mantener la energía, era como una hibernación momentánea.

Después de un rato abrazados, volvimos a caer en ésa hibernación.

Avalancha || HopeGaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora