⊰1⊱⛩

136 7 7
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Seguías sin saber cómo terminaste en esta situación, hace unos minutos atrás te encontrabas tranquilamente en una pequeña lagua y ahora sólo corrías mientras tus piernas pedían a gritos que te detuvieras, pero tu mente sabia que si lo hacías morirías.

Tiempo Antes


Te dirigías a una pequeña laguna en medio del bosque, la gente solía pensar que te perdías y que por obra de alguna divinidad podías volver a hogar. La verdad es que desde hace muchos años ya te memorizaste el camino y nunca te perdiste en ese inmenso bosque, pero a decir verdad es que la primera vez que entraste te perdiste como 2 horas.

Al llegar a la pequeña laguna sólo te atreviste a meter los pies y poder disfrutar de la vista y los sonidos de la naturaleza, amabas pasar tiempo en ese lugar, cuando solías tener problemas con tu padre, cosa que rara ves solían tener, normalmente venías y pensabas mejor las cosas antes de actuar sin pensar y arrepentirte de ello. Sólo tenías a tu padre ya que tu madre falleció hace mucho tiempo pero no la recuerdas del todo bien, sólo la conoces por fotografías e historias, en cada historia resalta lo mucho que la amaba y eso te hace feliz.

Te perdiste en tus pensamientos y el tiempo en aquel lugar pasó rápido y te percatarse de eso gracias a que una oleada de frio ataco tu cuerpo obligándote a sacar tus pies y colocarte tus zapatos.

— Parece que el tiempo paso muy rápido gracias a mis pensamientos—Dijiste para levantarme e ir a tu hogar mientras en el camino sólo tarareabas una canción de cuna.

En el camino escuchaste uno que otro sonido, pensaste que era algún animal y no decidiste tomarle mucha importancia, pero mientras más avanzabas el sonido se hacía más fuerte. Empezaste a caminar más rápido y al cabo de unos minutos te encontrabas corriendo lo más rápido que tus piernas te lo permitían. Continuabas corriendo mientras poco a poco el sonido se dejaba de escuchar pero no le prestaste atención, con la esperanza de que pronto llegarías a tu hogar continuaste con la misma acción, pero eso no ocurrió.

— ¿Dónde está?... Se supone que aquí debe de estar el sendero...—Jadeabas debido al cansancio. Tus ojos trataban de ubicar el lugar, pero te diste cuenta de que no estabas cerca de tu pueblo, poco a poco empezaste a entrar en pánico y tu mente sólo se concentraba en como volver a tu hogar y sobrevivir en medio del bosque.

La noche se presentó y sólo querías volver y estar con tu padre mientras ambos comían Soba y hacían chistes, pero el tiempo pasaba muy lento para ti además de que estar arriba de una montaña mucho tiempo sentías que que no podías respirar y tus piernas dolían, sólo buscabas a una persona que te ayudase a volver, pero nadie estaría a estas altas horas de la moche en una montaña. Seguías caminando tratando de recordar el camino, hasta que viste una silueta de una persona a lo lejos.

UNDER THE MOON Donde viven las historias. Descúbrelo ahora