-Antes de que la situación se convierta en un lío de preguntas, les explicaré como llegué a la conclusión. -Puntualizó Sebastián.
>>Yo sabía que Norman no tenía hijas. Por lo tanto no entendía quién era la chica que nos recibió. Camino a la habitación de Norman encontré varias pelucas de dama y maquillaje esparcido everywhere . Obviamente pertenecían a la chica, porque me tomé la precaución de revisar bien el cadáver de la habitación, y no tenía ni rastro del maquillaje anteriormente encontrado en los pasillos.
>> A pesar de todo, no quedé convencido de que la chica era Jimena Rosal hasta que me di cuenta de que el hombre difunto de la cama no era Norman Eblero, ¡No señores! el muerto es nada más y nada menos que Lion Mckarly, cierto jefe empresarial que por unos meses estafó al presidente.
>>Fíjense la máscara que tiene -Dijo Sebastián retirando un rostro falso del cadáver.
>> Pero hay aún más. Por favor, Ricardo, ¿Nos pone al tanto de cómo falleció el sr. Mckarly?
-Si, amigo mio. Sus pupilas y olor determinantes nos afirman que fue víctima de un envenenamiento.
-¿No les parece extraño? ¿Acaso Jimena Rosal no nos dijo que ahorcó a este hombre? ¿Por qué nos mentiría?, Pues es obvio; intenta encubrir al asesino.
>>Hace unos minutos me aparté y llamé a la residencia del presidente. Me dijeron que había ido a visitar a Norman Eblero, y aún no regresaba. ¿Les parece convincente?, hemos de ir a buscar a Carlos Rosal y preguntarle por qué asesinó a Lion Mckarly, aunque ya sepamos la respuesta.
-Yo no sé la respuesta.-Dijo el oficial.
-Los motivos son los siguientes, mi estimado: Carlos sabía que Norman tenía secuestrada a Jimena. Cuando llegó a desquitarse con él, se encontró a Lion Mckarly, supongo que dañando a Jimena, y acumuló dos motivos: La estafa y el secuestro. El presidente mató a Lion y le tapó el rostro con una máscara, obligando a Jimena a relatar una historia falsa.
>>Encontraremos al presidente en el cementerio, señores. El está sufriendo mucho porque se acaba de enterar que Norman no existe desde hace varios años. Lion se aprovechó y tapó la muerte del tío de Jimena, haciéndose pasar por el señor Eblero, para tener acceso al presidente y estafarlo.
>>Les daré las pruebas definitivas en cuanto tengamos al presidente con nosotros.
Nos dirigimos al cementerio y Sebastián gritó:
-¡Ahí está oficial! ¡DETENGANLO!
El presidente se volteó con cara de odio y expresó:
- Es usted mas inteligente de lo que esperaba, sr. Peculiar.
