DIpper es un joven y prometedor periodista que trabaja como editor arreglando los fallos en los artículos de sus compañeros.Un día, le ofrecen la oportunidad de cubrir un importante evento real en Europa, y no dudará en aceptar el trabajo.Corren rum...
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La noche habia surgido, amigos y familiares de la familia real eran invitados para una reunion en celebracion de la festividad, decorar cada uno el arbol navideño, era una tradicion que hacian cada año.
En medio del salon estaba la reina con una copa de shampagne en sus manos.
- Ver a todos ustedes, me recuerda lo importante que son para mi- hablaba en medio de una sonrisa mirando a todos- Y que eran para el rey- Estiro su copa hacia arriba para dar un brindis- Por la familia y los viejos amigos.
- Por la familia y los viejos amigos- en unisono dijeron todos, alzaron sus copas chocandolas entre si en un sonido bastante delicado.
- Y por los nuevos amigos tambien- Pacifica miro a Dipper, espetando en un notable susurro, eso alegro al castaño que no pudo mas que sonreirle.
Pacifica le devolvio el mismo gesto.
Dipper miro a Bill quien estaba casi al lado de los dos que tambien le sonrio.
- El rey nos dio una caja de adornos navideños, que el hizo a mano- la voz de una cabellera blanca estaba en la sala, Guideon agarro uno de los adornos de madera- Dijo que eran elefantes pero mas parecian osos- ironico añadio mientras miraba la figura.
- Para el era importante dar regalos- dijo la reina mirando a su sobrino en como colocaba el ardono al arbol- Echos por el mismo- sin olvidar comento, reflejaba cierta molestia en sus palabras.
- Esos eran los mejores- Bill habia hablado- Ya sean osos o elefantes- miro a su primo con total seriedad.
- Encontre esto...- La señora Avril agarro su copa para darle mas comodida a la reina de agarrar la caja de madera, dejo la copa en una bandeja que cargaba un mesero cerca suyo- Guardado, despues de...
- Permitame- dijo la señora Avril tomando la caja antes de que la reina sacara de la caja una bellota, la alzo en direccion a sus dos hijos.
- ¿Donde estaba madre?- pregunto el principe.
- Tu padre lo puso en un escondite secreto, pero el no era bueno guardando secretos- le sonrio a su hijo- Supongo que planeaba darmelo en la navidad pasada.
- Me encanta- dijo Pacifica quedando encantada ante el hermoso adorno.
- Es hermoso- Dipper intervino.
- ¿Cuentanos sobre tus tradiciones navideñas, Robert?- pregunto el rubio.
Dipper se puso nervioso.
- Bien, mi tio Ford y yo siempre encendemos una vela para mi tio Stan y hacemos sus galletas favoritas... Vemos su novela favorita. Se lo bien que es extrañar a alguien que amas.
- Sin duda- dijo la reina, volteo a mirar a su hijo- ¿Me ayudas?- alzo la bellota.
