𝐃é𝐣𝐚𝐦𝐞 𝐜𝐨𝐦𝐞𝐫𝐭𝐞 𝐚 𝐭𝐢.
______________________________________________Abrí las ventanas para que el humo de la comida no se concentrara en la cocina. Afuera llovía, sin embargo, el ambiente se notaba cálido en el interior.
Agarré el teléfono para colocar algo de música en lo que terminaba de cocinar la carne, no obstante, fui interrumpida por el ingreso de un mojado Yoongi en la cocina.
— Ayuda a tu pobre novio con estas nueve bolsas. —sonreí antes de negar con la cabeza y apresurarme en ayudarle.
— ¿Qué se supone qué has comprado? Cada bolsa pesa diez kilos. —subí la última bolsa en la mesa y me giré para verle mientras masajeaba mis dedos.
— No sé, has apuntado cien cosas en la lista que me diste. —se acercó a mi lugar y rodeó mi cintura. — Huele muy bien, ¿qué estás haciendo? —besó mis labios y dejó una leve mordida. Acción que me hizo suspirar y sonreír.
— Una receta de un país extranjero, si lo hice bien, debería de estar exquisito como dicen todos aquellos que lo han probado.
— Y sino, pediré una pizza. —alcé las cejas ante la evidente burla por su parte y nuevamente me besó. — Era broma. —susurró por la zona de mi cuello dejando un salivoso y cálido beso.
— Tienes un pésimo sentido del humor, cariño. —moví la cabeza hacia un lado para que tuviera más espacio. Sus manos viajaron hasta mis nalgas y cuando las tuvo en las manos, las apretó con posesión.
— Mías.
— Tuyas.
Quedamos en un silencio donde lo único que se escuchaba era el besar de Yoongi.
— Bebé, ¿por qué no vas a la ducha en lo que yo termino la cena? Estás poniendo todo hasta arriba de agua. —aparté gran parte de su cabello en la frente para hacerle un alto y precioso moño.
— ¿Por qué no me acompañas? Me has puesto cachondo en unos simples minutos. —volvió a mis labios atacándolos con evidente deseo. — Incluso me siento como un adolescente hormonal que apenas y sabe qué es una erección.
— Me encantaría bebé, pero la cena no se prepara sola. Así que vamos, para cuando termines ya estará servida. —su frente se pegó a la mía. Ambos mirándonos con amor. — No me mires así. —golpeé sin fuerza su pecho; él sabía de sobra lo que tenía que hacer para ponerme nerviosa. Sus encías se mostraron en una gran sonrisa y golpeó mi trasero antes de largarse rumbo a la ducha.
La cena avanzó favorablemente aunque con algunos —demasiados— toqueteos e insinuaciones por parte de Yoongi. Su juego comenzó cuando llegó a la mesa para cenar: Recogió toda su melena en un moño dejando caer algunos mechones que le hacían ver muy sexy, se echó un litro de perfume —cosa que apenas y hacía porque más tarde le daba picor—, decoró sus manos con pulseras y finos anillos que le daban un contraste con su pálida piel y, finalmente, aquellos pantalones grises de chándal que decidió ponerse no dejaba nada a la imaginación ante la clara vista de su miembro descubierto. El muy hijo de puta no se puso ropa interior. Y, está más decir, que fue evidente el momento el cuál le escuché masturbarse en la ducha.
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Min Yoongi; Dirty Reactions
Fanficও ʙᴀꜱᴀᴅᴏ ᴇɴ ᴅɪᴠᴇʀꜱᴏꜱ ʀᴇʟᴀᴛᴏꜱ ᴇʀóᴛɪᴄᴏꜱ ᴊᴜɴᴛᴏ ᴄᴏɴ ᴍɪɴ ʏᴏᴏɴɢɪ ⇏Este libro no pretende ni tiene la intención de ofender a nadie. ⇏Prohibida su copia u adaptación. ⇏+18. ⇏Pedidos abiertos.