Phoenix -LIBRO 2

Capitulo 41

Lizzie se encontraba sentada en su cama, con el diario de Jonathan Gilbert en mano, leyendo e intentando descubrir todo lo que le pudiera servir contra Elijah y sobretodo contra Klaus. Elena seguia con Mike en la casa del lago, mientras que Lizzie le pidio a Stefan que volvieras a Mystic Falls cuanto antes.

—Hola— Fue lo que dijo Lizzie al contestar la llamada entrante en su telefono

—Tyler Lockwood huyo de su casa anoche—Escucho la voz de Damon comentarle aquel hecho.

—¿Que? ¿Como lo sabes?

—Me lo dijo la sheriff Forbes quien lo supo por Carol Lockwood... Y asi termina el capitulo de licantropos y sigue al de...

—Matar a Elijah— Lo interrumpe Lizzie

—Exacto

—Eso no sera facil Damon— Explico la chica levantantose de su cama y tomando su mochila— No es idiota

—No olvides que yo tampoco lo soy, y que tambien tengo una daga a mi favor

—Es un original, no sabemos que abarque eso— Le insistio la chica mientras salia de su casa y se subia a su auto

—Confia en mi lucecita. Voy a ser cuidadoso, no quiero sorpresas

—Wow Damon—Se burlo la castaña— ¿Vas a tener cuidado para variar?

—Si Lizzie. Me he convertido en tu novio, que tragico para todos.— Lizzie rio por lo bajo— Debo colgar, tengo un homicidio que planear

Lizzie colgo la llamada antes de encender el auto y emprender camino hacia el Grill.

—Lizzie— La castaña levanto la mirada encontrandose con su amiga sentada en una se las mesas esperandola

—Bon Bon— La menor se sento rapidamente con una sonrisa frente a su amiga.

—¿Como estas?

Lizzie suspiro, sabia que le era imposible ocultarle a Bonnie el como se sentia. Podia mostrarle a todos que estaba perfectamente, cuando en reliadad su cabeza no para de dar miles y miles de vueltas entre los mismos asuntos

—Confundida— Admitio la pequeña bruja. 

—¿Volvieron los sueños?— Pregunto curiosa la morena.

—Nunca se fueron, Bon— Lizzie suspiro agachando su cabeza.— Inevitablemente busco que es lo que hace que busque a Silas en Stefan

—Tienes curiosidad, es normal— La tranquilizo su amiga— De cierta forma tu aun eres Lara, y ella estaba enamorada de Silas

—Pero yo ahora soy Lizzie, y estoy enamorada de Stefan

—Lo se, Lizzie, y se nota que lo estas— Bonnie hizo una pausa pensando si debia hablar del tema o no— Hablaste con Stefan... Sobre lo de...— Lizzie la interrumpio antes

—No y no lo hare Bonnie

...

Lizzie estaba sentada en su cama mientras intentaba unir ciertas piezas sobre sus vidas.
Por un lado tenia a la original Lara Pierce de Salvatore, habia vivido hace milenios, tenia una hermana, un esposo y una hija. Por otro estaba Ambar Petrova, no sabia nada mas que el hecho de que Elijah la conocia, lo que le llamaba la atencion era que esta segunda tuviese el mismo apellido que la amiga de Lara. Por otro lado estaba ella, Elizabeth Petrova.
Le costaba unir piezas y que suenen siquiera lógicas.

—Demonios— Lizzie cerro los ojos con fuerza y frustracion. 

La bruja decidio dejar de lado sus propios dilemas y problemas cuando recibio la llamada de Damon diciendo que habian matado a Elijah.

—Damon... ¿Dejaste la daga en su pecho, no?— Al no obtener respuesta la chica insistio—Damon responde

Al no recibir respuesta la castaña colgo la llamada y tomo su grimorio, necesitaba llegar a donde su hermana, necesitaba protegerla del original.

—Elena— La castaña entro a la casa encontrandose con su hermana asi que corrio a abrazarla con fuerza

—Lizzie ¿Que haces aqui?

—Deben quedarse aqui—Le dijo a su hermana y cuñado— Elijah vendra aqui, voy a proteger la casa... No salgan

Antes de que la chica pudiera hacer algo unas piedras lanzadas con fuerza sobrenatural rompieron la puerta por completo haciendo que tengan que esconderse

—Vayanse... ambos—Dije Lizzie mirando a la pareja

—Lizzie...— La nombrada interrumpio a su hermana

—El no puede entrar y yo tengo poderes, el no, no va a lastimarme

—Tal vez no pueda entrar a la casa—Comenzo a decir Elijah desde la puerta— Pero soy un hombre muy paciente, y esperare a que salgas

Lizzie sin miedo se acerco a la puerta, dejando asombrado al original, no era a quien esperaba ver alli.