Agaporni (Hawks x Reader +18)

Capítulo 38

Tomé un pequeño sorbo de mi café mientras observaba a los gatos jugando entre ellos. Algunos dormían plácidamente, mientras que los gatitos bebés maullaban sin cesar, buscando la atención de las personas. A veces, me daban ganas de adoptar uno, pero por el momento me es imposible. Primero, no tendría tiempo, ya que seré una heroína y no tendré mucho tiempo libre. Hawks tampoco tendría tiempo para cuidarlo, ya que no tiene casa propia, así que por ahora, vivimos juntos en su departamento, donde no se aceptan mascotas. Suspiré profundamente antes de voltear a ver a Midoriya

- Sabes, me alegro de que ahora puedas usar tu quirk en su totalidad. Solo debes entrenar ahora - dijo con voz amable, sacando su cuaderno de apuntes

- Aunque, lastimosamente, las circunstancias en que lo desbloqueaste no son las mejores

Añadió All Might con un tono bajo, mirándome de reojo mientras sostenía la taza de café entre sus manos. Los tres nos quedamos en silencio, porque tenía razón. No recordaba cómo lo desbloqueé y tampoco quería hacerlo. Por alguna razón, mi interior se sentía caliente cada vez que intentaba recordar, así que algo debió haber pasado para que mi cuerpo reaccionara así

- Bueno, cuando volvamos a entrenar, quiero ayudarte. Tengo muchos apuntes de distintos quirks de hielo y algunos movimientos que podrías intentar o imitar 

Dijo Midoriya, buscando algunas páginas de su libreta. Me mostró algunas páginas con cosas curiosas, como ataques a corta distancia, que necesitaba. Aunque mi cuerpo desbloqueó mi poder, me era imposible extenderlo como Todoroki. Por lo tanto, era una peleadora cuerpo a cuerpo. Lo único que podía hacer a larga distancia era la neblina fría. Tomé un trozo de pan y le di un mordisco. Sabía realmente bien y su textura era algo dura por fuera, pero por dentro era realmente suave

- ¿Vas a ir a la fiesta de Endeavor? 

Preguntó Midoriya mientras revolvía su café. Asentí con la cabeza mientras seguía comiendo. De pronto, Todoroki entró por la puerta de la cafetería, cargando varias bolsas y cajas de regalos. Al vernos, Midoriya lo saludó con la mano, y él le respondió con un gesto similar. Se sentó a nuestro lado y pidió el mismo pan, pero en lugar de café, pidió un té. Me abrazó fuertemente, con una sonrisa amplia

- ¡Hielito! 

Exclamé con entusiasmo, frotando mi mejilla contra la suya. Todoroki solo dejó su mano sobre mi cabeza, jugando con mi cabello con una sonrisa suave. Agarró un pan con su mano libre para darle un mordisco, pero me adelanté y le robé un bocado. Por primera vez en mucho tiempo, lo oí reír, lo que me sorprendió. Puso sus manos en mi mejilla, mirándome ahora con seriedad

- Pareces una ardilla - dijo

Al oír aquello, mastiqué y tragué con rapidez la comida que tenía en la boca

- No parezco una ardilla 

Respondí con un puchero, fingiendo enfado. Luego, solté una carcajada y me separé de Todoroki, bajando la mano para acariciar a los gatos que pasaban por debajo de nosotros

- Oh, siempre pensé que ustedes serían una buena pareja - comentó All Might con una sonrisa suave

Tanto Todoroki como yo volteamos a mirarlo. Yo reí, mientras que Todoroki esbozaba una sonrisa forzada

- Eso no pasará. Yo veo a Todoroki como mi mejor amigo, además sé que a él no le gusta - dije con seguridad

- Sí... - respondió Todoroki con un suspiro, su voz apenas audible

Midoriya soltó una risita leve y dejó su mano sobre la espalda de Todoroki, dándole palmaditas. Yo observé de reojo las bolsas y cajas que Todoroki había dejado en el suelo, llena de curiosidad. Extendiendo la mano para ver qué contenían, Todoroki la detuvo con delicadeza

- No puedes ver lo que traigo - dijo con suavidad, pero con firmeza. Su tono me sorprendió, rara vez me hablaba así

- ¿Qué traes allí? - pregunté, mirándolo a los ojos

- Son los regalos que compré para las personas que me importan... - respondió, con un destello de apego y cariño en la mirada. Yo simplemente le sostuve la mirada de una forma tranquila

De pronto, escuché una tos, como si alguien quisiera dar a entender algo. Al ver de dónde provenía, vi a Midoriya haciendo una seña con los ojos, mirando hacia nuestras manos. Al bajar la mirada, vi que Todoroki sostenía mi mano con fuerza, casi entrelazando nuestros dedos. Rápidamente la retiré, soltando una risita nerviosa. Todoroki siempre había sido como un hermano para mí, e imaginar que le gustaba me resultaba incómodo y me hacía sentir mal, porque el sentimiento no era mutuo

De repente, sentí dos manos sobre mis hombros. Al levantar la mirada, me encontré con el rostro de Bakugou, con una expresión de enojo y una sonrisa forzada

- Maldita extra, distrajiste al mitad y mitad - Bakugou dijo algo irritado, y yo volví a mirar a Todoroki, quien le observaba con molestia

- ¿Pasó algo? - pregunté, mientras veía a Bakugou sentarse a mi lado

- Estaba acompañándolo a comprar, ya que yo también necesitaba hacerlo, pero te vio por la ventana y casi corrió para acá - respondió Bakugou, con su habitual tono irritado y malhumorado. Todoroki le devolvió la mirada, desafiante, Bakugou la sostuvo. Suspiró, y me levanté de mi asiento, recogiendo mi bolsa

- Me debo retirar, chicos. Nos vemos luego - dije con una sonrisa suave, despidiéndome con la mano

- ¿Fue por lo que dijo Bakugou? - preguntó Todoroki, con un tono triste, mirando mal a Bakugou, quien se disculpó con un movimiento de manos. Yo simplemente negué con la cabeza

- Para nada, pero quiero volver al departamento para acomodar algunas cosas. Aunque también quiero pasar a comprar algo para mí - dije, despidiéndome con la mano nuevamente mientras salía del café. Los chicos y All Might me despidieron con la mano

Una vez afuera, sentí una fría brisa chocar contra mi rostro, alborotando mi cabello. Suspiré aliviada antes de comenzar a caminar, pero a lo lejos vi una silueta que me resultaba familiar. Reconocí el cabello negro y puntiagudo, junto a algunas cicatrices en su piel. Frotándome los ojos con las manos, enfoqué la vista y vi a un chico con capucha, pero con cabello rizado y color café, hablando con sus amigos. Por alguna razón, el chico que había visto me recordaba mucho a Dabi, lo que me hizo doler la cabeza, ya que recordé cuando me secuestró, la cara de pánico de Hawks al intentar rescatarme, pero sin lograrlo. Apreté con fuerza mis ojos, y luego los abrí, comenzando a caminar y mirando por las ventanas de las tiendas, buscando algo para mí o algo para regalarle a los demás. Aunque, de reojo, o por el reflejo de las ventanas, vi a alguien observándome desde los edificios.