Mi sueño

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Oye, tú.

Bestia indomable,

sepultura del miedo,

muro infranqueable,

obsequio del cielo.

Ven,

pues tanto llanto

me invade en mi sala,

que si del sueño levanto

de mis ojos brotan cascadas.

Sueño, pero, ¿te tengo?

Muy poco.

¿Te pienso?

Demasiado.

¿Te necesito?

A todas horas,

aquí, a mi lado.

Me vicias,

no te tengo...

Maldita injusticia.

Quizás sea bueno,

quizás sea destino,

pero encontré

en ti un sentido.

Un sentido un poco lejos,

maldita distancia,

como la existente

entre mis versos.

Pues hoy, tengo un sueño

que quiere soñar

con su sueño; tú.

Eres el sueño

de mis sueños sin dueño,

y, entre pesadillas,

me haces soñar con tu luz.

Luces oscurasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora