Dracon 6

46 8 2
                                    

–Harry te he dicho mil veces que esto es mala idea– se quejó Draco al borde de la histeria.

–Molly ya sabe que vienes conmigo, ella no tiene problemas.

–Es muy ingenuo de tu parte creer que no tendrán ningún problema con tener a un-

–Un que!? Un adolescente compañero de su casi hijo – le interrumpió.

–Vamos Potter! Déjame en paz! No quiero ir y verle la cara a George y sentirme más mierda de lo que soy. Y- y-

–Toma– le interrumpió dándole una cajita envuelta– Para que dejes tu mal humor.

–Imbécil!– lloriqueó Draco mientras abría el paquete que contenía unos bombones de chocolate suizos, sus preferidos.– es una mala idea y si todo sale mal serás tú el que estará lloriqueando.– mordió uno de los bombones como si fuera el culpable de todos sus males, Harry sonrió – No sé en que cabeza cabe que los Weasleys van a aceptarme- Ah ya me acordé! Harry Potter con sus dos avadas en la cabeza...– No pudo terminar la frase porque la puerta de la madriguera se abrió, Molly estaba en la puerta regalándoles una sonrisa bastante sincera. Draco no sabía qué hacer, si saludar , darle un abrazo. Darle la mano... Se tenía que presentar!? Harry ya le estaba dando un abrazo a Molly y está le devolvía un abrazo muele huesos, parecía que lo iba a asfixiar. Cuando terminó con la sesión de mimos a Harry se volteó y le dió un abrazo que lo tomó por sorpresa.

–Pasa querido que esperas?

–Yo-... – Harry le miró con una mirada de disculpa y le tomó de la mano.

– Hiciste tarta de melaza mamá Molly? Draco dice que no le gusta pero cuando pruebe la que tú haces estoy seguro de que cambiará de opinión.

– Pero por supuesto! Pero solo mira lo flaco que estas! Esa Narcissa te acostumbró a las comidas de elfos verdad!? Que crimen! –la mujer se emocionó y les arrastró a la cocina para que la ayudarán a terminar todos los preparativos.

Ver a Draco siendo perseguido por utensilios de cocina seguramente encantados por George sería uno de los recuerdos que nunca se borrarían de su memoria.

Draco se había mantenido en silencio, solo respondiendo en monosílabos y banalidades, se había mordido la lengua al menos unas diez veces, todos los hijos Weasleys le miraban como si fuera un raro espécimen. Sabía que lo estaban juzgando, esperando que se equivocara. Sentía las miradas como rayos que le atravesaban.

Siempre le había encantado la sensación de ser observado, admirado, envidiado... Tenía una forma muy elegante de lucirse discretamente, ya fuera jugando Quidditch o almorzando. En este caso se comportaba igual, con la elegancia que su familia le había inculcado y su orgullo que no le dejaba pronunciar una palabra para defenderse. La conversación empezó a dar el giro que todos, hasta el mismo, estaban esperando.

–Y entonces Harry...– comenzó Charlie – Desde cuando o... Como te hiciste amigo de Malfoy? – Todos se quedaron en silencio expectantes, hasta el Señor Weasley se quedó con el tenedor a medio camino, Molly siseó un "Charlie!" Y Harry parpadeó un par de veces. Draco le tomó la mano por debajo de la mesa y le dió un apretón.

–La verdad tengo un par de meses saliendo con Draco.

El silencio fue abrumador y Draco sencillamente no pudo evitar reírse de la cara de todos. Había sorpresa, desagrado, shock, hasta George tenía una cara de fascinación total. Se tapó la boca para disimular su risa pero no podía. Harry le miró como si hubiera enloquecido, quizás así era.

–Y AHÍ LO TIENEN PERRAS, EMPIECEN A PAGAR SUS GALEONES! – gritó George.

–GEORGE!– le regañó su madre – el la mesa ni se grita, ni se cobran apuestas!– Este hizo oídos sordos y apareció una lista.

Harry parecía que estaba a punto de un colapso cerebral y Charlie tenía mejor cara de victoria que cuando mató al asesino de Fred...

–A ver... Bill, Ron, Ginny, Papá yyyyy... ah y Percy! Me deben 20 galeones cada uno, aceptamos transferencias a mi cuenta en Gringotts, depósitos, efectivo o cualquier tipo de pago en dinero Muggle...

»Los ganadores somos: Fred -ya saben que me voy a quedar con lo que Fred ganó- Fleur, felicitaciones querida es la primera apuesta en la que ganas, Luna, esa niña es una sabía! Y mi persona! Fin de los resultados

–Espera- de verdad hicieron una apuesta de que Harry tendría algo conmigo? – preguntó Draco a George entre carcajadas. Todos miraban la escena con diferentes grados de sorpresa.

–En cuarto año tu querido Harry, que parece que en cualquier momento se desmaya, estaba tan obsesionado contigo que se aisló de una manera impresionante. Estábamos cenando y surgió la conversación, Ron se sentía desplazado así que preguntó que tenía que hacer– a lo lejos Ron lanzó un tenedor que casi golpea su brazo y George se subió a la mesa para un mejor espectáculo – Fred nos dió una charla muy extensa sobre sus sospechas de que Harry Potter estaba profundamente enamorado de Draco Malfoy, yo le apoyé en su dramatización haciendo de Malfoy mientras él era Potter– George hizo una pausa dramática antes de continuar con una mano en el pecho– fue de las mejores obras que hemos presentado en esta mesa, a que sí mamá?– Molly le miro con tal cara de decepción... Y él se quitó una lágrima imaginaria.– luego nos obligó a hacer una apuesta en la que solo mamá y Hermione no estuvieron dispuestas a participar. Fleur estaba tan cansada de perder que dijo " apostagé a los más loco posible, que Haggy está enamogado del chico Malfoy" te llamó encantador. Luna apostó el año pasado porque las estrellas se lo dijeron.

– Y yo? Yo también apoyaba la idea de Fred!– reclamó Charlie.

–Mmmmm déjame revisar en mi agenda... Aquí está! Charlie apostó a que sí, se gustaban pero que Harry no se daría cuenta si no cuando estuviera casado con Ginny y tuviera tres hijos. Estuve a nada de apoyar a Charlie pero las corazonadas de Fred siempre han sido reales. Creo que te ganarás la mitad del premio

–Están locos– concluyó Draco.

–Y tú eres menos insoportable de lo que me habían contado.

–Yo soy encantador cuando me lo propongo. Y de verdad pido disculpas desde el corazón por todas mis acciones. Espero no incomodarles y poder limar las asperezas con todos.

–Por Harry he arriesgado mi vida, supongo que esto es una prueba más de amistad – dijo Ron, estirándose par darle un apretón de manos, luego le siguieron sus hermanos, Fleur le felicitó con mucho aprecio y por un momento se sintió ahogado en cariño.

Harry se echó a llorar y todos se apresuraron a ver que tenía, no podía pronunciar palabra. Parecía un niño de cinco años chillando y lloriqueando, Draco lo soltó mientras Molly se lo llevaba a la sala, sabía que estaría bien.

–No deberías ir con el?– Preguntó Hermione.

–No lo creo Greanger, Potter solo está teniendo una de esas crisis de mucha felicidad o mucho sentimientos juntos, nunca aprendió a controlarse. Estará bien, está con su familia no?

–Si, ésta es su familia...

Todo había sido un éxito.

Algo BuenoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora