𝐖𝐡𝐞𝐧 𝐈 𝐬𝐚𝐰 𝐲𝐨𝐮𝐫 𝐞𝐲𝐞𝐬 || 𝐁𝐚𝐧𝐠𝐜𝐡𝐚𝐧

✶𝐎𝟐𝟗✶

Al día siguiente, la mañana fue un poco loca.

La señora Seo la despertó quitándole las mantas del tirón, gritándole que se vistiera con algo bonito. Iban a ir a visitar a la abuela de Chris.

HyeRim aún volvía a sus sentidos cuando oyó la puerta del cuarto de su hermano mellizo abrirse. Vio cruzar el pasillo a su hermano y su apuesto amigo. Abrió los ojos de golpe, ¡CHRISTOPHER!

Se sintió afortunada, sin poder parar de sonreír por el hecho de que Christopher Bang gustaba de ella y se le había escapado la noche anterior. Corrió a su armario, buscando como loca la ropa que se pondría.

Una vez vestida con un suéter gris y unos pantalones negros perfectos para el frío que hacía afuera, salió al baño mientras oía el ruido de la sartén friendo comida, probablemente huevos o bacon para el desayuno.

Bajó las escaleras con un poco de nervios. ¿Por qué los tenía? Era una chica correspondida, aunque el chico aún no lo supiera.

― Buenos días hija, tus tortitas están en la mesa, corre que nos vamos en diez ― la saludó su padre mientras iba de camino a la cocina a dejar su plato ya vacío.

La chica se sentó en la mesa del comedor al lado de su hermano. Eran las diez de la mañana de un sábado. Esa era una hora récord para ella, que aprovechaba para recuperar horas de sueño después de una larga semana. Le dio un bocado a su tortita, hecha por su padre, deliciosas como siempre.

Procuró concentrarse en su comida, evitando buscar con la mirada al australiano, quién se encontraba en su propio mundo.

Sus padres habían pasado por la casa de los Seo a dejarle ropa antes de ir al trabajo, al tener que trabajar los sábados. Sus hermanos se encontraban en casa y aunque se podían cuidar bien, Chris no dejaba de pensar que tendría que estar con ellos.

Pero también empezó a pensar en otra cosa cuando la chica que le gustaba entró al comedor. La noche anterior se había despertado para intentar hablar con HyeRim, intentar confesarse tras ChangBin mencionarlo mucho antes de que se quedara dormido. No se acordaba de nada. Se debió volver a acostar al intentarlo y fracasar. Eso sería.

Debía disimularlo entonces, seguramente HyeRim no le daría importancia a un intento de conversación, seguramente lo vio muy dormido y no tomó en serio las palabras que no se acordó que dijo.

Ahora lo importante era su Abu, quién, aunque tuviera que ser en esa situación, conocería a la chica de la que su nieto tanto le habló.

Una vez que llegaron al hospital, tuvieron que esperar en el pasillo, fuera de la habitación de la abuela de Chris. Habían permitido pasar primero a los padres de los mellizos (al estar autorizados por los padres de Chris) y a Chris, al ser el nieto de ella.

ChangBin estaba mirando su móvil mientras que HyeRim estaba inquieta, no paraba de pensar en lo ocurrido de la noche anterior.

― ¿Binnie? ― no aguantaría sin contárselo a alguien.