Primer Amor. |Larry AU| [P.A. #01]

1. »Double Wedding.«

Holmes Chapel, Cheshire. (Mayo,1992).

Ya casi era un año de la fiesta de graduación, los planes de Anne y Johannah habían quedado como aquello.

Planes.

Después de aquella inolvidable velada con aquel par de chicos apuestos el mundo de ambas jovencitas había sido puesto de cabeza, todo había sucedido tan rápido que aún no lograban procesar el hecho de que aquellos chicos eran actualmente sus novios oficiales.

Johannah y Troy fueron los primeros, y es que ambos eran tan cínicos, desvergonzados y relajados que fueron directos desde un principio con sus intenciones.

Por otro lado Anne y Des eran algo más tímidos y discretos al momento de demostrarse lo que sentían el uno por el otro.

Anne era muy tímida y Des había logrado a vivir con ello.

Él chico dejó de asistir a fiestas, fumar e inclusive se centró más en la empresa de sus padres, él adoraba a Anne, él quería estar siempre junto a ella.

Por otro lado Troy había logrado pasar la "Prueba de fuego" al ser una de las personas más adoradas por aquella mujer.

La madre de Johannah.

Troy podía ser un imprudente y estúpido de primera pero eso era precisamente lo que a la ex señora Darling le agradaba del chico, Troy era tan ingenuo y gracioso, era un chico bromista, risueño con un corazón que valía oro pero sobre todo; Estaba perdidamente enamorado de su hija y no de trataba de un amor interesado sino que era amor sincero, de ese que siembras en lo más profundo de tú alma, de ese que logra matarte de un paro cardiaco, de ese que te hela la sangre así estés en la más cálida estación del año, de ese que logra desbordarte y superarte al límite de ser más fuerte que tú mismísima voluntad.

Ambas chicas se encontraban en aquel café charlando sobre lo bien que iban sus relaciones y es que sus chicos eran tan lindos y adorables, sin duda eran lo más importante para ellas.

El movil de Johannah vibró sobre la mesa captando la atención de ambas chicas.

"Llamada entrante: Troy Austin ♡. "

Johannah no dudó en contestar la llamada y antes de que Anne pudiera hacer algo la chica ya se encontraba con su movil descansando el espacio de su hombro y su oreja mientras sonreía estupefacta al escuchar la voz de la persona que se encontraba tras la linea.

-Si amor. -Ríe- Si Troy, ya voy para haya ¿Vale? Te amo.

Seguido de eso la castaña colgó la llamada depositando su teléfono movil en el bolsillo delantero de su gran bolsa de mano.

-Amiga tengo que irme, Troy está en mi casa, reunió a la familia. -Informó Johannah mientras se retocaba el brillo labial.

-¿Todo está en orden? -Cuestionó Anne angustiada, ella conocía la historia de Johannah y se le hacía bastante extraño que su familia se le fuera a juntan pero más que extraño le preocupaba el estado emocional de su mejor amiga.

-Todo está perfecto Anne. -Aseguró Johannah con una sincera y radiante sonrisa en el rostro mientras guardaba sus pituras en el bolso y soltaba un suspiro enamorado- Anne ¿Tú crees que Troy me vaya a pedir matrimonio? -Cuestionó la castaña, ilusionada.

Anne abrió los ojos como platos.

Johannah soltó la carcajada.

-Hace un par de días fui al apartamento de Troy, él se estaba bañando y había olvidado tomar la ropa interior de su cajón, así que me pidió que se la pasará, al buscar su cajon de ropa interior abrí un cajón y me di cuenta que esta tenia una pequeña cajita de cristal la cuál dejaba apreciar un lindo anillo de plata para mujer. -Comentó.

Anne se sonrojó ante el comentario.

Era más que obvio que Troy le pediría matrimonio.

Johannah suspiró y se incorporó, colgó su bolso de su propio hombro y de abalanzó a propinarle un beso en la mejilla a su mejor amiga.

-Tengo que irme Anne, si sucede algo yo te llamo. -Aseguró sonriente.

-Mucha suerte Johannah. -Soltó Anne con una sonrisa que no le cabía en el rostro.

*

1 mes después.

Era oficial. Johannah y Troy eran prometidos y se casarían en un par de meses.

Era un día lluvioso en Holmes Chapel, Anne había pescado un fuerte resfriado, se encontraba acostada en su alcoba mirando al techo mientras maldecía al jodido clima, por su culpa y por culpa de su resfriado ella no podría salir con su chico.

Dio un fuerte suspiro de resignación.

No tenia ganas de nada, tenia casi dos semanas sin ver a Des y se sentía bastante triste y abrumada.

Pasaron las horas y después de hablar con Johannah hasta las seis de la tarde sobre el tema de que le acompañaría a escojer su vestido, la pelinegra al colgar la llamada se sintió un tanto mareada y decidió dormir un rato.

*
Anne dormía placenteramente hasta que escuchó una piedra llamar a su ventana, la chica se giró temerosa para ver de quien de trataba y de paso ver la hora en el reloj digital que estaba situado en su pequeña mesa de noche.

La pregunta era; ¿Qué cojones hacía Des llamado a su ventana a las 2:47 de la mañana?

Anne abrió la ventana permitiéndole a Des el acceso a su acogedora habitación.

Anne rió incrédula.

-Tú si que estás loco ¿Que diablos haces aquí a esta hora? -Cuestionó la chica observandole en busca de una explicación.

-No podía soportar ni un segundo más sin verte mi corazón. -Respondió Des simplemente mientras la envolvía en sus brazos creando un cálido abrazo.

-Yo también te extrañe bebé. -Confesó Anne- Pero es algo tarde para que andes por las calles desiertas de la ciudad, puede sucederte algo, simplemente hubieras esperado a venir mañana. -Comentó la chica mientras le acariciaba el rostro a su novio con el pulgar.

-Es que tengo algo importante que decirte Anne, algo que no puede esperar ni un sólo segundo más. -Comentó Des algo ¿Sonrojado?

-Des me estás espantando ¿Qué sucede bebé? -Cuestionó la pelinegra con un nudo en la garganta.

-Anne Cox. -Des suspira mientras siente que el corazón estaba a punto de salirse por su boca- ¿Quieres ser mi esposa? -Le cuestionó a su novia incado sobre el frío suelo con una pequeña cajita que contenía un bello anillo mientras que Anne lo miraba con las mejillas sonrojadas y las manos sobre su rostro mientras unas cuántas lagrimas amenazaban por salir de sus ojos.

-¡Claro que quiero ser tú esposa Des! -Chilló Anne mientras se lanzaba a los brazos de su amado y esté la recibía gustoso.

Eso era lo que ambos querían, ellos se amaban.

Des le colocó el anillo a Anne y una vez puesto la envolvía nuevamente entre sus brazos.

-Te amo. -Susurraron ambos al unísono.