4 -Parte 1-

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Vanessa
No entraba en mí de la felicidad. Nos amamos. Es decir hace tiempo que yo sabía que amaba a Emi, pero ahora se que el me ama a mí.
Estuvimos hasta pasada la medianoche en la paleta. Sin soltarnos, son dejar la boca del otro.
Años de miradas, silencios, miedos, celos y deseo descargándose en besos. Cada movimiento de labio, cada pausa para recuperar aire, cad alugar en donde sus manos me tocaban quedaría en mí para siempre.
Eso era seguro.

-No quiero que esté momento acabe- susuro en mis labios Emi.

-ni yo.

Pero la realidad no se toma descansos. Nos detiene por más feliz que seas. Por más que lo desees con todas tus fuerzas. Es más, la vida real puede ser una hoja de puta.

-emi. - tenía miedo de seguir hablando - no quiero que dejemos de hablar como la última vez que paso esto. Se que te austa nuestra amistad pero...

-Vani, lo que dije sobre nuestro beso en tu cumpleaños... No me daba miedo nuestra amistad. Me daban miedo mis sentimientos. Vos sabés que no soy de expresarlos mucho... Cómo sea, está vez no me voy a alejar, ni voy a dejar de hablarte.
No importa que pase.

Le creí. Porque es imposible no creerle a esos ojos marrones, cálidos y seguros ya esa sonrisa tierna.
Y por unas dos semanas todo fue perfecto. Cumplió su promesa y fue increíble. A principios de diciembre ya nos comportamos como novios.
Caminabamos de la mano, nos besamos, íbamos al cine, a la playa, nos besabamos, le vi jugar a la pelota y me escuchaba horas hablar de Kinesiología (pasión que había descubierto hace poco) y nos besabamos más.
Bueno pasábamos mucho tiempo besándonos, pero no me quejaba.
Todo parecía ir bien, excepto un día, Emi estaba raro. No me llamó, ni me fue a ver a mí casa durante todo el día. Y en la noche, cuando lo fui a buscar yo a su casa, se lo vio distante. No me dejó pasar a su casa. Solo me ofreció caminar un rato.
Pero al dia siguiente estaba normal, como siempre, amoroso y feliz.

Decidí ignorar aquel día, se acercaban las fiestas y pense que todos podiamos tener malos días. Pero entonces Y hasta el día de noche buena tubo varioas dias así, que no me hablaba, que no me dejaba entrar en su casa. Entonces todo fue a paero la noche despues de navidad. Cuando cansada ya de su estupida actitud lo enfreté. Fue en mi casa, caundo vi que le lelgo un mensaje a su recien obtenido telefonoc elular y lo escondió para que no lo leyera.

--¿Emiliano vos te pensas que soy tonta?-- le pregunte.

--¿Que decis Vani?--me contesto un poco sorprendido -- ¿por qué me preguntas eso?

--Porque hace dias estas raro, no me hablas, te cuesta mirarme a los ojos, ahora escondes el telefono... a mi no me importan tus mensajes Emi, pero me gustaría que fueras sincerocon migo...--le dije con voz queda, yo solo quería saber cúal era el problema ahora, porque precía que el universo no nos quería dejar en paz.

--Vani... no es nada... estoy con algunas cosas...--de nuevo, como esta ultima semana, no me miraba a los ojos. Sabía que mentía.

--Emi--me acerque a él y lo tome de las manos, tenía la cara triste y parecía cansado -- me podes contar que te pasa, te voy a escuar y a entender.

Emi suspiro y me tomo del rostro, me miro la cara analizandola detenidamente, como si quiera recordar cada detalle de ella. Era un gesto tierno pero su expresión triste no me dejo pensar en -eso.

--No quería decritelo, porque no quiero hacerte daño...--ya me esperaba lo peor-- despues de año nuevo me voy a Buenos Aires, un tipo de Independiente me ficho para las inferiores.

Por un moemtno me pareció que estaba haciendo una joda, pero ccuando le vovlía a ver los ojos me di cuenta de que no. Entonces quise enojere con él por eso, quise gritarle, empujarlo lejos de mi, pero en realidad solo me puse contenta. Triste también, pero este era su sueño, y lo esta empezando a cumplir.

--Sos tonto-- le pegue suavemente en el pecho-- me hiciste asustar. Felicitaciones Emi.

Él me miro confundido. --¿No estas enojada?-- negue-- no te quería decir porque Buenos Aires esta lejos y nosotros dos...

--Si ya se --lo interrumpí -- pero es tu sueño desde siempre Emi. Yo se que es triste, feliz feliz no estoy... Pero quiero qeu seas feliz y que cumplas tus metas. Además Buenos Aires no esta tan lejos, nos podemos llamar o visitarnos.

Me miro sonriente, la cara se la ilumino como antes por primera ve en la seman y supe que había tenido la reacción correcta.

--Te amo- me dijo-- y me alzo dando bueltas y besandome. -- Vamos a seguir juntos, hice tanto escandalo al pedo

Me reí y le di la razón, pero algo me decía que las cosas nuca son tan fáciles.



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