Daddy Yugyeom. Yugkook.

Capítulo 7

—¿No le has hablado desde entonces?— preguntó Mark, tosiendo al haberse atragantado con el jugo que estaba tomando. Jungkook ya les había dicho sobre su conversación con Yugyeom, y ahora le está contando a sus amigos como ha pasado una semana y ellos aún no han vuelto a hablar.

Jungkook frunció el ceño al notar cuán impactado estaba Mark cuando él asintió. Se giró hacia Félix quien reía a la vez que jugaba con las mejillas de Mark. Jungkook solo pudo sacudir su cabeza, cuando esos dos estaban juntos, solamente había caos. Es difícil tener amigos con mentalidad de un niño de cinco años. Mark era tan frío y dramático cuando Félix estaba en Australia y ahora que está aquí, Mark está muchísimo peor.

—¡Yah! ¿Ha pasado una semana y todavía no hablan?— exclamó Mark cuando se calmó— Esa no es la forma de dar segundas oportunidades, ¡Tienes que hacer algo!— agregó, actuando como si supiera todo.

—¡Oi yah! ¡Yo fui quien le dió la segunda oportunidad! ¿Porque soy yo el que debe hacer algo?— preguntó Jungkook con desconfianza apuntándose a si mismo— ¿No debería ser él el que al menos debería contactarse conmigo o venir hacia mí? No soy yo el que está intentando arreglarlo.

—Bueno, tienes un poco de razón— lo apoyó Félix, dándole un sorbo su café helado. Están en la cafetería donde Jungkook trabaja, pero su turno ya terminó así que está ahí como un cliente y no como un trabajador.

Jungkook y Mark querían ir a otra cafetería, pero Félix no quería perderse la oportunidad de ver a su novio, Changbin. Un mes en Australia hizo al australiano extrañar un montón a su novio e incluso aunque el otro este trabajando, está más que feliz de ver hacerlo y Mark y Jungkook siendo sus mejores amigos aceptaron pasar tiempo en la cafetería donde Jungkook y Changbin trabajan.

—Ha pasado una semana y el ha dido el que no ha aparecido, sabe dónde trabajo, entiendes, el simplemente podría venir aquí e intentar remediarlo— dijo Jungkook al mismo tiempo que ponía los ojos en blanco, la irritación visible en su voz.

Después de ese día en que Yugyeom y él hablaron, no volvió a verlo de nuevo. Ha pasado una semana y no sabe dónde está el mayor. Ni siquiera tiene su contacto y no sabe dónde vive, bueno...no es como si fuera a ir si es que lo supiera.

—¿No puedes ir a su empresa?— sugirió Mark sonriendo de oreja a oreja como si hubiese dado la mejor sugerencia, pero hizo un puchero cuando Jungkook le lanzó una mala mirada.

—Ni siquiera pienses que iré ahí, Mark Tuan— dijo— Ni siquiera quiero ir a esa parte de la ciudad dónde esta su empresa, solo luciré como un campesino.

—¿Un campesino? Amigo, el padre de tu hijo es una de las personas más millonarias aquí en Corea, ¿Y te estás llamando un campesino?—dijo Félix— Vamos, dijiste que lo perdonaste y lo demostraste dándole una segunda oportunidad. Es tiempo de que dejes de ser tan amargado porque creías que él había elegido su fortuna ante ti, y Yugyeom dijo que no fue por eso, ¿Verdad?— dijo Félix calmado, Mark asintio en apoyo a lo que su amigo había dicho.

—Si, lo perdoné y le di una segunda oportunidad— dijo Jungkook antes de suspirar y poner su mandíbula en la palma de su mano, luciendo serio— Pero aunque sea millonario, no significa que no seré pobre. Ustedes saben que no tenemos nada que ver entre nosotros dos si no fuera Jaemin. No tiene nada que ver conmigo, es solamente por Jaemin.

—Ustedes dos tienen un hijo ahora, ¿No sería mejor si...ya sabes...Yugyeom hyung y tú están juntos de nuevo?— dijo Mark dudoso. El sabe lo mucho que Jungkook a odiado a Yugyeom, e incluso aunque su amigo haya perdonado a Yugyeom, no es tan fácil como 1, 2, 3 juntos otra vez.

Jungkook no respondió. Se mantuvo en silencio perdido en sus pensamientos.

¿Estar juntos de nuevo? ¿Y quizá ser herido por segunda vez?