III: Una Misión para Nami

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POV Nami...

Solo recordaba estar en el Sunny con los chicos, después llegaron unos tipos en un barco del cielo. Luffy y los demás lucharon con ellos, sin embargo, la otra tripulación los logró contener hasta que una chica me dejó noqueada, de ahí no recuerdo más ¿estaré en el Sunny? ¿Todo esto habrá sido una especie de sueño? Desde la noticia de Villa Cocoyashi hasta ahora. Si ahora me despierto estaré en mi habitación en el barco?...

Abrí mis ojos y logré ver que... No era un sueño, estaba en una habitación que no era la mía, sus paredes eran de ladrillos de concreto, contrario a la mía, que eran de madera.

Miré a un lado y a otro, se escuchaba el sonido de una ducha, después me dirigí a la ventana de donde estaba, definitivamente estaba a muchos metros de altura, estaba en una especie de montaña, no, una cascada, abajo alcanzaban a ver unas edificaciones.

Eso fue lo que alcancé a ver, hasta que oí que alguien salía del baño, me giré de inmediato, y ahí estaba ella, la misma chica que me había derrotado en el Sunny.

"Al fin despiertas" me dijo ella, que dicho sea de paso, estaba completamente desnuda.

"¿Dónde me trajeron? " le pregunté poniéndome a la defensiva, agarrando lo primero que pude, que era... No lo puedo creer ¡¿un maldito peluche?!

"En estas ocasiones se suele responder buenos días, cariño" me respondió sin resolver mi duda.

"Pregunté algo" le dije frunciendo el ceño.

"Hmm... " eso solo me ponía más nerviosa "ya que no estás de humor ahora mismo, bueno, estás en Waterfall Island, una isla del cielo"

Ella se fue acercando lentamente, estaba desarmada y aún así era un tanto intimidante como venía hacia mí con esa expresión despreocupada, como si no tuviera ni un poco en consideración lo que podía hacer, como si no fuera ni la más mínima amenaza para ella.

"¿Dónde están Luffy y los demás? " pregunté dando pasos hacia atrás.

"No lo sé, bebé, tu capitán nos iba persiguiendo cuando veníamos, aunque después lo perdimos... De verdad que te quiere" respondió "No te pongas a la defensiva, no sé que pensarás, pero no queremos que sientas que te tenemos secuestrada"

"Es difícil cuando me trajeron inconsciente, si eso no es un secuestro no sé que es" le dije irónicamente con una sonrisa.

Sentí como mis piernas tocaban la cama, y delante mío estaba ella, mirándome de arriba a abajo, analizando todo los detalles que podría tener mi cuerpo, sonriendo mirándome a los ojos.

"Creo que si te deberías poner a la defensiva ahora... " dijo ella, antes de que me diera cuenta estaba recostada en la cama, mis manos estaban aprisionadas, y sus piernas estaban a cada lado de mi cuerpo, su cara peligrosamente cerca de la mía. "Me gustan las chicas como tú, me dolió bastante tener que golpearte antes"

"¡Aléjate!" grité tratando de soltarme, sin embargo lo único que ella hizo fue pegar su cuerpo al mío, su boca estaba a milímetros de la mía, a lo que yo la apreté evitando cualquier acción que ella quisiera realizar.

𝑶𝒕𝒓𝒂 𝑽𝒆𝒛 𝑬𝒏 𝑬𝒍 𝑪𝒊𝒆𝒍𝒐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora