LIONEL MESSI
Arabia le ganó a Argentina, no lo podía creer. Noté su tristeza y enojo cuando la cámara lo enfoco a él. Me fui de la tribuna cuando note que estaba bastante vacía y me dirigí a los vestuarios. Antes de entrar revisé que no esté nadie cerca, entre al ver que solo estaba solo el sentando en un banco.
— Amor... —dije llamando su atención. Levantó su cu cabeza y me miró a los ojos.— ...vida, es el primer partido. —dije parandome adelante de Leo, para después arrodillarme— Vas a ver que en los próximos partidos van a ganar toditos. —puse una de mis manos en su muslo y la otra estaba acariciando su cachete.
— Gracia', gorda. —sonrió y me beso los labios, después se separó e hizo que me levantara para que me siente arriba de el— Manejo una bronca, quiero sacármela de encima.—llevo sus manos a mi culo y lo apretó.
— ¿Ah, si? —sonreí y enganché mis brazos atrás de su nuca— ¿Como te gustaría sacarte la bronca, amor?
—Mmm...—se hace el que piensa ye ataca el cuello, besándolo y succionandolo.— ...Capaz que si te pego una buena cogida se me va.—me susurro en el oído. Tan tierno que lo ven, ahí lo tienen.
Empecé a hacer movimientos circulares mientras le sacaba su camiseta. Llevé mis manos a sus pectorales y los acaricie, baje un poco y seguí en sus abdominales, como me gustaba este hombre, dios.
Leo me quito la remera y desabrocho el corpiño, cuando mis tetas quedaron al aire libre las manoseo t empezó a chuparme el pezon de una mientras que el otro era apretado por sus dedos.
— Mhm, Leo —suelto un jadeo y tiro mi cabeza hacia atrás sin dejar de mover mis caderas.
Hizo que me levantara para sacar su short y bajarse el bóxer. Aproveche y me saque el jean y la tanga.
Pense que se iba a volver a sentar pero no, me agarro de la mandíbula y me besó, llevándome hacia la mesa que estaba en medio de los vestidores.
Nos separamos del beso y me dio la vuelta para pegarme en la mesa boca abajo. Me agarro el culo, lo separó y lo nalgueo.
Pasó sus dedos por mis pliegues y soltó una risita— Que mojadita esta, amor. —introdujo dos de sus dedos en mi.
— Rompeme el orto, amor.—le supliqué mientras acariciaba mi clitoris.
Saco un condon de no se donde, se lo puso y se metió en mi sin avisarme.
— D-dios Leo, s-si. —sus embestidas eran con bronca, lo hacia tan fuerte, tan rico.
— Mmm—me agarra el pelo y me tira hacia su pecho— Que trola que sos, mirate. —me dijo en el oído mientras sonreía. Salió de mi interior, me volvió a dar la vuelta pero, esta vez hizo que me suba arriba de la mesa, apenas lo hice me penetro otra vez.
— Dios... —subió una de mis piernas a su hombro y el volumen de las embestidas aumentó.— M-más, amor. —llevo una de sus manos a mi cuello y lo apretó levemente.
Los dos nos vinimos mismo tiempo después de unas embestidas más.
Nos cambiamos más al rato, nos despedimos con un beso bastante caliente y cada uno se fue a su destino, el con la selección y yo al hotel.
— ¿Y esa wacha? —le preguntó Otamendi a Leo delante de la mayoría de sus compañeros.
— Y a vo' que te importa. —se río y caminó a buscar sus cosas.
— Como la vas a cojer ahi, wacho. —aparece Enzo y se pone al lado de Leo.
— Míralo al tierno de Lionel, más toro que Lautaro.—dice riéndose Ota.
Y desde ahí lo descansan cada vez que pueden, pobre
holiiiii
gracias personita que me hizo el pedido tq 💋💖