⚠️Este capítulo contiene escenas subidas de tono, lee bajo tu propia calentura⚠️
(Habrá un aviso para preparar palomitas y acomodarse en sus asientos)
– Katra Castle –
No hay explicación lógica en mi cabeza para poder saber cómo llegamos a este punto. Al final la decisión fue ir hacia mi departamento y pude mantener la cordura en el camino, pero ahora mismo no podía estar más lejos de mi buen juicio.
El que te empujen contra una puerta duele, pero por favor... THANIA ME ESTA PONIENDO CONTRA LA PUERTA.
Se me revolvieron los pensamientos.
—Tu habitación.
¿Mi qué?
—Chica ¿Dónde está tu habitación? — repitió.
Ah mi habitación... ¿Dónde está mi habitación?
—Al fondo a la derecha, es un departamento pequeño, tiene pocas... — cortó mi oración para tomarme la mano y arrastrarme hacia el pasillo, me distraje en su mano apretando la mía —...Habitaciones.
La puerta estaba entreabierta y nos metimos a tropezones gracias a que mi habitación estaba hecha un huracán. Me afirmé de sus caderas y sus manos tiraron de mí cabello un poco para descubrir mi cuello.
—Lindo cuello, permiso — su lengua hizo contacto y tomé una respiración larga.
Hola dios, soy yo de nuevo.
⚠️Horno encendido⚠️
Caí sentada en la cama y ella casi de manera automática se subió encima mío, mis manos se aferraron a su cintura con cuidado de no excederme, pareció molestarle porque las movió bruscamente más abajo.
—Estoy en tu habitación, sentada encima de ti, no te hagas la respetuosa ahora.
Se quitó la camisa con confianza y yo imité su acción asintiendo, ambas quedamos en sostén y yo repasé con mi vista la situación.
¿Qué procede? Un paro cardiaco.
En el fondo de mi cabeza sonó una canción de Romeo Santos tentándome a reír.
Y si te falto el respeto y luego culpo al alcohol...
Concéntrate.
Coloqué una mano en su espalda baja, mientras ella no salía de mi cuello, mi mano subió rozando su piel, hasta sentir el pliegue de su top negro, me despegué de ella, sin quitarle las manos de encima, la miré a los ojos preguntando un permiso silencioso.
Y lo que me gane fue una ceja alzada.
—No pregunto, ejecuto, si, perdón — mis manos volvieron a moverse tomando el borde del top y tirando hacia arriba dejando en libertad su pecho.
Fue inevitable no mirar, fue inevitable no tragar con fuerza.
Tiene.
Los.
Pezones.
Perforados.
¿Yo tengo estas vistas? Dios me ama.
—Si no te mueves, te dejo con las ganas y me voy — amenazó.
– Thania Knightley –
Todos estamos de acuerdo, amamos el consentimiento, que es importante, que no hay que sobrepasarse de la línea que es señalada, pero prácticamente la empuje hacia acá y aun sí sigue pidiendo permiso hasta para respirar. Entiende la indirecta por favor.
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Quédate conmigo (R)
RomanceThania ha pasado su vida tratando de encajar en su importante familia, gracias a eso no se ha dado el tiempo de ser feliz, verdaderamente feliz. Tal vez alguien con un sorprendente talento por las artes y paciencia para entenderla le dará lo que le...