Capitulo 4

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Un día soleado en lo alto de la montaña sur de la gran ciudad, una joven Carolina desciende velozmente entre los árboles para reunirse con su maestro. Carolina es una joven de diecinueve años, su pelo castaño alborotado por la velocidad en la que va bajando y sus ojos marrones claros que la permiten ver todo alrededor.

Carolina era descendiente de una familia con habilidades peculiares, entre ellas, una gran visión y una agilidad sobre humana. Hacía mucho tiempo Carolina estuvo en una gran aventura y ahora la han reclamado para volver a ayudar a su ciudad. Los padres de Carolina aceptaron en que fuera con el Maestro del bosque y se dedicará a entrenar para poder ayudar una vez más.

Carolina estaba deseando volver a repetir otra aventura como la que vivió hace seis años. Aunque todo era un recuerdo borroso y no era algo que comentase a menudo, ya que siempre la trataban de loca cuando mencionaba sus viajes en el tiempo.

Tras correr por la colina llegó al templo del maestro del bosque, un templo en medio de una arboleda, en medio de una gran ciudad. AUnque estaba a simple vista, el templo permanencia oculto a ojos de los que no necesitaban saberlo. Solia residir bastante gente en él, casi todos eran expertos en artes marciales o algun que otro viajante que se le permite el acceso, para el resto del mundo, solo es un templo donde rezar y pedir deseos estupidos.

—Hola maestro, ¿Crees que vendrán? – Preguntó Carolina fatigada

—Sí, ya han visto lo que pueden hacer, aunque quizás sea algo difícil hacer que lleguen hasta el templo – El maestro estaba algo preocupado, el tiempo se les echaba encima – Contigo fue fácil, ya sabías todo lo que podías hacer y tus padres fueron muy amables dejándote venir, pero ellos...son personas normales, con un don que se les ha concedido provisionalmente.

—Sí bueno...mi otra aventura no tiene nada que ver con esta...casi muero varias veces... - Carolina estaba algo preocupada, pero había practicado mucho

—Ahora eres la guardiana del bosque el cuarto elemento, y aunque llevas ventaja con ellos no debes desconcentrarte, es más es tu deber ayudarles a todos – el maestro del bosque miró fijamente a Carolina seriamente

—Tranquilo, aprendí trucos de mi tía y de mamá y bueno...algún truco extra, pero ya te los enseñaré - Carolina vacilo unos segundos y se fue a practicar.

Carolina entró al templo del maestro del bosque, allí dentro es donde debían reunirse todos los elementos para poder entrenarlos y poder proteger la ciudad del espíritu del aire. No sería una tarea sencilla, pero contaban con la ventaja de que el espíritu del aire aún no había aparecido. Cada cientos de años, surgen los elementos, los cuales son los encargados de apaciguar al espíritu del Aire, el cual ya destruyó la ciudad hace varios siglos.

Carolina se dirigió directamente al dormitorio que tenía preparado y dejó el arco y la daga en la mesa. Durante los seis años de tranquilidad que tuvo aprendió a disparar con arco y a usar armas blancas, había crecido mucho y no era la niña que fue cuando empezó su viaje.

Un día Carolina estaba ayudando a su Tía con las plantas, cuando sin saber cómo comenzaron a brotarle plantas alrededor de la mano y los pies. No sabia como había pasado, o si ella había hecho algo, justo en ese momento el maestro del bosque apareció y les contó todo lo necesario a los padres de Carolina.

—¿Estás ocupada Carolina? – el maestro llamó al otro lado de la puerta

—Estaba leyendo, entré sin problema - Carolina se levantó de la cama

—Verás en una semana todos vendrán y tenemos que hacer unos preparativos para que decidan venir aquí – el maestro se quedó mirando por la ventana, con una pose de paz, tipica de la gente anciana – Y una de las condiciones es que usen sus elementos para que decidan aceptar venir – el maestro se giró Carolina – Y ahí es donde entras tú

—¿Yo? Que tengo que hacer

—Pelearas con ellos y les obligaras a usar su elemento, a menos que te de miedo

—¿Y cómo hago eso?, me acercó a ellos y les doy dos leches

—Buena pregunta y toma la respuesta – el maestro le dio un libro enorme, mas grande que el propio maestro

—Eh...¿Qué es esto?

—Es la leyenda de los cuatro elementos, hay vienen el entrenamiento que siguieron y como aprendieron a usar su elemento, por lo que tendrás que seguirlo para forzarles a usarlo – el maestro abrió el libro por una pagina al azar — ¡Ah! Es posible que vengan los tres a la vez por lo que tendrás que pelear con los tres – el viejo maestro se fue entre risas de la habitación

Carolina se quedó mirando el libro fijamente, y lo abrió directamente por la última página

—¡¿Qué? Dos mil páginas!, estará de coña - pero el maestro ya no estaba ahí

La risa del maestro sonaba por los pasillos del templo, mientras Carolina se deprimía un poco más cada vez que empezaba a leer una página del libro. Tras 200 páginas leídas Carolina decidió parar un rato y hacer otras cosas, entre ellas un enteramiento que el maestro desconocía y que seria necesario para su futuro. Carolina se cambió de ropa y se puso unos vaqueros de un tono verdoso con una camiseta de tirantes verdes y botas marrones. Cogió el arco, las flechas y la daga y salió por la ventana de la habitación que daba directamente al monte. Comenzó a subir la colina hasta llegar a la cima y tras comprobar que no había nadie decidió empezar.

Se sentó en el suelo y comenzó a emitir un pequeño murmullo. A los pocos segundos un pequeño lobo apareció de entre los setos y comenzó a acercarse a Carolina muy despacio.

Cuando el lobo estaba pegado a Carolina este se sentó a su lado y comenzó a vigilar alrededor de ella que nadie la viera.

—Buen chico – le acarició la cabeza y empezó a trabajar

Poco a poco a Carolina le comenzaron a brotar hojas en su cuerpo hasta cubrirla en una especie de arbusto y con un pequeño movimiento Carolina se convirtió en un espíritu del bosque. Su cuerpo verde brillante y sus ojos rojos llamando destacando entre todo su cuerpo, su figura tapada por enredaderas y fundiéndose con el verde del suelo

—Me encanta esto – No pudo evitar sonreír al lograrlo a la primera

Empezó a andar y a correr por todo el monte con el pequeño lobo siguiéndola a todos lados, al ser un espíritu del bosque podía moverse entre los árboles y las plantas, sin sufrir daño y sin dañar ninguna planta, pero el poder se agota muy rápido, Carolina no pudo frenar y terminó metiéndose en un arbusto de moras

—Menos mal que no son venenosas – se levantó como pudo y se sacudió el polvo y las hojas que se engancharon en la ropa – Gracias Lobito, puedes volver a casa

El lobo asintió con la cabeza y con un pequeño aullido volvió por donde había venido. Se fue a la zona de prácticas que tenía el maestro en la parte de atrás del templo. Hacía tiempo que Carolina se dedicaba al tiro con arco y había mejorado mucho con ello. Pero no conseguía superar a su madre en ello, claro que su madre había vivido en una época salvaje donde o aprendes a disparar o te mueres.

Cogió una de las flechas y apuntó a la primera diana y dio rozando el centro de la diana.

—Joder – comenzó a gruñir – Mama le habría dado seguro

Carolina estuvo practicando hasta que el sol comenzó a ponerse y no conseguía ver bien por donde iba disparando. Volvió a dentro del templo y seguir leyendo el pedazo de libro que el Maestro del bosque le había dado. El libro contaba como los elementalistas derrotaron al espíritu del aire, pero solo sobrevivieron cuatro de ellos, fuego, agua, tierra y oscuridad.

— ¿oscuridad? ¿Desde cuando eso es un elemento?

Esos cuatro elementos decidieron crear la orden de los cuatro elementos donde entrenarían a futuros discípulos por si el espíritu del aire volvía, pero el tiempo pasó el espíritu nunca regresó a aparecer, por lo que la orden quedó disuelta al morir los cuatro elementalistas originales. Aunque el espíritu del aire salió victorioso en varias ocasiones, los elementalistas siempre consiguen ganar.

—Vaya libro más raro, empieza por el final , debería empezar diciendo como empezaron a descubrir los elementos o no se un hola querido lector de dentro de millones de años

Carolina siguió leyendo durante el resto de la noche, concentrada en entender cómo iba el libro y porque ninguna página tenía relación con la otra.

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⏰ Última actualización: Jan 10, 2023 ⏰

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