Capitulo 4

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Lin rápidamente se acerco a Arisu, esté tal como dijo Usagi estaba inconsciente, se sintió culpable por haberlo hecho pasar por todas esas cosas, el ya sentía una gran carga al llevar su dolor por la muerte de sus mejores amigos que eran como familia, ellos siempre habían estado para Arisu, daban cualquier cosa por él y ella además puso el sentimiento de culpa de porqué seguía vivo, cosa que él mayor también sentía, este cargaba con más de una pena.

-Que hacemos? -Pregunto Lin mientras se aguantaba las lagrimas y se le hacia un nudo en la garganta.

-Ayúdame a llevarlo, me estoy quedando aquí cerca -Respondió la contraria.

Ambas con dificultad cargaron al mayor donde Usagi las guiaba, Lin sentía un fuerte dolor en su herida cerca del estómago, pero pensó que era el dolor que merecía. Después de haber dicho que era cerca, el llevar un cuerpo muerto la volvió eterna, y a pesar de ser tan pequeña Lin se sorprendía de las habilidades de su nueva compañera y su resistencia al poder llevarle sin ninguna queja, pensó que alguien así merecía estar con Arisu, él merecía enamorarse de alguien mejor.

-Es aquí - Dijo finalmente Usagi.

Lin solo asintió pues se sentía muy cansada para hablar, al entrar dejaron a Arisu en el suelo y la menor acomodo la cabeza de este para que no estuviera incómodo.

-Están juntos - Pregunto la contaría.

-Como amigos - Le sonrió Lin - Perdón que te moleste pero podrías ayudarme con esto - Apuntó la joven al corte del cual salía una gran cantidad de sangre.
Usagi amablemente limpio con agua y vendo su herida nuevamente, le dio comida y otra polera ya que la que tenía estaba manchada y rota.

-Muchas gracias, te debo...

-No me debes nada, solo prometeme que seguirás viviendo - Dijo la contraria guardando algunas cosas.

-Viviendo - Se repitió la joven - Lo prometo - Dijo luego.

Lin se quedó limpiando el sudor de Arisu toda la noche, aún no despertaba y eso la ponía inquieta. Usagi le había dicho que tenía fiebre y que debían bajarla, por esa razón se turnaron para cambiarle paños húmedos que ponía en su cabeza.
En la mañana Usagi salió a buscar o cazar algo para poder comer, mientras la menor seguía intentando bajar la fiebre del mayor.

-Lin? - Escucho su nombre débilmente mientras humedecia el paño.

-Arisu - Se acercó rápidamente la menor para poner su mano sobre su frente - Como te sientes?.

-Porque me salvaste? - Preguntó mientras lloraba.

-Como? - Preguntó Lin confundida.

-No merezco vivir, porque me salvaste
Las palabras del mayor entristecieron a la joven, el no tenía la culpa pero ella lo había hecho sentirse así.

-No es tu culpa, perdón por todo lo que dije y te hice pasar - Le respondió la menor llorando - Dejame ser egoísta y tomar todo de ti, cuidame como mi hermano te pidió - Termino diciendo.

-Arisu despertó? - Preguntó Usagi qué recién llegaba.

-Si - Respondió el mismo.

Lin lo ayudó a sentarse y le sirvió un poco de agua que Usagi le dio, estas dos últimas prepararon lo que sería el desayuno, el almuerzo y la cena, pues más comida no se podía conseguir.

-Muchas gracias - Dijo Arisu haciendo una pequeña reverencia a Usagi.

-No es nada, tenemos que salir los tres de aquí - Dijo con una pequeña sonrisa.

-Cuántos días nos quedaban de visa - Le preguntó Arisu a Lin.

-Dos - Respondió cabizbaja la menor.

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