Capítulo Seis

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Thor salió de su habitación, de pronto un paseo para despejar la mente no sonaba tan descabellado, salió del palacio hacia los jardines la noche era calurosa, río para sí mismo, Loki odiaba cuando hacía demasiado calor, en ocasiones le pedía que hiciera llover y en recuerdo a su hermano el rubio se concentró y en cuestión de segundos una ligera llovizna lo estaba envolviendo.

Después de dar vueltas y vueltas tanto física como mentalmente Thor volvió hacia su habitación, esperaba que Jane tuviera algo de prudencia y ya no estuviera ahí, pero justo antes de llegar a su destino unas ganas incontrolables de ver a Loki lo llenaron, entro a la habitación de su hermano tan sigiloso como alguien de su tamaño pudiera hacerlo, se quitó las pesadas botas, caminó descalzo hacia la recamara principal y ahí estaba, el dueño y amo de todos sus afectos, el pelinegro se veía tan pacífico dormido, por un momento Thor pensó que si no hubiera sido tan estúpido en lastimar una y otra vez el corazón de Loki tal vez seguirán juntos y él ahora estaría recostado al lado del pelinegro abrazándolo después de haberle hecho el amor, pero muy en el fondo sabía que era lo mejor, tarde o temprano sus caminos se tendrían que separar y dolía, claro que dolía como el infierno no tener a Loki entre sus brazos pero por las nornas estaba claro que haber dejado atrás su clandestino amor era lo indicado. Thor se inclinó para darle un beso de buenas noches al pelinegro y sin querer sus cabellos empapados con lluvia gotearon sobre el sereno rostro de Loki.

"¿Hermano ? - dijo Loki apenas al abrir los ojos observando los ojos azules mirarlo con nostalgia - ¿Estas bien?, estas mojado, espera aquí "

Loki se levantó descalzo, como era su costumbre no llevaba nada sobre su dorso, volvió con una gran toalla esponjosa y se estiro para ponerla sobre los hombros del rubio.

"Sabes, estas actuando demasiado extraño - dijo el pelinegro después de esperar alguna palabra del rubio - no se lo que te pasa pero sabes que puedes contarme lo que sea "

¿Puedo dormir contigo? - pregunto el rubio sin ponerle mucha atención a lo que Loki decía- prometo no moverme mucho, te dejaré descansar "

"Oh, eso es raro- dijo el pelinegro sentandose en el borde de la cama - solíamos hacerlo cuando éramos pequeños, pero ahora...bueno, esta bien, creo que lo necesitas, pero anda vete a quitar esa ropa mojada, encontraré algo que te pueda quedar"

Una sonrisa se formo en el rostro del rubio, parecía una mascota agradecida cuando le daban una recompensa por su buen comportamiento, la sonrisa maliciosa de Loki no tenía igual, fue a su armario en busca de algo que le pudiera quedar a su hermano, finalmente encontró una prenda que le quedaría, entró al baño encontrando a Thor desnudo frotándose el cabello mojado con la toalla.

" Creo que este te podría quedar - Loki le extendió los pantalones y salió de ahí - te espero en la cama"

Thor sintió un escalofrío al oír la voz de Loki diciéndole que lo esperaba en la cama, de solo pensar que hace días esa frase tenía promesas de asuntos por demás agradables hizo a que su pene latiera interesado, dio unos cuantos respiros profundos, tendría que estar sereno si quería dormir al lado Loki.

El pelinegro ya tenía los ojos cerrados cuando Thor salió del baño, Loki dormía tranquilamente ajeno a las intenciones poco fraternales que Thor tenia en mente pero que ya estaban prohibidas entre ellos, el rubio se deslizó del lado contrario de la cama, se recostó boca arriba intentando conciliar el sueño, ahora se sentía tranquilo, cerca de él flotaba el olor de Loki y en cierto modo lo relajaba, quería rodar su cuerpo y enterrar su nariz en el hueco del cuello del pelinegro, aspirar de la fuente su olor, morderlo, lamento hasta que Loki volviera estar despierto y le pidiera que lo hiciera suyo en ese instante, Thor apretó los ojos había sido una mala idea seguir esos pensamientos, se estaba poniendo duro de nuevo, por un segundo contemplo la idea de tocarse a sí mismo, la presencia de Loki a su lado sería suficiente para correrse sin ningún problema, se reprendió por esos pensamientos, se giro hacia su lado izquierdo dándole la espalda al pelinegro e intento conciliar el sueño.

Poción de OlvidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora