── kiss me like nobody's watching !

¡ catorce !

— Creí que pensabas que Jeongin era molesto.

El Hwang mayor dijo de pronto en medio del silencio que había estado rodeando el coche durante la media hora que tenían viajando.

Minho estaba dormido sentado adelante junto a Bangchan, quien manejaba, Hyunjin sólo había estado mirando por la ventana el paisaje de los árboles pasar con rapidez y Jeongin dormía acurrucado en su brazo como si fuera una almohada. Ya se encontraban lo suficientemente lejos de Seúl, adentrados en la carretera, cerca de una hora y media o un poco más de llegar a Daegu y después adentrarse hacia Geochang, que era su ciudad natal.

Cuando Jeongin salió del edificio junto a Hyunjin con las maletas, los dos Hwang mayores no podían creérselo del todo, porque Yang se veía muy animado —como para ser las cinco con treinta de la madrugada— y familiarizado con su hermanito que era confuso, porque hasta donde ellos sabían, ese par no se soportaban demasiado.

Incluso cuando Hyunjin les había avisado que llevaría a un amigo, todos habían asumido que se trataba de Jisung, porque muchas veces antes él había ido a un viaje junto a ellos. Hyunjin no les había dicho absolutamente nada a ellos, así que era normal que se confundieran un poco por la repentina interacción de ambos, también por la forma en que Jeongin actuaba alrededor.

Desde que se subieron al auto, fue como si al principio ignorara al Hwang menor y pusiera toda su atención en Minho, con quien durante una muy larga parte del camino se mantuvo hablando sobre las últimas semanas y cosas que sólo ellos dos podían entender, después Minho fue el primero en caer dormido y Jeongin se concentró en Hyunjin.

Bangchan fue testigo de la sonrisa amorosa que se dibujaba en los labios de su hermanito, en la manera en que rodeaba sus hombros y le hablaba en voz baja para que sólo se mantuviera como una conversación privada. Y cuando Jeongin se durmió apoyado en su hombro, el Hwang menor le arrullaba con caricias suaves en sus cabellos mientras miraba por la ventana, como si estuviera acostumbrado a ello y fuera inconsciente de que sus dedos se paseaban por las hebras oscuras de Yang.

Fue lindo, porque no había visto a su hermanito de esa manera, siendo tan cercano e íntimo con alguien. No había dicho nada al respecto durante una gran parte del viaje, pero la curiosidad que lo invadió desde que los vió salir juntos del edificio no pudo ser contenida más.

— A veces lo es —admitió—, pero... no lo sé, es agradable.

— Entonces... ¿ahora son amigos?

Hyunjin no contestó enseguida, se mantuvo en un pequeño silencio mirando por la ventana. Pasaron por un pequeño túnel de árboles con las ramas largas y curveadas que parecían abalanzarse sobre ellos, lo que provocó una oscuridad temporal a pesar de que apenas eran las seis de la mañana.

— Algo así...

Bangchan lo miró de reojo por el espejo retrovisor, realmente curioso por el tono bajo y esa expresión en su rostro que no pudo descifrar en ese momento.— ¿Algo así? No invitarías a alguien de viaje con nosotros si no es realmente cercano.

— ¿Importa?

— Solo tengo una pregunta... ¿desde cuándo son tan cercanos?

— ¿Qué es esto? ¿Un interrogatorio?

Encogiéndose de hombros, respondió;— Sólo es curiosidad. Jeongin es amigo mío y de Minho y por lo menos a mí no me ha dicho nada sobre ti.

Mirando por el espejo retrovisor pudo notar la manera en que pegaba el cuerpo durmiente de Jeongin al suyo, como si estuviera protegiéndolo o quisiera sentirse reconfortado de alguna forma. Sea lo que sea que ellos dos tuvieran, se veían lindos allí atrás.